Capítulo 5.

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Les dejo a Brave en multimedia chicas, agarrense las bragas!!

*

-Papá son las 9, a las 10 salimos, vayan preparándose- dije mientras bajaba por las escaleras.

-Está bien hija, pero una cosa... ¿tienes ropa para ir?- me preguntó y yo reí, sabía a lo que se referíaa, desde que llegué, he estado vistiendo con ropa muy femenina y colorida, típicas
de una niña pija, pero en el fondo de una de mis maletas yacía la ropa de Ángel, no podía deshacerme de ella.

-Sí, tranquilo- le contesté y él asintió, subí a mi habitación y me dispuse a elegir la ropa que usaría, ya me había bañado y tenía una bata envolviendo mi cuerpo, la cual dejé caer y
abrí mi armario, saqué la maleta y la puse sobre la cama inspeccionando toda la ropa que había en su interior, finalmente opté por unos pantalones cortos de talle alto negros, mis
adoradas medias negras rasgadas junto a mis botas que se asemejan a la de los militares, un top gris oscuro casi negro que dejaba al descubierto gran parte del estómago y como
guinda del pastel mi cazadora negra de cuero con un grabado en la espalda que pone "ÁNGEL" y nuestro famoso logo. Comencé a vestirme, primero me puse la ropa interior y
cuando estaba cogiendo el sujetador entró Jack.

-Perdón, no sabía que estabas aquí, lo siento...- dijo y se iba a ir

-¿A dónde vas idiota?, me conoces desde que llevaba pańales y no es la primera vez que me ves desnuda entra y cierra - le dije y él obedeció aunque estaba un poco rojo y miraba
fijamente al suelo, no me lo podía abrochar porque el idiota del parque me había dado un navajazo en el brazo, del cual me enteré cuando me fui a bañar, porque la adrenalina no
me dejaba sentir nada y pensaba que la sangre era de los otros.

-Jack, me duele el brazo, abróchamelo porfa- le dije mientras me acercaba a él y me ponía de espaldas

-Está bien- dijo y con manos temblorosas me lo abrochó

-¡Ay tienes las manos frías!- le dije riendo

-¿Cómo puedes actuar tan natural estando desnuda delante de mí?- me preguntó mientras me abrochaba la especie de cinturón que me ponía para meter las armas sin que se me
vieran.

-Pues porque te conozco hace tiempo y no me importa, si fuera otra persona no lo haría pero eres tś- le dije mientras sonreķa y me dirigía ya vestida a maquillarme y peinarme.

-¿A tí te da vergüenza que te vea desnudo?- le pregunté mientras terminaba de atar mi coleta alta para ponerme la peluca, hoy tenía planeado hacer algo especial en las carreras.

-Si...- susurró y yo reí- no te rías idiota, no todos somos tan desvergonzados como tú- dijo a la defensiva

- Eso tiene arreglo- le dije mientras le quitaba los pantalones que tenía en la mano y los botaba a la cama, él se estaba cambiando por lo tanto tenía unos simples bóxer puestos, de
los cuales me encargué de quitar mientras le miraba.- Ya te he visto no tiene por qué tener vergüenza.

-Eres idiota en serio, no te das cuenta de nada, ¡no puedes ir haciendo eso mujer!, ¿Me puedes explicar cómo quieres que calme a mini Jack ahora?- dijo serio y yo al ver a que se
refería no pude más que estallar en carcajadas

-Se me ocurren muchas ideas para solucionarlo pero ninguna decente- dije sonriendo cosa que no funcionó, sino que empeoró el problema- A ver idiota, piensa en que mi padre va
a entrar o en penecorto desnudo, osea cosas desagradables y listo- dije mientras bajaba al piso de abajo- ¡te quiero listo en 10 minutos, baja la máscara y las de repuesto!- le grité,
no sabía que provocaba esas reacciones en Jack, esto es muy extraño, si para él soy una amiga, él mismo me lo dice, estoy confusa, ¿a qué vienen todos esos comentarios de lo
ciega que estoy y qué no me doy cuenta de las cosas? , además nunca me deja beber, dice que cuando lo hago no me controlo, no me quiere contar que pasó aquella noche que bebí tanto que no recuerdo, lo único que me asegura es que estuve a salvo que no me preocupe y es exasperante no saber cosas de tu vida.

Princesa...¿a la fuga?.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora