En un planeta lejano a la tierra, una joven saiayin, vive una vida normal en el planeta que le dió la bienvenida cuando su nave aterrizó en el planeta Bumbo, cuando tan solo era una bebé. Pero a medida que ella va creciendo se hace difícil llevar una vida normal para alguien que tiene el instinto de pelea, de guerreros hechos para las batallas.
Y con la llegada de un misterioso joven, su vida da un giro radical... ¿Qué nueva vida le espera a esta joven?
Hoy presentamos:
Ayer y hoy.
Destino: la tierra.
— Por qué no puedo quedarme más aquí, si, se que metí la pata al golpear a esas dos chicas, pero ellas se lo buscaron, siempre me molestan y me cansé de eso, siempre lo mismo, se burlan de mi cabello, mi ropa y de mi cola — me siento bajo la sombra de una montaña y con el brazo me quito el sudor de la frente.
El planeta Bumbo, un lugar en el que el sol jamás se va, hay al menos cuatro soles y cada uno tiene una intensidad diferente, al haber cuatro soles, el tiempo en este planeta es más lento.
Llegué aquí hace unos dieciocho años, pero parece más tiempo; el tiempo, como ya dije es diferente así que en realidad creo que tengo unos treinta y seis años en un planeta en el que el tiempo corre normal. Años después de que llegue aquí cuando aprendí a hablar y leer, las mujeres que me encontraron me dijeron que en la nave que llegue había una carta. La cual explicaba todo: mi planeta natal, el planeta Vegueto, fue destruido por el emperador del universo, Freezer. Un ser despreciable, que mata por placer. Mi planeta era un lugar habitado por una raza guerrera, llamada saiayins; Freezer creía que una vieja leyenda podría hacerce realidad, la leyenda del súper Saiyajin, un guerrero tan poderoso que sería capaz de derrotarlo, él no quería que eso pase, así que reunió a todos los saiayins en el planta Vegueto para acabar con todos de una vez; mi padre,se entero de eso, el mismo día que perdió a sus amigos, volvió al planeta para poder salvarnos, en la carta me enteré que tengo dos hermanos Raditz y Kakaroto; Raditz no estaba en el planeta, pero Kakaroto y yo si. Así que mi padre nos puso en naves y nos envió lejos, no se dónde pueden estar mis hermanos, pero creo que ellos no saben que existo o ellos hubieran venido por mi, creo, eso es lo que quiero creer; mi padre se quiso enfrentar a Freezer. Pero creo que no pude hacer mucho ya que solo un súper saiayin podría derrotar lo.
Lo poco que se de él es por una carta, también tengo una foto, es él junto a mi madre. Mi madre era hermosa, ahora entiendo por qué mi padre se enamoro. Me parezco mucho a él incluso tengo una cicatriz en la mejilla izquierda igual que él, tengo está cicatriz gracias a que en este planeta hay criaturas llamadas Tailo llamadas así por el sonido que hacen al comer, son criaturas peligrosas ya que poseen filosas garras, las cuales les permiten excavar en la tierra para poder protegerse del sol. Un día quise entrenar y estaba muy concentrada en eso, cuando mi mamá adoptiva me grito diciendo que eso era muy peligroso y cuando me distraje por un segundo una las garras del Tailo logro alcanzarme; después de un tiempo volví a internar entrenar y paso lo mismo, es por eso que tengo una cicatriz con forma de "x". No puedo entrenar me lo tienen prohibido y lo de hoy creo que fue demaciado para mis madres. Dato curioso este es un planeta lleno de mujeres, si así es, no hay hombres, las mujeres aquí nacen de una flor en particular, llamada Bumbu, una flor de unos tres metros de altura con pétalos color rosa y rojo en sus puntas, cada cierto tiempo nace una bebé, mediante el deseo de las habitantes. Es un flor muy peculiar.
Hoy metí la pata, golpeé a dos chicas y las dejé muy lastimadas. No controlé mi fuerza y creo que les rompí un par de huesos.
— Si, tienes que estar en un lugar en el que no seas un peligro para todas, hoy golpeaste a dos chicas y bien sabes que ellas no son como tú — mi madre Baiba me regaña y me señala con el dedo ella es la más estricta en cuanto a la conducta.
