Morgan James

Giros inesperados: capitulo 1

El eco de las vibraciones resuenan por mi gran habitación, como siempre. Owen cuando quiere fastidiar se vuelve un grano en el culo.

Me muevo de aquí para allá tratando de encontrar un lado cómodo en mi almohada, pero la música que reproduce mi estúpido hermano ya me despertó, y no hay forma de que sea capaz de volver a conciliar el sueño

Lanzó una almohada hacia un lado y me levanto buscando la puerta de mi cuarto, cuando cruzo el umbral la música se intensifica aún más <<¿porque mierda Christopher no le dice nada?>>  abro la puerta de la habitación y no se ve más que un desorden, se nota que no deja que nadie entre hace como 5 o 6 días

Que asco.

—Hola querido hermanito, ¿podrías bajarle un poco? estoy tratando de descansar y tú estúpida música de drogadicto daña mi paz, ¿le bajarías un poco o mejor aún la quitarías? —le digo haciendo notar el sarcasmo en cada una de las palabras que dichas y agregando una sonrisa de amabilidad-

Sus ojos caen sobre mi, está acostado con un libro en sus mano, cuando mira a las demás personas siempre se asustan o impresionan, y con justa razón, aunque una de las características de los James son los ojos, los de Owen daban algo que... podría decir que miedo, pero a mi no me causaba absolutamente nada.

—No, lárgate --me dijo volviendo a fijar la vista en el libro

Maldita mi suerte de haber nacido con un hermano al que le debo compartir herencia.

—Owen te recuerdo que hoy a las 5 debes estar en el comando, al igual que yo, así que levántate de esa asquerosidad a la qué haces llamar cama, te bañas, y nos vamos, ahora.

Me ignoro por completo.

—Te odio —salí de su habitación cansada y dando un portazo

No alcance a dar 4 pasos para ir a mi cuarto y organizarme tranquila ya que mi abuelo justo subía las escaleras

—Milenka, baja ahora, necesitamos hablar contigo, es importante -me dijo con un semblante serio, no muy característico de su parte hacia mi-

—¿Puede ser más tarde? Tengo qu... —No me dejo terminar-

—Ahora -me miraba muy fijamente con una máscara de hielo

No quedó de otra.

—Bien, deja me cambio la camisa y bajo

—No tardes, te esperamos en mi despacho.

¿Esperamos?

Y sin decir nada más bajo las escaleras, definitivamente algo no estaba bien.

Me apresuré a mi habitación para cambiarme y ponerme unas zapatillas para no estar descalza, me dirigí hacia el despacho de mi abuelo.

Mi papá, mi mamá y mis 2 abuelos estaban allí <<Reece era como mi abuelo, o un papá, si se puede decir>> todos tenían una cara que no se las podría explicar a simple vista, era algo como expectantes, como nerviosos y ansiosos a la vez

—Okey, aquí estoy, ¿qué pasa? —dije mientras me tiraba en un sillón de allí, tratando de parecer lo más tranquila posible-

Todos me miraron y si, también me sentí pequeña al lado de ellos.

—Voy a ser claro —habla alex— tu seguridad va primero que cualquier cosa en este mundo, así que de ahora en adelante te vas a olvidar de la milicia, de tus medallas, de ser capitana, de que eres reconocida en todas partes, pasarás de eso a vivir una adolescencia normal, en una universidad en Hollywood, saliendo cada noche sin preocuparte o preocuparnos de que alguien pueda secuestrarte a tí o a tú hermano para utilizarte como rehén, mañana en la mañana sale tu vuelo, no puedes contarle nada a nadie, ni de tu familia, ni de tu peso en la sociedad, ni tus reconocimientos, absolutamente a nadie, sólo eres Milenka Morgan James, una chica más que va a ir a su primer día de universidad.