DEMONIO TURCO +21 ( Bilogía Amor Turco)

3. RESCATE✔️

POV MOHAMED


Los vehículos cargados con mis mercenarios se movilizan y aceleran al máximo cuando doy la orden de aviso son quinientos metros los que nos separan del lugar que emite la señal de los dispositivos de rastreo instalados de manera quirúrgica en el cuerpo de los miembros de mi familia.

Una edificación vieja y deteriorada es el punto en que nos detenemos antes de descender, los intercomunicadores se activan dando aviso de que los mercenarios están listos en las ubicaciones pactadas.

Todo se encuentra sumido en un ensordecedor silencio, entramos a la fábrica y busco los accesos a la edificación a el otro lado de la calle los hallo rápidamente al notar que las ventanas se encuentran alineadas, todos nos movilizamos de manera que los del otro edificio no noten nuestra presencia

Los hombres en el lugar se comunica dando aviso de tener ubicados y marcados los puntos donde los secuestradores se encuentran con mis padres.

Los rodean silenciosamente mientras acelero buscando el punto ciego que me permita entrar

Recibo el machete que me entregan dejándolo en el arnés en mi pierna mientras subo las escaleras que me dejan en el último piso, todo es oscuro pero nada evita que mis hombres se ubiquen por los lentes de visión nocturna.

Encuentro el punto preciso y luego de prepararme y calcular las posibilidades de éxito aviso a los que me siguen de lo que haré

Tengo que salir por una ventana por lo cual flexiono las piernas y me impulso logrando un salto amplio que me deja en el lugar indicado, paso la ventana sin cristales atravesando de un edificio a otro caigo rodando hasta apoyarme sobre las manos y rodillas.

Volteo con una sonrisa en mi rostro al ver que de nuevo logré algo que se supone imposible, me levanto y paso las manos por mi cabello, suelto la liga que lo sostiene dejándolo libre

Nunca lo suelto a menos que alguien valla a morir y eso es lo que pasará, los hombres en el otro edificio se encargarán de asegurar los puntos desde las ventanas además de preparar los vehículos si algo sale mal.

Saco las armas de el arnés y quitó los seguros antes de moverme con cautela por el espacio, coloco el silenciador mientras salgo y bajo las escaleras, encuentro a algunos de mis hombres en el camino

Nadie se mueve porque soy yo quien inició todo, mi palabra es ley y las vidas de mis enemigos me pertenecen, ellos solo me acompañan como apoyo por si algo sale mal o necesito de ellos.

Sigo con algunos de ellos reposicionándose a mis espaldas hasta que llegó a el área con máquinas en las cuales se ocultan

Veo a mis padres atados, y amordazados lo cual solo logra que mi sangre hierva, evito enfocarme en su aspecto para evitar distracciones, hago una seña con los dedos la cual me contestan y es cuando los enemigos empiezan a caer rápidamente y a ser reemplazados por mi equipo

Hay al menos una docena de ellos en zonas visibles que me impide reemplazar o atacarlos sin revelar nuestra presencia

Después de un par de minutos estoy lo suficientemente cerca como para ver a detalle a los hombres que tienen a mis padres, frunzo el ceño al reconocer algunos rostros pero no es eso lo que llama mi atención si no a la joven desmayada y atada al lado de mi madre

Se encuentra desnuda y sangrando, no la conozco pero el instinto me indica que debo protegerla, sacarla de aquí, me congelo por un momento cuando el hombre robusto la abofetea exigiendo algo a mi padre a lo cual este se niega.

A pesar de los golpes y amenazas mi progenitor no se quiebra y termina escupiendo a el hombre ganándose más ataques en su contra

Sujetan el cabello de la joven y lo jalan revelando su rostro, tiene el pómulo amoratado, una ceja y el labio inferior partidos, está sangrando identifico cortes a los lados de sus costillas y muslos pero no parecen profundos desde mi punto.

— Da las malditas respuestas y la ubicación o las perras se mueren! — dice un tercer tipo desde una esquina mientras fuma un puro — o es que los secretos de tu hijo valen más que sus propias vidas?

— Cuando te vea tragando mi verga como la buena puta que debes ser lo consideraré — contesta mi padre escupiendo la sangre a los pies del hombre que lo estaba golpeando — mientras tendrás mucho trabajo para lograr que salga de mi algo más que insultos para tu madre.


Un grito de la joven al ser golpeada es todo lo que necesito para soltar los disparos que acaban con la vida de cuatro tipos regados en las esquinas del lugar, avanzó a pesar de los disparos y de los tres que se vienen en mi contra.

Los hombres de mi equipo actúan rápido estallando sus cabezas con disparos certeros que convierten el espacio en un reguero de sesos y sangre

Corro hasta el hombre que fumaba quien se encuentra apuntando me de manera torpe y tambaleante pero es mi machete el que arranca las armas dejándolas caer al piso con sus manos aún sosteniéndolas

Gruñe, grita y no se que más mientras su traje se mancha con si propia sangre mientras lo dejo en el piso yendo por lo que me interesa

Corto cabezas mientras las balas se atraviesan en mi camino, no me preocupo pues mi equipo me respalda y mientras yo arremeto en contra de los que me atacan desprendiendo manos, brazos y cabezas, ellos liberan a mis padres y a la joven.

Escucho los pasos que se dirigen a la salida frontal que para este punto debe encontrarse despejada y libre de amenazas mientras yo sigo con lo mío, todos yacen muertos desangrados y sin representar ningún peligro para nadie.

Mi equipo abandona el edificio escoltando a los rescatados para llevarlos a la mansión dónde el equipo médico ya debe estar esperando

Doy unos pocos pasos hacia el hombre de traje blandiendo el machete ensangrentado, este se encuentra débil por la perdida de sangre pero aún está consiente y con vida.

No por mucho.

Con la punta del machete levanto su rostro encontrándome con unos ojos grises similares a unos que jamás abandonan mis pensamientos

— Que es lo que pretendías hacer Samuil?

— Devuélvela! — exige con la poca fuerza que aún queda en su cuerpo — Tu la tienes… Dámela.


Me agacho frente a el dejando el machete a mi lado en el piso, con la mano retiro los mechones de cabello que me rodean el rostro moviendo estos hacia atrás pero se devuelven, resoplo por eso enfocando los ojos en el despojo de hombre frente a mi.

— Samuil… Samuil… Cuando entenderás que no la tengo y esto que has hecho solo ha logrado reducirte a esto — lo señaló despectivamente — estás a pocos minutos de morir.

— Solo déjame verla una vez — súplica con los ojos encharcados y es cuando noto que no estuvo jamás preparado para esta vida — es todo lo que me queda, es mi hermana!


— No la tengo así que no pidas cosas que no podré darte — suspiro dejando una de mis rodillas en el piso —¹ Samuil, pide tu último deseo porque lo que hiciste tendrá una consecuencia y esa será que dejes de respirar.

— Devuélvela —pide llorando y nada se remueve en mi interior — solo dime qué Lattiffa está viva… Dime qué está bien.


— Te daré algo mejor que eso — digo sacando el móvil de mi bolsillo y enseñando la imagen en la pantalla — mira.

Sostengo su rostro cuando ya no tiene fuerzas para que pueda ver con claridad, sus ojos se iluminan aún estando al borde de la muerte y la inconciencia, lágrimas y una sonrisa en su rostro al ver por lo que hizo todo esto, suspira dejando su último aliento satisfecho de ver a su sangre a través de mi móvil, entonces no cierra los ojos dejándose devorar por la inconciencia.

(…)

Dos horas después me encuentro en la clínica clandestina oculta en la parte de atrás de mi propiedad, la mansión Östürk es una fortaleza en todo el sentido.

Espero afuera del quirófano mientras intervienen a mi padre por lesiones internas a causa de los golpes que le dieron, una de las costillas perforó de manera superficial el pulmón izquierdo

Pienso en que de tardar un poco más en la oficina muy posiblemente estaría muerto

Mi madre fue violada y golpeada pero eso a ella parece no importarle ya que se encuentra a unos pocos asientos de mi mientras una enfermera cura las heridas en su rostro

La chica está en una de las habitaciones siendo atendida, le hicieron placas y exámenes que descartaron lesiones graves, a parte de tener algunos huesos rotos y contusiones se encuentra fuera de peligro, aún no reacciona así que está siendo vigilada hasta que lo haga.

Trago pasando la mano por mi rostro exasperado por el tiempo que lleva mi padre adentro, no he visto a Sherezade o a Hurrem ya que entramos por las puertas ocultas en la verja de seguridad atrás de la mansión

Decido ir a una de las habitaciones para hacerle una video llamada a Sherezade quien me contesta de inmediato

— Habibe, por Allah dime qué estás bien — pide sus ojos se encuentran inundados y las marcas oscuras bajo estos me dice que no ha dormido.

— Te di la orden de descansar — digo a lo cual baja la cabeza en señal de sumisión — en tu estado debes hacerlo, acaso no crees en mi? — su cuerpo se estremece por el llanto logrando ablandarme.


— Lo lamento Habibe, pero no pude — gimotea — prometo que lo intenté pero la preocupación no me dejó.

— Levanta el rostro — lo hace pero aún así no mira a la cámara — estamos en la clínica detrás de la propiedad, lava tu rostro y ven aquí, te quiero a mi lado, solo así lograre que duermas.


— Si Habibe, Hurrem duerme — dice mientras entra a el baño de su habitación — logré convencerla de cenar y luego me quedé con ella hasta que cayó rendida

— Hiciste bien, ahora ven mi gacela.


Lo último que veo antes de cortar la video llamada es sus mejillas sonrosadas y una ligera sonrisa en sus labios.

Entro al baño y lavo mi rostro pensando en lo sucedido, viendo el alcance de todo mi hecho en el pasado pero sabiendo que lo haría de nuevo, que no me arrepiento de nada y mucho menos de los ojos grises que protegí porque me dieron algo que nunca podré parar de agradecer.

Me repito una y otra vez que hice lo correcto y que ella se encuentra bien dónde está, no me perturban las lesiones de mis padres porque ellos siempre han Sido parte de esta vida y se encuentran preparados para todo esto

Me entrenaron para saberlo y entenderlo, miro el móvil con la imagen que le enseñé a Samuil antes de morir, mis ojos se iluminan porque daría todo por esto que tengo entre mis manos y es lo que he hecho.

Golpes en la puerta me obligan a salir del baño minutos después y a aproximarme a esta, rápidamente meto el móvil de nuevo en mi bolsillo bloqueándolo, es increíble como pasa el tiempo cuando me pierdo en esas imágenes.

Sherezade entra y antes de cualquier cosa tomo su rostro con mis manos y la beso, saco todo lo que llevo aguantando por dentro en ese beso, deslizo la mano por su cuello dejándola allí mientras la otra sigue el camino por sus pechos, su vientre y terminando en esa zona que ahueco antes de dejar ir un dedo aún sobre la tela en la abertura de su sexo.

Ella gime y disfruta sin resistirse sabiendo mejor que nadie lo que necesito en estos momentos, me giro dejándome del lado de la puerta y doy los pasos que nos separan de la cama sin soltarla

La dejo caer de espaldas en la cama y ella rápidamente levanta las manos hacia su cabeza y las une entrelazando sus dedos, levanto el borde de su vestido arremolinándolo a la altura de sus senos

Observo su vientre antes de tomar los pezones y pellizcarlos logrando que gima y contonee las caderas, deslizo los dedos por los laterales de su ropa interior y la desgarro, subo sus rodillas pasándolas por mis antebrazos acercándola más al borde antes de bajar a su sexo libre de tela y empezar con los movimientos de lengua que la hacen estremecerse

Mis dedos se mantienen en sus caderas marcándola con fuerza pero por un momento la imagen de la chica desmayada viene a mi mente, me aparto de Sherezade soltando sus piernas por lo cual ella abre los ojos sin romper la posición.

Doy dos pasos lejos de ella y paso las manos por mi rostro y cabello halándolo hacia atrás, miro el cuerpo dispuesto y me niego a fallarle, ella es mi mujer y me ha servido bien así que me acerco y acaricio su vientre dejando un beso bajo su ombligo

Suspira recibiendo las caricias que le doy, bajo el elástico de los pantalones y el bóxer liberando la erección que alineó con su coño y me deslizo en su interior dejándome acobijar por su calidez, azotó su interior con fuerza hasta que nos corremos

Salgo de ella rápido a penas me recupero y subo la ropa saliendo de la habitación, la dejo para que se organice mientras me encamino a la habitación custodiada en la que se encuentra la causante de mi frustración Sexual.