Morgan James

Encuentros interesantes: capitulo 3

Después de 1 hora y media de vuelo llegamos por fin a Hollywood, una ciudad muy bonita, diría yo.

—¿Sabes que te vamos a vigilar 24/7 verdad? —me dijo Ivan bajando las maletas del helicóptero y subiéndolas a la camioneta

—No me cabe duda —dije con un tono muy sarcástico

El me miro y la radio que tenía a un lado de su hombro hizo un beep.

—Ministro —Dijo el hablándole a la radio

—¿Novedades? —pregunto mi padre al otro lado de la línea

Ivan miro a Tyler y este negó con la cabeza.

—Ninguna señor, lo mantengo informado.

Mi papá no contestó y simplemente la radio volvió a hacer beep.

—¿Cuantos de ustedes son? —le pregunté

La brisa pegaba en mi cara.

Sabía que papá no me dejaría sola en ningún momento y menos en otra ciudad, pero yo lo único que quería era acostarme a dormir un rato.

—300 capitana, los otros están en camino, 4 helicópteros y 57 camionetas, todas a su disposición

Bueno, la verdad era que no me sorprendía, toda esa guardia era para mi, para mi prima y a los únicos que podría considerar amigos, somos hijos de la mejor generación en la FEMF claramente no estaríamos solos.

20 minutos después llegamos a la gran universidad

Tagus.

Admito que pensé que sería peor.

Yo iba en una camioneta y atrás de mí venían 2

—Bien señorita James, desde aquí usted no nos va a notar, pero tenga en cuenta que cada paso que de nosotros lo daremos primero, si necesita algo solo llámeme, estaremos muy cerca —me dijo Ty bajando mis maletas en frente de la entrada de las residencias

Ahora si tendría que valerme por mi propia cuenta.

—Okey, adiós —les dije tomando las 3 maletas y dirigiéndome hacia allí

Apenas entre el aire fresco movió mi cabello.

Había una gran recepción en donde estaba un chico alto y rubio discutiendo con él recepcionista. A decir verdad de espaldas se veía muy apuesto, tenía pinta de ser un universitario que ves en las películas.

—Vamos Chrissy, déjame pasar —le dijo el chico apuesto

—Ross te dije no podías subir, este es el edificio de las chicas y...

Se detuvo cuando vio que estaba tan atenta a su conversación

—Tu debes de ser Milenka, la nueva —Me dijo mirándome con una sonrisa amable

Okey, en que clase que hueco estaba metida

Le sonreí con duda para tratar de ser amable.

El chico me clavó sus ojos en mí, y me recorrieron de pies a cabeza.

Me acerqué poco a poco.

—Mira, estas son tus llaves, un cupón de descuento para la comida de la cafetería y...

Busco en uno de los cajones que tenía a su lado y saco una caja de condones.

Me pareció gracioso, los tomé y los guardé en mi bolsillo sonriéndole, esto será muy interesante.

—Gracias -le dije-

Me iba a alejar para subir las maletas a mi habitación pero el chico me detuvo.