Reino - Hwang Hyunjin ✔️ [EDITANDO]

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VII

—Estamos tan orgullosos— era la voz de mi madre, estábamos sentados en mi habitación, bueno, la mía junto a la de Hyunjin por que ésta fue su habitación mucho antes que mía, mi madre estaba gritando con euforia mientras Caius se mantenía mirando por la ventana— Eres la Reina, Jane, la primera mujer en la historia de la familia de Cristalvalle en ser la reina.

—Lo se... se los prometí, ¿no?— sonreí— ¿Caius?— él no respondió, parecía metido en sus pensamientos— ¿Que le sucede?

Mi mamá tragó unos segundos pero después sonrió ampliamente, ¿qué estaba sucediendo?

—No es nada, Jane, mejor cuéntame, ¿como va todo con Hyunjin?— yo entonces fui la que tragué en seco pero si ella volteaba las cosas entonces yo también podría hacerlo— Estás haciendo todo lo que se te dijo, ¿no?

—De hecho, madre— sonreí tomando un poco mi vestido y alzarlo para poder caminar bien— Todo va perfecto, y como ahora tengo la suficiente autoridad para mandar, quiero pedirles un favor.

—Claro— ella no se negó, yo sonreí— ¿Qué quieres?

—Quiero que Caius se quede unos días conmigo en el palacio, estoy bastante sola y me vendría bien un miembro de mi familia a mi lado, y pienso que él estará de acuerdo, ¿no es así... Caius?— él nombrado se dio la vuelta y avanzó a donde yo me encontraba, miro a nuestra madre que asintió para autorizarlo, yo me acerqué a él y pasé mis manos por su torso apoyando mi cabeza en su pecho.

Me mantuve unos segundos abrazando a mi hermano, mientras recordaba las veces que nos hacíamos compañía en casa, ahora tendría que estar separado de ellos y es tan injusto.

—Jane, debemos decirte algo— susurró Caius rompiendo el silencio y poniéndome en alerta, era extraño, extraño por el tono de voz que utilizaba— Probablemente pase más tiempo aquí del que tú quieres.

Pero yo sonreí.

—Eso es estupendo porque así...

—Jane— me sostuvo por los hombros— Voy a casarme.

Y abrí los ojos de golpe, eso era revelador y no se si perturbador, lo peor de todo es que no puedo hacer nada por él, yo soy su hermana y le conozco y entre nosotros siempre hubo confianza, me contaba desde que éramos pequeños que sentía atracción por una joven de una familia que conoció en un viaje con papá y hasta hoy estaba enamorado de misma.

—Se casará con la princesa Hera, uniremos por completo ambas familias— yo abrí los ojos con desconcierto.

—¿Y soy la última en enterarme?— ellos no respondieron, yo solté un suspiro, esto no me gustaba para nada— Me prometieron que si yo me casaba, Caius podría escoger con quien hacerlo.

—Es mi decisión— dijo el azabache detrás mío, esto era tan confuso que ahora mismo no sabía si quiera qué pensar, solo se que mi cabeza estaba repleta de tantas cosas, Hyunjin, el trono, el matrimonio falso, ahora Caius, esas pesadillas que tengo todos los días con él cadaver y él asesinato que presencié en él bosque, un reino enemigo dispuesto a comenzar una guerra, teniendo espías infiltrados y no estamos consientes mi siquiera de quienes son.

La gente del rey investigando, buscando, e interrogando al personal del castillo y los miembros del palacio.

—¿Papá está de acuerdo con eso?— pregunté, asintieron— Ustedes deberían llevarse a Hera, ¿cómo es que Caius pasará más tiempo aquí en el castillo?

—Soy consejero ahora— valla, si antes estaba sorprendía ahora lo estaba mucho más que eso, estaba tratando de procesar toda la información que se me está dando— La guerra se está aproximando y el reino debe tener todas las fuerzas posibles, estar preparados.