3

1K 96 10
                                    

III



Las respiraciones profundas servían para poder calmarme fácilmente, era lo que necesitaba hacer y lo que estaba haciendo mientras las chicas que me acompañaban siempre en estos días me quitaban con delicadeza el vestido que cubría mi cuerpo, habían pasado días desde que sucedió el paseo en el que hablé con HyunJin y salí corriendo.

Días en los que solo pude pasear por el castillo y de vez en cuando recibir una visita, mi madre era la única que venía a este palacio a ver si yo todavía seguía con vida, porque mi vida se había transformado en una interminable rutina, a veces iba a la cocina y observaba allí a los cocineros y empleadas, otras veces pasaba mucho tiempo en una inmensa biblioteca y hasta se me informó de que yo sería la encargada de organizar las fiestas porque ese era mi deber.

Caius, de él no he sabido más nada y mamá me dice que está ocupado porque se avecina un evento devastador, sé a lo que se refiere con ello.

Guerra.

Los hombres luchando por poderes y tierras, riquezas, esos eran los motivos por los que ocurrían y en estos momentos una de las tantas naciones estaba preparándose para una guerra.

Miré con aflicción lo poco que se podía ver del exterior rodeado de oscuridad, cerré los ojos porque se que aquí hay secretos, este palacio, está lleno de ellos.

Porque hace minutos me encontraba caminando por los pasillos y pude escuchar perfectamente las voces de alguien resonar... quien quiera que estaba discutiendo, ¿No se dan cuenta de que es tarde?.

—Podemos solucionarlo.

—Te he dado una orden— esa voz... era su voz, era la voz de HyunJin, estaba hablando con autoridad y su voz era rasposa, entonces me pregunté porque demonios estaba hablando con una mujer y lo más importante... ¿Por qué con Hera?, me escondí detrás de una pared y allí me quedé.

—La orden...—susurró la rubia con tono sarcástico— ¿Ahora me tratarás como tú súbdita? ¿No lo harás como antes?.

¿Como antes?, esto era tan confuso que hasta yo tenía ganas de interrumpir la conversación y preguntar de que estaban hablando, pero fue más fácil entenderlo cuando me asomé un poco y pude ver que esta sala era incluso más enorme que la biblioteca en la que yo pasaba tiempo en estos días... había una enorme mesa en medio del espacio que tenía dibujado un mapa y encima de esta habían fichas con forma de barcos y formando tropas, ahí estaba él... estaba con las manos apoyadas en el borde de ésta y mirando por encima de su hombro a Hera detrás suyo.

—Tengo responsabilidades.

—Me prometiste que lo resolveríamos, que podríamos...

—No se puede, entiéndelo de una vez— dijo pasándose una mano por el rostro, gesto que él solía hacer cuando estaba demasiado exhausto y estresado, noté eso en estos últimos días porque me veía obligada a cenar con él y los miembros reales del palacio— No puedo darte eso que tanto quieres, debo protegerte, y la promesa que le hice a mi padre es mucho más importante que lo que tú sientes.

—¡¿Lo que yo siento?!— ella se señaló a si misma— ¡Tú también sientes! ¿Es que acaso tiene alguna importancia lo que haya pasado entre tú y ella?, dentro de esas promesas estaba también la de casarte... ¿no?.

HyunJin volvió a apoyar ambas manos en el borde de la mesa y continuó viendo ésta con una expresión neutral y vacía.

—Olvida todo lo que hayas vivido, olvida todo lo que hayas sentido— susurró con esa voz con la que me hablaba, para mi sorpresa, se mantuvo erguido.

Reino - Hwang Hyunjin ✔️ [EDITANDO] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora