𝐶𝑜𝑚𝑒 𝐵𝑎𝑐𝑘

•5•

~ Un año más de vida, un año más en el cuál no perdiste la batalla en esto que se hace llamar vida.
Feliz cumpleaños a mi ~

Era una nota que escribía cada día que cumplía años.

Me levanté de mi cómoda silla de escritorio y guardé esa nota en un cajón con otras notas sin importancia.

- Buenos días Mamá - Hablé mientras baja las escaleras de el segundo piso.
- Buen día Kira, Feliz cumpleaños - Dijo mi Madre que se encontraba sollozando.
- Igual para ti Mamá
Me encontraba felicitando a mi Madre, la razón por la cuál cada año devolvía su felicitación era que también era el día de las Madres, nací el día en el cuál se festeja a las Madres y siempre fui ese grandioso obsequio para mí Madre.
- Estás bien? - Pregunté trás ver su cara y tono de dolor.
- Si - Respondió ella, después el dolor volvió a ganarle y calló a llorar en mi hombro.
- Segura? Quieres contarme?
- Tú Padre, nos está abandonando - Dijo mi Madre que ahora tenía su maquillaje corrido.

Mi Padre se había vuelto alcohólico, hace casi nueve meses que sus Padres habían dejado esté mundo, mi Padre había desatendido su trabajo, su aspecto e incluso a su Familia, era doloroso ver a mi Padre en esa situación, nunca estaba consiente, era muy agresivo a él grado de golpear a mi Madre, eso nunca pasaba, tenían sus diferencias pero con una charla tranquila arreglaban sus problemas.
Era todo diferente, estaba más que segura de que mi vida anterior nunca volvería, tenía que aprender acostumbré a está nueva etapa.

~~~

Termine de abrochar mis agujetas y salí de mi casa no pensaba quedarme ahí viendo como mi Padre y mi Madre tenían una discusión en la cocina.
No tenía ningún rumbo fijo así que solo caminé a dónde mis pies me llevarán, mis pies terminaron por llevarme a las vías un lugar donde sentía la verdadera paz.
Y ahí estaba Kurt mirando a el tren irse.
- Hola - Dije sentándome a un lado de Kurt.
- Hola, que haces aquí?
- Salí de mi casa
- Tus Padres de nuevo?
- Si, todo esto se está haciendo más y más frecuente, lo más probable es que terminen por separarse.
- Si, es lo más lógico, pero aún no comprendo por qué pensaste en venir aquí.
- Bien dicen que tu corazón te guía a dónde te gusta estar.
- Kira, nadie dice eso
- Pero ahora yo lo dije, así que alguien ya lo dijo.
- Entonces, te gusta estar aquí?
- Ajá, me encanta estar aquí.
- Bien, entonces me iré para que estés sóla - Dijo Kurt mientras se ponía de pie.
- Kurt, espera
- Que?
- Te gusta alguien?
- Por qué preguntas eso? - Decía Kurt mientras volvía a sentarse a un lado mío
- No lo sé, pero, te gusta alguien en éste momento?
- Si, si me gusta alguien, y a ti?
- Si también me gusta alguien, es muy especial - Le dije a Kurt, este trataba de esconder su irá en una sonrisa falsa, pero apesar de su sonrisa sabía que estaba molesto.
- Y quien es ese chico tan especial? - Dijo Kurt fingiendo interés.
- Seguro que sabes quién es, aún que dudo que quiera algo conmigo, sólo me considera su amiga.
- Es Dave??
- No, no es Dave
- Entonces Krist?
- Kurt?
- Espera, ese chico soy...soy, yo? - Dijo Kurt tartamudeando.
- Si, eres tú - Respondí mientras ponía mi cabeza sobre su hombro.
- Sabés? Yo también tengo a mi chica especial.
- Enserio?
- Si, pero creó que a sus ojos soy un tipo loco.
- Al menos yo no creó que seas un loco.
- Bueno, al menos ahora se que no me tiene en ese concepto, Kira, no te la compliques la chica eres tú, y sólo tú, no puedo dejar de pensar en ti, eres mi chica.
- Enserio, Kurt?
- Realmente nunca una chica me importo tanto como tú.
- Kurt, soy una chica loca y antisocial.
- También soy un loco, entre loco y loco nos entendemos.
Hice una sonrisa y mire sus ojos, ese azul intenso en sus ojos, dos mares de emociones, sentimientos, e interés, sus ojos brillaban con la luz de el Sol, un momento que deseas que duré eternamente, y fue en ese momento cuando me percaté que sería Kurt, él y sólo él, el sería el amor de mi vida, mi otra mitad, el chico de mis suspiros, estaba más que segura, el sería con quién quería pasar el resto de mi vida.

- Kira?
- Si, Kurt? - Respondí sin dejar de observar ese azul intenso de sus ojos.
- Tú, me amas?
- Por qué no lo haría?
Sin pensarlo dos veces Kurt dejo un beso sobre la comisura de mis labios y sin darme cuenta forme una grata sonrisa en mi rostro, sentía que a partir de ese instante sería feliz por el resto de mi vida.