12

29 4 29
                                    

Narra Noah:

Jason puede creer que arruinó mis planes, que puede mantener a Eithan alejado de mi y que no lo haré caer nuevamente, pero está equivocado y yo se lo haré saber. No me importa lo que tenga que hacer ni que la historia se repita. Si es necesario, quiero que el colegio entero sepa lo que realmente soy capaz de hacer y que dejen de tirarme al suelo cuando les de la gana. Podré no ser el más fuerte o él más alto, pero soy más inteligente que toda esta banda de imbéciles y eso es lo único que necesito para mandarlos a todos a la tumba si es que quiero.

Tomé varias cosas que tenía preparadas desde hace unos días y fui al colegio, ese día intenté mantenerme tranquilo hasta que llegó la hora de salir. Al ver a Eithan, tomé su brazo y caminé rápidamente hacia algún lugar en donde Jason no pudiera encontrarnos.

—¿Cómo has estado Ei?.— Sonreí.

—Bien.— Miró el suelo.

—¿Estás enojado?.

—¿Tu qué crees?.

—Ya han pasado dos semanas, ¿por qué no me perdonas?..

—No puedo hacerlo.

—¿Jason te obligó?..

—No, tuve que obligarme a mi mismo a no perdonarte.

—Oh.. Eso es porque me amas Ei, sé que no quieres estar enojado conmigo..

—Ya basta Noah, podemos olvidar todo esto si quieres pero déjame en paz..

—Lamento decirte que eso no es una opción.— Lo abracé y enterré la aguja en su cuello.

—Ah..

—Respira y así no dolerá.— Besé su frente.— Todo estará bien, mi amor.— Esperé a que se quedara profundamete dormido y me lo llevé en el auto.

El rato pasó y, cuando despertó, parecía desconcertado y aterrado, se veía muy tierno.

—¿D..Dónde estoy?..

—En un lugar muy bonito en donde sólo estaremos tú y yo.— Le di un beso en la mejilla y sonreí.— ¿Te gusta?.

—.....

—¿Hm?.— Lo miré a los ojos.

—E..Es lindo, supongo..

—¿Por qué supones?.

—Eh..

—Eithan, no debes mentirme ni nada, si no te gusta este lugar, puedes decírmelo y yo lo haré más agradable para que realmente te guste.. De todas formas, vas a pasar mucho tiempo aquí.

—¿D..Dónde está Jason?.

—Ese nombre no se dice en esta casa.

—Eh.. Ok..

—Ahora responde lo que te dije.

—N..No quiero que cambies nada, es muy bonito, en serio..

—Voy a creerte.— Suspiré.— Pero no quiero que me mientas nunca más, ¿ok?.

—Ok..

—¿Lo prometes?.

—Lo prometo..

—Eres tan obediente— Sonreí y lo abracé.— Te amo tanto, Eithan.. Yo sólo quiero que me ames y que me necesites, ¿es mucho pedir?..

—No lo sé..

—Como sea, yo sé que me amas, es sólo que ese idiota confundió tu mente y ahora estas enojado conmigo por su culpa.. Él sólo lo hace porque está celoso, yo nunca te haría daño y nunca te haría hacer algo que no quieres..— Empecé a sollozar.— Él siempre arruina todo, nunca me deja ser amado por nadie..

—Noah..

—Está bien, en serio, sé que tu no podrías odiarme, Ei..— Tomé su mano.— Tu me quieres, ¿verdad?..

—Creo que si..— A pesar de que sus respuestas eran vagas y dudosas, eso era más que suficiente para saber que podía hacerlo de opinión fácilmente si todo salía bien.

—¿En serio?..

—Ah.. No lo sé, es sólo que..

—Quieres que esté contigo, ¿verdad?..— Me miró con temor y asintió con la cabeza, eso me hizo sentir muy feliz, tanto que tuve que usar todo mi autocontrol para que mi tristeza fuera creíble.— Eithan..— Acaricié su mano y luego empecé a subir hasta acariciar su mejilla.— Yo sólo quiero estar contigo, ¿me dejarías hacerlo?..

—Hm..— Sus mejillas se habían puesto rojas.

—Puedo darte el tiempo que quieras para responder, tenemos toda la tarde..

—Es que yo quiero estar contigo, pero me das mucho miedo y no sé si realmente te extraño o algo me obliga a hacerlo..

—Ya veo..— Suspiré.— ¿Y si dejamos esas dudas y el miedo de lado?.

—¿Cómo haría eso?..— Lo besé e intenté que el beso fuera lo más tierno y sutil que se pudiera, ya que lo que menos quería es que se separara de mi.

—¿Hm?.— Al separarnos, sonreí y seguí haciéndole cariño en la mejilla.

—Eh..

—Voy a dejarte pensar un rato.— Me levanté y empecé a caminar hacia la puerta.

—Eh, Noah..

—¿Si?.

—¿Cuanto rato me vas a dejar solo?..

—El que sea necesario.— Empecé a mover el pomo de la puerta.

—Espera un poco..

—¿Quieres que me quede?.

—Tengo algunas preguntas..

—¿Cuales son?.

—¿Qué pasó con mi padre?.

—Está de viaje todavía.— Sonreí.

—Pero..

—El avión se cayó y creo que murió.— No pude evitar soltar una risita.— Es una buena noticia, ¿verdad?.— Se quedó en silencio unos segundos hasta que respondió

—..¿Y mi mamá?..

—Ella está bien, no te preocupes.

—Ok..

—Bueno, te dejo, debo hacer el almuerzo.— Sonreí.

—Hm.. Ok..

—No te preocupes, voy a venir a verte de vez en cuando.

—Ok..

—Ya vuelvo.— Sonreí y, luego de salir, cerré la puerta con llave.— Por fin te tengo.— Murmuré y me fui a cocinar con una sonrisa en la cara.

El chico good y el chico bad boy 《Versión extendida》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora