Capítulo 20 "¿Te acuerdas?"

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POV Paul

Hay más?
O por dios, espero que no nos aya visto realmente temo que nos tema.

--Hay más?-pregunta Leah, ella asiente.

--Cuenta, cuenta-dice Embry mirandola fijamente.

--Pues resulta que cuando me giré para regresar a casa vi unas pisadas de lobo-todos la miramos atentos, ella no mostraba ninguna señal de inquietud o temor.

--Y que tiene eso de especial-Pregunta Jake extrañado.

--Si le dejais que termine alomejor lo sabemos-dije cansado de que la interrumpieran.

Ella me sonrió, no apartó los ojos del suelo, pero sabia que esa sonrisa iba dirigida hacia mí.

--Gracias-me dice.

--Denada-digo admirandola con una sonrisa.

--Paul!-advierte Sam

--Perdón-digo dandome cuenta de que estaba mirando muy fijamente a su hija.

--Bueno, el caso es que no eran pisadas normales correspondientes a lobos normales.....eran pisadas enormes, correspondientes a lobos gigantes-dice con una pequeña sonrisa.

Todos nos tensamos entonces, pero ella seguía en lo que parecía una ensoñación, seguía en su mundo.

--Y...viste algún lobo de esos?-preguntó Embry.

--No, pero-miro a su padre- te acuerdas del lobo negro gigante que vi cuando era pequeña?-dice sonriendo.

--Claro que me acuerdo, desde entonces estas obsesionada con esos animales-dijo Sam sonriendole a su hija.

--Bueno, pues creo que era de ese mismo lobo, más bien de una manada de lobos gigantes entera, su manada-terminó con un brillo indescriptible en los ojos.

Silencio, lo único que se escuchaba era silencio, y el corazón de Lily, el rápido latido de su pequeño corazón se escuchaba junto a su respiración.

En los siguientes cinco minutos solo era silencio.

--Hago la comida?-Lily rompe el silencio mirando a su madre.

--Si quieres....-contesta Emily con una sonrisa.

Lily asiente y se va a la cocina, ella nos ara la comida, increíble.

POV Sam

No quiero que estos perros sarnosos coman la magnifica e increíble comida de MI hija.

Desde cuando ha crecido tanto? Desde cuando se ha alejado tanto de mí?

Ya no me abraza como antes, ya no me da besitos en la mejilla como lo hacía con 7 años, desde que se fue a Alemania no es la misma. A crecido, ahora está más desarrollada física y psicológicamente, está muy guapa, como se nota que es mi hija.

Tiene quince años, quince?! Dios mi hija está en la edad justa en la que se le acercan chicos babosos que solo quieren sexo con ella. Está en la edad en la que algún crío insolente va a querer arrebatarme a mi niña. No no no, esto no puede ser, no me pueden quitar mi bebé.

No, ningún chiquillo asqueroso va a alejar a mi hija de mi lado, ni ahora ni nunca. Ya lo verán....

El dulce secreto UleyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora