VIII

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Naruto solo podía mirar el almacén donde Takemichi se había metido para intentar detener la pelea entre las dos bandas. Habían pasado unos días y hasta volvieron al pasado para hablar con el antiguo guardia de Moebius, Osana.

Fue en ese enfrentamiento donde empezaron los primeros roces entre Mikey y Draken. Y todo por una tercera persona que tuvo un problema con Moebius por lo que hizo a un amigo y su novia.

Lo que le parecía extraño es que ninguno de los suyos hubiera protegido a la pareja de la paliza como de la violacion. Y eso le hacía que en su mente se movieran engranajes para pensar qué hubiera pasado.

Es por eso que a su lado estaba Sasuke y Shino también mirando al almacén — Y nadie había reportado nada, Naruto-sama —

— Me estás diciendo que de las casi 5000 personas que había, nadie reportó nada — hablo Naruto todavía observando el almacén donde gente con uniformes blancos entraban

— Le prometo que nadie reporto nada, si no hubiera mandado más unidades —

— Si te creo Shino, la cosa es que como pudo haber pasado — para mirar a Sasuke que solo estaba fumando su cigarrillo — ¿Como va todo lo demás? —

— Bien, hemos recuperado economía pero todavía queda lo de los Black Dragon—

— Hablaré con él mañana, así también voy a por Yuzuha y Hakkai —

— Pasas demasiado tiempo con ellos — escucho a Sasuke hablar para girar y ver una sonrisa — Bueno con ella —

— Cállate — dijo molesto mientras veía el almacén donde empezaban a aparecer gritos — Pasó tiempo con quien quiera —

— Si — dijo con clara ironía para luego callarse — Naruto —

Naruto solo seguía mirando el almacén con las manos en los bolsillos — ¿Qué pasa Sasuke? —

— Tenemos compañía Naruto-sama —

El rubio solo se giró para ver a Sasuke y Shino delante de él mientras que en frente de ellos dos había una gran cantidad de personas con lo que podía ser diferentes armas y un uniforme de color arena y unos turbantes para tabar la cara dejando solo los ojos a la vista y con un simbolo que tenian todos de lo parecia ser un reloj de arena.

— Mira, mira que tenemos aquí escondidos en las hojas — escucharon una voz grave mientras que el grupo de por lo menos 100 personas se separaban para dejar pasar a un chico

Iba vestido con una camisa grande negra y de manga larga, unos guantes negros tambien que dajaban los dedos libres , un cinturón granate de tela y luego unos pantalones negros largos para dejar unas sandalias negras y a su lado derecho tenia una pequña bolsa. Pero lo que más destacaba era los tatuajes de color purpura en su cara haciendo que tuviera una aparencia mas trivial con el pintalabios morado tambien, pelo marron revoltoso y ojos marrones pequños.

El chico se puso enfrente del grupo de 100 personas mientras que Naruto y sus compañeros miraban con expectación, para que en un chasquido del que parecía el líder un cuerpo fuera tirado en frente de las tres personas.

— Naruto-sama — dijo la persona mientras que llegaba a los pies del rubio con heridas graves en la cara — Necesito hablar con usted, por favor —

— Luego hablaras conmigo — dijo el rubio mientras le ayudaba a levantarse para sentarlo en un tronco y girarse hacia el chico que solo sonreía con arrogancia y felicidad — ¿Quién eres? —

— ¿Quién soy? — dijo el chico con un poco de gracia — Kankuro, Segundo al mando de Suna —

— ¿Quién soy? — dijo el chico con un poco de gracia — Kankuro, Segundo al mando de Suna —

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