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Era otra mañana en la cuál cuestionaba mi existencia, pero debo admitir que Frances me hacía olvidarme de todo aquello, ocupaba mi tiempo cuidando, atendiendo, criando y divirtiéndome con mi pequeña.

Estaba vistiendo a Frances, mire esos ojos azules, los cuales me recordaban tanto a su Padre, besé sus pequeñas mejillas y la tomé de la mano para bajar por algo para desayunar.

- Holaa!! Que lindas princesas - Dijo Dave quién se encontraba en la sala de estar.
- Llevas mucho tiempo aquí? - Pregunté.
- No - Respondió y posteriormente saludo a mi pequeña - Solo venía para ver qué tal estaban, y si necesitaban algo -
- Por ahora estamos bien, gracias por venir y estar al pendiente de ambas, de verdad es algo que te agradezco -
- No es nada - Tomó en sus brazos a Frances - ¿Quieres que la lleve conmigo? -
- Prefiero pasar el día con ella, creó que con todo este asunto la he desatendido bastante -
- Si necesitan algo no duden en buscarme -
- Gracias Dave -
Él se despidió de ambas, lo mire y le dije:
- Dave, si Kurt llega a llamar o sabes algo de él, no dudes en informarme -
- Lo haré -

...

Mi pequeña está creciendo demasiado rápido

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Mi pequeña está creciendo demasiado rápido...
Amo a Bean, es mágico encargarte de ese pequeño ser humano que la vida puso en tus manos, de esa pequeña responsabilidad que alegra tus días, ahora puedo afirmar con total certeza que los hijos alegran tu vida, o al menos la mía alegra mi vida por completo, le da color a mis días, se encarga de hacerme el ser más feliz del planeta Tierra, o como deber de Madre debo de hacer lo mismo por ella.
No llevo ningún rencor hacia mi Madre, simplemente no comprendo el porque no pudo verme como yo veo a mi pequeña.
Aún recuerdo el tamaño de sus manos aquél día que la tuve en mis brazos por primera vez, pude olvidarme de ese dolor de parto ya que había valido la pena, sus diminutos pies, sus pequeños ojos los cuáles aún no se abrían, era tan frágil y era mía, era mi pequeño Ángel, mi pequeño frijol tal como lleva por nombre, de verdad estaba enamorada de mi hija y lo sigo estando.

...

Mi hija no dejaba de mirar fijamente mis ojos, era como si pudiera ver en ellos reflejada aquella tristeza que aún cargaba.

- ¿Qué pasa Bean? - La mire y sonreí, ella hizo igual, cargué a Frances en mis brazos y comencé a cantarle, era algo a lo que Kurt y yo la habíamos acostumbrado, después de un buen rato se quedó dormida en mis brazos,
la llevé hasta la cama y le dejé dormir, me quedé recostada a un lado de ella, pasaba mis manos por sus hermosos cabellos rubios, miraba a Frances como si llevará años sin mirarla, de verdad que estaba desatendiendo a Bean, la mayor parte del tiempo mi hija estaba en casa de la familia de Kurt, con su abuela (Wendy) y su tía (Kim) había ocasiones en las que Krist y Shelli estaban con ella, incluso Pat y Dave. Se suponía que yo era la encargada de cuidar de ella, pero otros lo estaban haciendo ese trabajo por mi, realmente los problemas me afectaban pero debía de evitar que me afectarán al grado de olvidarme de mi propia hija y dejarla en brazos de otros, no quería que Frances creciera viéndome hundida en la tristeza y viendo como la dejaba cada vez que sentía que no podía más.

...

Abril estaba por iniciar, aunque para mi solo era un mes más, un mes igual a todos los anteriores, simplemente no me hacía ilusión.

En una de las habitaciones de la casa había un apagador que necesitaba un cambio de cables, llamé al electricista, dijo que en unos días más estaría reparando aquél apagador.

No tenía absolutamente nada que hacer, así que fuí al armario a ver qué cosas interesantes encontraba, encontré dos maletas, dentro de una de ellas encontré cartas que yo le había escrito a Kira y cartas que ella me había escrito a mi.

To Be Continued...

𝐶𝑜𝑚𝑒 𝐵𝑎𝑐𝑘Donde viven las historias. Descúbrelo ahora