Morgan James

Capitulo 5

¿Alguna vez han sentido ese dolorcito en el estómago por el miedo?

Yo no, pero verlos a ellos correr hacia la entrada armados, con sus uniformes de misión y muy enojados, hizo que sintiera eso por primera vez en mi vida

Cuando vieron que salía del edificio todos se paralizaron, imagino que esperaban que me capturaran para utilizarme como rehén

Christopher alzó su mano y habló por la radio

-Detengan fusiles, está aquí -Dios, ¿Enserio?

Bajo la radio y me miro, me miro en una forma en la que nunca lo había hecho, mamá suavizó su semblante y los demás hicieron lo mismo

-Ven aquí, ahora -mis manos empezaron a temblar

Así es como se siente el miedo

Empecé a caminar lentamente hacia ellos, pero mamá no dejó que diera un solo paso porque se lanzó a mi y me abrazo, me abrazo como si su vida dependiera de ello. Cuando se separó de mi sus ojos azules hicieron contacto con los míos y sus manos levantaron mi cara

-Pensé que te había perdido -Papa miró hacia atrás y todos entraron a las camionetas menos mis abuelos y Owen, que por cierto estaba rojo de la ira- No vuelvas a hacer estupideces

Y me lleno la cara de besos

-Mamá... -digo tratando de separarla, odio las muestras de afecto

Papá suspiro

-No la premies Rachel, lo que hizo estuvo mal -me miro- ¿tienes alguna idea de lo que ocasionaste Milenka? todo el comando de Inglaterra te está buscando, pensamos lo peor, ¿te parece justo? -estaba muy enojado, su voz y su respiración lo decía todo-

Rodé los ojos

-Si piensas que recibirás un "lo siento" de mi parte siéntate que de pronto te cansas. Apague mi teléfono porque quería tener un poco de paz mental, ¿o díganme? ¿No fueron ustedes los que decidieron enviarme hasta aquí? ¿Alejándome de mi vida? ¿De mis amigos? ¿De mi tropa? -Lo último lo dije más fuerte, seguía muy dolida con ellos.

El apretó los puños, se estaba conteniendo como siempre.

-No me reproches James, no le voy a dar largas a este asunto, sube al auto, te vas para Chicago Justo ahora 

Todos lo miraron al mismo tiempo sorprendidos.

-¿disculpa? -le dije con la mano en mi pecho?

Me ignoro y dio la vuelta para entrar al auto

-Christopher estás loco si piensas que dejare que ella estudie allá, o en otro territorio que no sea el nuestro -Dijo Owen hablando por primera vez en la noche, mis abuelos observaban la escena pero no decían nada, eso era nuevo

El se giró hacia mi hermano y se acercó a grandes zancadas quedando frente a frente

-¿y tú que te crees para decirme que puedo hacer y que no? -le dijo mirándolo fijamente

-Suficiente Christopher -Mamá se puso en el medio de los 2

Papá la miro mal y se separo de ella para entrar a la camioneta, pero antes se dirigió a mi

-Vuelves a cometer una estupidez cómo está y te aseguro que te encerraré en lo alto de un castillo -rodé mis ojos y el entro en la camioneta

Alex y Reece se acercaron y me abrazaron

-Me alegro que estés bien, pensé que te había pasado algo mal -Reece beso mi cabello

-Igual yo Milenka, eres mi talón de Aquiles y si algo te pasa me moriría -Hablo Alex

Mis ojos se cristalizaron, ellos eran los hombres mi vida, extrañaría verlos todos los días

Pero sin embargo ni una lágrima salió de mi, jamás permitiría que nadie me viera llorar por nada

Mamá y Owen se despidieron diciéndome que no apagara el teléfono ya que estarían en contacto, entraron todos a las camionetas y solo quedaron las de mi guardia.

-¿Nos vamos? -me pregunta Ty

Suspiré por todas las emociones por las que pasé en este momento tan pequeño y asentí para entrar en el auto, las residencias no eran tan lejos así que llegamos rápido, me despedí de mi guardia y make me dijo que si volvía a apagar mi celular llegaría hasta la puerta de mi habitación a reprenderme, cosa que hizo que me molestara porque me estaba amenazando y sabe que odio que lo hagan

Entre al edificio pero no quería subir a la habitación, tenía hambre, así que me dirigí hacia la tienda que dejaban abierta hasta cierta hora en la universidad

Todo estaba muy solo y agradecí por eso, odiaba tener personas que no estuvieran a mi nivel a mi alrededor

Llegue a la cafetería y me tensé

El chico llamado Aegan estaba ahí, con unos pantalones no tan ajustados, una camisa negra con una cadena de metal y comiendo unas papas fritas

Dios, era tan sexy que hasta comiendo se veía bien

Me acerqué poco a poco, él tenía que hablarme a mi si se quería acercar, yo nunca lo haría

Llegue y me hice a su lado, fue como si la presencia de uno llamara a el otro y sus ojos volvieron a conectar con los míos dejándome sin respiración, me consumieron por completo sus ojos grises

Mi cabeza comenzó a maquinar muy rápido para tratar de evitar que desviara la mirada a sus labios, pero la señora del mostrador dañó por completo nuestro duelo de miradas ya que me sacó de mi embelesamiento

-Señorita ya voy a cerrar, ¿desea algo? -me pregunto asomando la cabeza

Desvíe mis ojos a los de ella

-Si, ¿que tiene de comer? -sentía a el chico respirar fuerte

-Muchas cosas, pida ya -encarné una ceja, no estaba acostumbrada a que me hablaran de esa forma

-Deme 5 paquetes de frituras y 2 gaseosas -ella me miro con expresión aburrida y fue a buscar lo que yo quería

Escuché como él se aclaraba la garganta

-¿Tanto comes? -me pregunto mirándome a los ojos

¿Y a tí que te importa?

No puedo decirle eso, lo alejaría

-Que puedo decirte, aveces necesito comida chatarra en mi estómago para ser feliz

Maldije cuando mi mirada se fue instintivamente hacia sus labios, no lo pude evitar.

Lo que me sorprendió fue que él también lo hizo, pero después se percató y me volvió a mirar

Con que un perfecto mentiroso, ¿no?

El rió, pero fue tan ronco que puedo decir que mi cuerpo se erizó

-Aegan Cash -Extendió su mano hacia mí

Yo la miré y le respondí

-Milenka White -Aún es extraño, necesito decir Morgan

Nos apretamos la mano, y en ese mismo instante, me dí cuenta de que estarían por pasar muchas cosas...