Infamous || Sukufushi

09

⚠️ Alerta de+18 mis rabanitos ⚠️
Lean bajo su propia responsabilidad. ԅ(≖‿≖ԅ)

Capítulo 09

— Es muy excitante llegar a casa y ver a tu esposo vestido de esta manera — susurró una voz sensual e intoxicante contra su oído haciéndolo temblar de deseo — ahora este esposo se encargará de complacerte.

La persona trás él movió las caderas frotándose contra sus glúteos desnudos, en  esta posición al tener los brazos elevados y el cuerpo un poco inclinado hacia el frente el pequeño vestido se había levantado dejando esa zona descubierta. Pudo sentir que la otra persona aflojaba un poco el agarré en sus manos pero la sensación fue momentánea ya que volvió a sujetarlas pero esta vez con una sola de sus manos, mientras la mano que ahora estaba libre vagaba por su cuerpo toqueteando a placer.

— E-espera Gojo, deberíamos ir a la habitación — murmuró Itadori con la voz un poco jadeante girando un poco su rostro para divisar el rostro del hombre de ojos azules.

Gojo soltó una carcajada gutural antes de lamer el lóbulo de su oreja, sin darle tiempo para pensar y de un rápido movimiento le dio la vuelta dejándolo de espaldas a la pared colocó la rodilla entre sus piernas antes de tomar su barbilla con suavidad.

— Tranquilo cariño, ya llegaremos a esa parte — susurró contra sus labios antes de trazar el contorno de estos con la lengua. — por el momento quiero saborearte.— En cuanto ese suave y cálido aliento rozó sus labios Itadori se olvidó de pensar. Gojo sin decir nada más lo besó.

Los besos de Gojo fueron muy energéticos, presionando firmemente contra los labios de Yuuji, sus respiraciones eran tan calientes que Itadori se estremeció bajo él, pero a la vez eran muy suaves e inclusive sabían un poco dulces.

Seguramente estaba en el paraíso... Itadori jadeó, su respiración estaba llena del aroma embriagador de Gojo, una mezcla de café, perfume y el aroma natural de su piel, una mezcla que Itadori conocía muy bien. Yuuji tragó saliva, tenía la boca seca, pero esos suaves labios sobre él se sentían un poco húmedos, y vagamente notó que la lengua ágil del otro se había deslizado por sus labios.

Sin darse cuenta, abrió la boca, y esa pequeña cosa instantáneamente barrio dentro. Se deslizó más allá de sus dientes, acariciando sus encías, luego se enredó con su lengua nerviosa. Mientras ese objeto acariciaba sus puntos sensibles, no pudo evitar gemir.

Los besos de Satoru siempre eran así de abrazadores, lo dejaban sin aliento y completamente derretido. Gojo al escuchar sus gemidos le respondió con una carcajada llena de lujuria.

Aunque Itadori trató de recuperarse era demasiado débil ante las caricias y besos expertos de Gojo, o tal vez fue la belleza de Gojo lo que fue demasiado seductor. Este beso fue profundo y largo, esa lengua ágil lamió el paladar, casi como si pudiera alcanzar la parte posterior de su garganta. Yuuji se ahogó en esas sensaciones. Su cuerpo temblaba sin parar, y cuando toda la fuerza lo dejó, todo quedó bajo el control de Satoru.

Justo cuando Yuuji estaba por quedarse sin aliento por sus besos Satoru finalmente se retiró un poco. Usando sus labios húmedos y suaves, se frotó contra la boca de Itadori, dejándolo recuperar el aliento. Al ver cómo los ojos de Yuuji se enrojecían, como si estuviera a punto de llorar, Gojo estaba más que satisfecho y así presionó ligeramente contra los labios hinchados de Itadori nuevamente.

— Dame tu lengua.— Esa órden baja y suave era encantadora y llena de pasión. El cuerpo de Itadori se estremeció y el fuego en su vientre ardió.

— G-gojo de verdad, deberíamos ir a la habitación. — contestó sin obedecer, aunque se estaba mareando con esos besos, mientras recuperaba el aliento, recordó que todavía estaba en la sala y que había llevado otras cosas para jugar.