MOLECULAR. Bakugo Katsuki X Lectora

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Segundo Año
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Ya es el segundo año en la escuela de héroes, realmente me sorprende haber llegado hasta aquí, no soy una estudiante modelo, pero, al menos lo intento o eso me gusta creer. 

Camino rápidamente de la salida del subterráneo a la escuela, voy llegando tarde, vaya maravilloso primer día de clases. 

8:25 - Miro el reloj de mi móvil. Tengo cinco minutos para llegar, es un tiempo suficiente, no hay necesidad de aumentar la velocidad.

— Apresúrate, tonta, llegarás tarde a la escuela — me grita Bakugo tomándome de la mano y obligándome a correr. Lo perdonaré esta vez porque tiene razón, al menos en cierta escala.

Llegamos a la escuela, entramos al plantel.

— Exagerado… quedan tres minutos. Pero, definitivamente, no daba tiempo, ¿o si? Es que la escuela estaba muy lejos — digo irónicamente a mi amigo.

El muchacho chasquea la lengua, parece molesto, pero, no me importa, él simplemente es así, además, no ha insultado a nadie.

— Ugh, _____ de mierda. Callate y vamos a clase.

Lo dejé hablando, es tarde y debo ir a clase, sería bueno llegar al menos un minuto antes de la hora de inicio de la cátedra.

Entro al aula, entonces veo a mis amigos.

— ¡_____! Ven aquí, aparte un lugar para ti — me llama Hanta, a quien desde el año pasado considero mi amigo más cercano. Camino hacia el, genuinamente, le agradezco el gesto, de otra forma, probablemente habría terminado sentada en la primera fila del aula o algo así.

— Hola, Hanta… — digo tras soltar un suspiro debido al cansancio producto de mi corta odisea.

— ¿Cansada?

— Para nada, me siento como si hubiese dormido el año entero — vaya ironía, dormir un año entero me dejaría mucho peor de lo que estoy ahora, pero, al menos sirve como expresión —. ¿Qué tal te fue en tus vacaciones? — pregunto mientras acomodo mis pertenencias para no perder tiempo.

Sero se ríe.

— Me fue bien, en realidad, creo que no salí de casa, lo único relevante fueron aquellos días en que fuiste a mi casa, yo a la tuya o las reuniones con Kaminari, Kirishima y Bakugo… por cierto… que extraño, el siempre suele llegar temprano…

Vaya, es verdad que ya se ha tardado bastante.

Aizawa-sensei entra al lugar, al parecer, él será nuestro profesor nuevamente durante este año escolar. El ojeroso hombre comienza a dar la clase, una simple introducción y bienvenida, sin mucho contenido real, por lo que en realidad no presto mucha atención.

Pasan tal vez dos minutos, entonces, se escuchan unos desesperados golpes a la puerta.

— Pasa... — indica el profesor tal vez un poco harto, pero, calmo. La puerta se abre, dejando ver a mi amigo rubio con una expresión iracunda — ¿Bakugo? — el profesor parece un poco sorprendido y bueno, no es para menos, Katsuki suele ser de los primeros alumnos en llegar a la escuela, verlo arribar a esta hora resulta bastante inusual —. Solo siéntate — ordena Aizawa-sensei, Bakugo entonces cruza la puerta y se dirige a un asiento detrás mío, pues, Ejiro le ha apartado el lugar.

La clase acontece con calma, no del todo relevante, pero sí con uno que otro dato nuevo que puedo tomar en cuenta.

…

— _____… — me llama una voz masculina.

— ¿Qué quieres? — pregunto en un estado dudoso de conciencia.