Mortales Entrometidos

7- No pude (Percabeth)

POV Zamira

¡Hola! mi nombre es Zamira. Un gusto conocerte.

Tengo el pelo rubio platinado y los ojos marrones. De guapa, soy más o menos. Aceptable, mejor. Pero no me quejo, hay que ser felices con lo que tenemos. Estoy alistandome para ir a la escuela: Odio tener que usar uniforme. Me miré al espejo ajustandome la corbata roja y tomé un collet para amarrarme el pelo en una cola de caballo. Cuando estuve lista, tomé mi mochila y salí de mi casa rumbo a la casa de mi mejor amigo, Percy Jackson.

Él tiene los ojos verde azulado y el pelo negro azabache desordenado. Y no voy a mentir, si, me gusta, mucho, pero soy muy cobarde. Por lo menos no soy tan obvia.
Y bueno. Puedo estar con él sin volverme loca. Si no, no sería su amiga.

Ya estoy dentro de su auto. Hablamos de lo aburrida que es la profesora de arte y lo mal que explica las cosas la profesora de lenguaje, y así pasamos el rato. Es extraño lo fácil que surgen los temas de conversación entre nosotros. Decimos lo que pensamos con tanta naturalidad que solo logra confirmar lo que está en mis pensamientos desde que me despierto hasta que me duermo: Somos el uno para el otro.

-Lo peor de la Señorita Emilia es que se enreda mucho en las palabras. Y es superirritante cuando tiene que dibujar en la pizarra y nosotros solo copiar, me gustaría que nos enseñara alguna técnica de dibujo que poder aplicar.- Dije yo sobre la profesora de artes. Yo soy buena dibujante y me hubiera gustado que la profe me lo reconociera. En el resto de materias, me va mal por más que me esfuerce. A Percy también le va mal, pero el es bueno también el Educación Física y un poco de Historia sabe.

-Si, toda la razón. Y la profesora de Matemáticas repite siempre lo mismo todas las clases.- dijo él.
-Eso es obvio, de repetir se tratan las matemáticas, tonto.- le dije. Él se dió unos dos segundos para pensar y luego cedió.
-Si, tienes razón...- Luego revisó su reloj.- Okey, ¿Por qué no corremos a la clase de Inglés y luego hablamos mal de ella?-

Corrimos hacia el salón de clase. No podía evitar mirar el movimeinto de su pelo mientras avanzabamos a toda velocidad

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Cómo era una negada para inglés, me la pasé juntando el valor suficiente para decirle a Percy lo que sentía por él. Desde que abrí mi cuaderno, en vez de escribir claves para recordar las frases del dictado, anotaba frases tipo:

"Nunca fuiste solo un amigo para mí"
"Espero que sientas lo mismo"
"Eres una parte demasiado importante en mi vida"
"Y si no sientes lo mismo, me gustaría que pudieramos seguir siendo buenos amigos"

Y de verdad esperaba gustarle. Esa posibilidad era tan de ensueño que no podía imaginarme cómo sería. A veces soñaba con ese momento:

Me paraba frente a él y en cuanto abría la boca, de mis labios salían todas las cosas que quería decirle. Cuando terminaba, lo miraba y estaba estupefacto, pero acto seguido me toma de las manos y me besa, dando comienzo a una hermosa historia de amor.

Pero el sueño solo me preocupaba más. Habían un montón me cosas que podían suceder y destruir nuestra amistad, así que por eso guardé mi secreto durante dos años.

-¡Psst! ¡Zamira! La profesora te habla.- me dijo Percy. La profesora le lanzó una mirada asesina y el se aclaró la garganta.- I mean... Our teacher is talking to you.-

-Miss Zamira, what is your answer in exercise three?- pregunta que por supuesto no había contestado. Tuve que excusarme de responder y ahí quedó mi dignidad. 

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Por fin terminé. escribí toda una página de lo que le quería decir a Percy. Era algo así: