USAME [2YEON]

77.

Mina — La cena estuvo estupenda. Me sorprendiste, Chaeyoung. Este restaurante es muy agradable, ¿cómo no lo conocí? —

Se cuestionó consigo misma.

Una música lenta de fondo se aprecia para el oído del público.

Chaeyoung — Que bonita ocasión. ¿Me permites? —

Su mano se cede para la japonesa, esperando su respuesta, Mina con tiempo sujeta sutilmente su mano. Ella se dejaba llevar por la intención ajena en querer bailar lentamente en el centro de la pista.

Se apoya contra el pecho de la coreana, mientras su mano toca su espalda, y la otra se entrelaza con aquella, moviéndose sincronizadas de izquierda y derecha y viceversa...como dos princesas debatiendo una danza para su propia ceremonia.

Chaeyoung — Mina. —

Mina — ¿Si? Chaeyoung... —

Chaeyoung — ¿Puedo ser sincera contigo? ¿Más sincera de lo que soy? —

Mina — Si. —

Chaeyoung — Si tienes que soltarlo, hazlo. No me sentiré apenada por ti, tampoco me enojaría. Puedes llorar sobre mi pecho, puedes expresarte como quieras teniendo todo mí apoyo incondicional. —

La japonesa derramaba lágrimas en silencio...

Chaeyoung — Conozco tu semblante preocupada, conozco tus respuestas cortas, tu sonrisa forzosa y tu concentración cuando intentas prestar atención mientras por dentro peleas contra tus demonios. —

Mina — La amaba mucho... —

Confesó su dolor...su angustia que parecía eterna...su llanto más presionado.

Mina — Me sentí tan segura en amarla y quererla. Me ilusioné demasiado que me lastimé con mi propia vida cuando me miró a los ojos y me dijo que tiene una dueña en su corazón. —

Mina — Estoy segura que es esa mujer, por como la mira única y diferente a como se comporta con otras personas. El mundo es tan pequeño cuando te enamoras de una mujer y te enteras por su propia boca que esta comprometida con Im Nayeon. Me enamoré de la persona incorrecta, me dejé llevar a la cama con la persona creyendo en sus palabras alcohólicas, que me amaba, que me hacía suya en el amor, pero todo fue una ilusión tan real... Demasiado real. —

Su sollozo callan su voz quebradiza, entrecorta su respiración, obliga a ocultarse más contra el abrigo de quien la escucha.

Chaeyoung — ¿Qué puedo hacer, Mina? ¿Qué puedo hacer para que alguien como tú pierda ese sentimiento que te hirió mucho? Que te llevo a una vida triste. ¿Qué puedo hacer para que te sientas mejor? —

Sus preguntas se alargaron, como cada palabra que exhaló cuidadosamente al mirar a la japonesa, al acariciar su cabello, al consolarla delante de las personas distraídas en sus cenas.

La japonesa levanta la mirada, buscando a la coreana desde abajo para poder ser valiente con lo poco que su corazón le ofrece al reclamarle que se cure, que se cure pronto.

Mina acercó su boca hacía Chaeyoung, ¿porqué lo hacía? ¿Qué es lo que despertó en el fondo de su corazón? ¿Fueron esas desesperadas preguntas camufladas de su socia? ¿Fue un impulso por querer besar la boca de otra mujer y así olvidar un reciente pasado amor imposible que termina en ese mismo tiempo?

El corazón de Son se iluminó como sus ojos que no se cerraron por primera vez. Su rostro acortó una distancia absoluta contra la persona que esta enamorada desde el primer día que la conoció. 

Una rosa esta floreciendo.