Capítulo 14.

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"La vida sigue. Es el típico tópico que ella misma se ha repetido una y otra vez durante esos días. Han sido muchos los instantes en los que ha tenido que buscar ese tipo de consuelo para no hundirse por completo. Consuelo o excusa, qué más da. Y es que Paula, aunque lo intente, no consigue olvidar a Álex.

«No me enseñaste cómo estar sin ti»."

Nadie me enseñó a como vivir sin Brad, y es que si algún día me falta, no se que va a ser de mí. Qué sería de mí ahora mismo si no estuviera enamorada de Brad. Posiblemente sería como la mayoría de adolescentes de mi edad. Me pasaría los fines de semana de fiesta y en el instituto sin dar palo al agua. Pero él es mi gran motivación diaria para seguir adelante con mis estudios. Si no hubiera sido por él, ya habría tirado la toalla en más de una ocasión.

Dejé el libro en la estantería y empecé a preparar la mochila para el día siguiente.

Narra Brad

La gira empieza en una semana y aún tengo que preparar un montón de cosas. Tengo muchas ganas de visitar cientos de lugares nuevos y poder conocer a algunas fans; pero en especial, a una.

Suspiré.

¿Y si pasa algo que impida vernos? No. No lo soportaría. Es la primera vez que siento esto por una fan. Pero, ¿qué es exactamente? ¿Amor? No. Apenas la conozco. ¿Ganas de echar un polvo? ¡Para nada! No soy de los típicos tíos que usan a las cicas solo por tener sexo.

Mmm, quizás atracción. Sí, eso es. Me parece una chica súper guapa. Tiene una sonrisa preciosa y sus ojos marrones brillan de una forma especial debajo de esas gafas de pasta negra. ¿Cómo sería tenerla enfrente, a centímetros? Poder rozar su piel morena, tocar su largo pelo castaño. Abrazarla. Besarla.

Un escalofrío recorre su cuerpo de arriba abajo solo de pensarlo.

Ojala, algún día, ella y yo... algún día. Sonríe.

Una melodía que proviene de su móvil, le saca de sus pensamientos.

-"¿Si?" dice al descolgar.

-"Hola Brad". Una voz femenina que le es familiar, se escucha al otro lado de la línea.

-"Ho... hola Chloe". Dijo titubeante.

No se imaginaba que ella le llamase. No ha tenido noticias suyas desde hace más de un año, cuando se fue sin decir nada.

-"¿Qué tal? ¿No te alegras de hablar conmigo?" Preguntó en un tono alegre.

-"A decir verdad, no. ¿Qué quieres? ¿Para qué me llamas?"

-"Quería pedirte perdón. Ya sabes, por dejarte tirado después de tanto tiempo":

Y así es como me dejó. Tirado como un perro. Después de un año, tantas emociones, tantas cosas vividas juntos. Y es que ella fue la primera persona de la que me enamoré. Perdí mi virginidad con ella. La amaba y estaba seguro de que ella a mí también. Hasta que un día, deje de verla en el instituto. No respondía a mis mensajes, no cogía mis llamadas, no me abría la puerta de su casa. No sabía que le había pasado. Me estaba volviendo loco. Y fue cuando Elsa, una de sus mejores amigas, me dijo que se había ido a vivir a New York, ya que se sentía agobiada. Que toda nuestra relación le superaba. Que no quería seguir conmigo.

Y así fue como nuestra historia se fue a la mierda.

Como me iba destruyendo por dentro poco a poco.

Como me rompieron el corazón por primera vez.

Dangerous.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora