Smily

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Contrario a la creencia popular, Shoto no es una persona muy educada. Sí, es inteligente y culto, pero de hecho es alguien muy grosero.

¿Grosero? ¿Esa persona fría y distante, que puede a veces tener una actitud infantil es grosera?

Sí, claro que lo es, no utiliza honoríficos, lo cual ya es considerado bastante grosero en Japón. Tampoco tiene respeto por la autoridad. Se dice que cuando tenía 15 años insultó y estuvo dispuesto a enfrentarse al director de las fuerzas de investigación criminal en ese entonces luego de sobrevivir, documentar y ayudar a capturar al famoso asesino en serie de Hosu que la prensa llamaba "El Asesino de Héroes".

¿Entonces él es alguien inteligente, descortés y sin escrúpulos? Por supuesto que lo es. Debe ser por eso que es tan buen periodista.

Oye, un momento. ¿A qué te refieres con actitud infantil?

Oh, cierto. Lo había olvidado. Un descuido mio. ¿Recuerdas las etapas de una persona? Ya sabes, la infancia, niñez, adolescencia, juventud, etc. 

Bueno. Resulta que no puedes eliminar etapas, puedes saltarlas, pero volverán en el futuro. Shoto de pequeño se vio obligado a crecer muy rápido, se saltó toda su niñez, pobrecito. La gente que hace esto se caracteriza por tener un comportamiento infantil cuando son mayores.

Shoto ingresa a la oficina de su abogado algo nervioso por los papeles que acaban de llegarle. El hombre es uno de los mejores abogados del país a pesar de su actitud grosera y apodos despectivos que suele colocarle a las personas. 

--Bastardo Mitad-Mitad. 

--Bakugo. Te he dicho que dejes de llamarme así. --Shoto cierra la puerta y mira al hombre claramente atractivo a la vista regalarle una sonrisa burlona.

--Está bien… Todoroki.

--Ese es mi apellido de soltero. Sabes que soy ahora Midoriya.

--Ah cierto. Había olvidado que te casaste con Deku.

--Bakugo… --Shoto hace una mueca ante el apodo y reprende suavemente con un tono de voz entre fastidiado pero al mismo tiempo divertido.

--Ya, ya. Cálmate, solo bromeaba. --Los ojos rubí se posan en los documentos a los que el bicolor se aferra y tiene una perfecta idea del motivo por el que vino. --¿Otra denuncia?

--En realidad… Vine a tí porque no sé qué hacer. --El periodista luce incómodo ahí parado mientras habla por lo que el peliceniza le señala la silla frente a su escritorio bruscamente.

--Pásame eso. --Bakugo prácticamente le arranca los papeles al bicolor una vez que este está sentado y escanea el documento antes de hacer una mueca al captar el contenido de esta. --Esta es una clara carta de amenaza. ¿Deku lo sabe?

El abogado siente ira recorrer su ser cuando el menor baja la cabeza y niega con la cabeza lentamente, sabe que no tiende a contarle a su esposo sobre todas las cartas que recibe porque según él no quiere preocuparlo con sus problemas cuando está muy estresado por el caso de Smily, pero eso ya es demasiado.

>>Y una mierda helado de fresa. Deku es el director de las fuerzas de investigación criminal de Japón y tu puto esposo.

--No. No puedo simplemente aparecer ahí y poner más carga en sus hombros, últimamente está llegando más tarde a casa...

Ya de madrugada Shoto está acurrucado en la fría cama matrimonial sin poder dejar de pensar en el contenido de aquella carta ciertamente más perturbadora que el resto. Recibe amenazas y denuncias a diario por su trabajo, sabe lo peligrosa que es su profesión y que tal vez debería decirle a su esposo sobre eso, pero cada vez que quiere sacar el tema su esposo o algo lo corta y nunca puede terminar.

Oye las llaves y la puerta de la entrada principal cerrarse y no se mueve cuando su esposo ingresa al cuarto y se mete de frente a la ducha apenas notando la fragancia a perfume de mujer que deja cuando pasa junto a él. 

Espera pacientemente hasta que sale de la ducha secándose el cabello con una toalla y los boxers puestos dejando ver su abdomen marcado y músculos firmemente tonificados acercándose y dándole un beso en la frente.

--¿Sigues despierto?

--Si… --Shoto se levanta y lo besa lentamente con pasión, quiere dejar de pensar en la estúpida carta. Pasa sus manos por el abdomen de su esposo y lo acaricia brevemente antes de que este lo aparte suavemente y se recueste en la cama.

--Lo siento. Hoy no Shoto. Estoy cansado. Hubo una junta de última hora y descubrimos un nuevo cuerpo que seguimos sin identificar.

--Oh. Está bien. No te preocupes, lo comprendo. --Shoto espera que su voz no suene decepcionada o triste y se acuesta en la cama cubriéndose con las mantas sin poder dormir hasta el amanecer.

Notas:

•No hubo una junta de última hora.

He notado que nadie lee esto xd

Casi nadie vio la página del periódico xd