POV Sam
Demasiado mira a mi hija, les voy a sacar los ojos con una cucharilla de tomar café y se los voy a dar a los osos.
--Tengo una pregunta-dice Seth tímidamente.
--Dila-digo, preocupado en que va ha decir.
--Porque no nos mira a la cara?-dice Seth, mirando muy atentamente a mi hija, a la niña de mis ojos, a la mujer más valiosa de mi vida.
--Porque es tímida, no te importa-digo algo enfadado.
--Sam, cariño, relajate. Chicos creo que es suficiente por hoy, id a vuestras casas y descansad, os vemos mañana.-Dice mi maravillosa esposa Emily.
Los chicos se levantan poco a poco y se van, Seth pasa por delante de mi hija y noto como la mira, noto como olfatea disimuladamente su aroma.
Tranquilo cachorrito, que ha ti va ha ser al último al que mire a los ojos.
--Quieres que aga la comida mamá?-pregunta mi hija.
--Si eres tan amable cariño, yo voy a ducharme y papá tiene que arreglar unas cositas. Si quieres cuando terminemos te ayudamos.
--No hace falta mami-dice, y se pone ha hacer la comida.
Miro extrañado a Emily, arreglar unas cositas?, ella me agarra de la mano y subimos al segundo piso.
Ella entra al baño conmigo detrás y mientras se va desvistiendo y preparando todo para ducharse me explica.
--Sam, tienes que hablar con los chicos, no pueden hablar de la manada, ni de las transformaciones, ni de los vampiros, ni de nada de eso frente a Lily-dice preocupada.
--Y que ago? Es que la acaban de conocer y Jacob casi mete la pata, y Lily no es tonta, sabe que mentimos y que ocultamos algo pero..
--Pero nos respeta y no nos lo pregunta-completa Emily mi frase desde dentro de la ducha- la hemos educado bien, Sam. Estoy muy orgullosa de ella.
--Y yo cariño, y yo.
Cuando Emily termina de ducharse la acompaño al cuarto para que se cambie de ropa, mientras tanto vamos discutiendo como hacer una reunión con los chicos y como hacer que les entre en el cabeza que no pueden hablar de nada que incluya lo sobrenatural frente a mi hija.
Es que no lo van a entender, y como son tan bestias y tan torpes seguro que alguno mete la pata y acaba soltandole a mi hija que somos lobos. Son un poquito inútiles estos niños.
Cuando acordamos como hacer la reunión bajamos al primer piso y vemos a nuestra hija con la comida ya hecha, servida y lista para comer.
Esta niña si que sabe cocinar, ya les gustaría a los chicos probar una comida como la que hace mi hija, si ha enseñado a cocinar hasta a su madre, esta muchacha tiene talento para la gastronomia.
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El dulce secreto Uley
Fantasi𝖫𝗈𝗌 𝖴𝗅𝖾𝗒 𝗀𝗎𝖺𝗋𝖽𝖺𝗇 𝗎𝗇 𝗌𝖾𝖼𝗋𝖾𝗍𝗈, 𝗎𝗇𝗈 𝗊𝗎𝖾 𝖾𝗌 𝗏𝗂𝗍𝖺𝗅 𝗉𝖺𝗋𝖺 𝖾𝗅𝗅𝗈𝗌, 𝗎𝗇𝗈 𝗉𝗈𝗋 𝖾𝗅 𝗊𝗎𝖾 𝖽𝖺𝗋𝗂𝖺𝗇 𝗅𝖺 𝗏𝗂𝖽𝖺, 𝗒 𝖼𝗈𝗇 𝖾𝗌𝖾 𝗌𝖾𝖼𝗋𝖾𝗍𝗈 𝗇𝗈 𝗆𝖾 𝗋𝖾𝖿𝗂𝖾𝗋𝗈 𝖺 𝗊𝗎𝖾 𝖲𝖺𝗆 𝖾𝗌 𝗆𝖾𝗍𝖺𝗆𝗈�...