Capítulo 1: Perdido en la Ciudad.

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Marshall suspira.

- Han pasado ya 5 años. Y sigo en la calle. ¿Qué destino me depara?

Marshall caminaba por las afueras de Ladriburgo. Un bosque algo intenso al lado de la carretera. Marshall pensaba todo lo que vivía desde que se había separado de sus hermanos de crianza: El Pastor Alemán Chase y la Norkfold Terrier Kelly. Marshall había tenido una infancia imposible, hasta que se hartó y escapó.  Marshal era hijo del grandioso dálmata bombero titular de su regimiento, Blaze. Sin embargo, sus títulos de bombero eran en vano, pues había maltratado sobremanera a Marshall, haciéndolo entrenar, descuidando sus enfermedades y heridas y apenas le daba de comer. Con tanto esfuerzo y poca energía, Marshall salió corriendo junto con su hermano de crianza Chase. Mucho le dolió cuando se enteró que su hermana Kelly se había mudado con su familia y desde ese día fatídico, Marshall quedó sólo. Vagando por las calles con Chase, la perrera los persigió y consigió atrapar a Chase. Marshall sólo contaba con su sobreconocimiento médico y su duro entrenamiento de bombero y emergencias médicas, que decidió ser médico. El problema era que no había encontrado hospital que lo atendiese. Iba a probar suerte en Ladriburgo en su hospital general. Finalmente, Marshall llegó a las puertas del hospital general de Ladriburgo, fue a la oficina del gerente director y entró.

- Hola. -Dijo un Marshall hambriento y descuidado. - Busco trabajo.

Dr.Kirk. -Hola. Yo soy el gerente de hospital. ¿Quiere ser enfermero?

Marshall: Sí. Por favor

Dr.Kirk. -Bien. Completa este test y veré qué hacer. ¿Sí? Tienes 2 horas y son 20 o 30 preguntas. Suerte.

El Dr.Kirk se va del lugar a la cafetería a tomar café con leche desnatada. 

Marshall observa el test y sonríe.

Marshall: Esto será rápido.

Marshal completa el test en 16 minutos. Sonríe satisfecho y observa si tiene que corregir alguna respuesta. Luego de cerciorarse, Marshall va donde el Dr.Kirk para darle el test.

Marshall: Aquí tiene señor.

El Dr.Kirk levanta una ceja, extrañado por la velocidad de su nuevo enfermero. Acto seguido, empieza a verificar el test. A pesar de las canas y la piel vieja y las arrugas en el rostro del humano, el Dr.Kirk no era tonto. Era un gran médico, asique con sólo ojear un poco las respuestas, sentenció.

Dr.Kirk: Felicidades Doctor Marshall. 

Marshall levanta una ceja asombrado: ¿Fallé en algo señor?

Dr.Kirk: En lo absoluto!! Has pasado cada respuesta correctamente. Sígueme. Te asignaré un sitio acogedor dónde puedas empezar y una enfermera que es novata aún en esto. 

Marshall: ¿Una asistente? Genial!!

El Dr.Kirk lleva a Marshall a una habitación bastante espaciosa, con instrumentos nuevos y remedios. Botellas de alcohol para desinfectar y mascarillas. Marshall al ver su nuevo consultorio, quedó boquiabierto.

Marshall (asombrado): ¿Esto es para mí? ¿Para que pueda ayudar?

Dr.Kirk: Claro Marshall. Es para ti. Tu enfermera pronto llegará. Por mi parte, ten. *Entrega a Marshall un sobre con su primer pago* Es tu primer pago. Por inscribirte. Espero te sirva.

Marshall toma el sobre con cautela: Gracias señor.

Dr.Kirk: Bah. Dime Kirk solamente. Bueno. Yo vuelvo al trabajo. Adiós. *Se va*

Marshall observa su consultorio, pensando en el bien que puede dar a los demás enfermos. 

Sin darse cuenta, una Norkfol Terrier entra al consultorio vestida con su bata médica.

Kelly: ¿Doctor? 

Marshall se gira y reconoce a su vieja amiga: ¿Kelly?

Kelly reconoce a Marshall y se emociona que lo abraza: Marshall!!

POV de Kelly.
Me sentía muy feliz. Realmente había vuelto a encontrarme a Marshall. Estaba tan feliz que lo abracé instintivamente. Su pelaje era casi tan suave como cuando éramos cachorros más pequeños.

Fin del POV de Kelly.

Kelly: Me alegra verte!!

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