𝐌𝐀𝐘𝐅𝐈𝐄𝐋𝐃, Will Byers

xii. Will kill us all

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CAPÍTULO DOCE

WILL KILL US ALL
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MARY Y MAX SE VIERON PREOCUPADAS y corrieron hacia la ventana, rezando para que no sea lo que ellas creen que es

—¿Qué hace aquí?— pregunta Max, con la voz temblorosa cuando reconocen el auto azul entrando en la residencia Byers

—Nos está buscando— responde Mary— Debimos haberle dado a mamá una excusa para venir aquí

—Mierda, mierda— Max suspira y se aparta de la ventana mirando a Mary preocupad— ¿Qué vamos a hacer?

—No puede saber que estamos aquí. Nos matará, nos matará a todos— repuso mirando no solo a Max, sino al resto de las personas en la habitación

—Ok, yo me encargo— dice Steve— Aléjense de la maldita ventana— Steve tomo aire y salió de la casa, observando un Billy que se bajaba del auto con una mirada divertida

—¿Estoy soñando o eres tu Harrington?— habla el rubio con cierta burla

—Si, soy yo, no mojes tus pantalones— Le responde Steve, sin ningún ánimo en su voz, eso solo hizo que Billy sonreirá más. El rubio se quito su chaqueta de cuero y la tiro dentro del auto, para después cerrar de un portazo y caminar hacia el

—¿Qué haces aquí, amigo?

—Yo podría preguntarte lo mismo, amigo

—Busco a mis hermanastras. Alguien me dijo que estaban aquí

—Mh, que raro, no las conozco— responde, tratando de sonar igual de calmado que el

—¿No? Son pequeñas, pelirrojas, bastante molestas— describe Hargrove, sin creerse ninguna de las palabras que dice Steve

—No me suenan conocidas— Steve se encogió de hombros, haciendo una mueca de pena, que claramente era falsa— Lo siento

—No sé, no comprendo nada— Billy se acerca a él en paso lento, pero Steve no mueve ni un dedo— Nada de esto, me está dando escalofríos

—¿Si? ¿Y eso por qué?

—Mis hermanas de trece años desaparecen todo el día. Y las encuentro contigo, en una casa de un desconocido, ¿Y tu me mientes al respecto?— Steve se río sarcásticamente

—Amigo, ¿Te caíste muchas veces de niño? No entiendo que parte de lo que dije no entiendes, ninguna está aquí

—¿Entonces quienes son ellas?— Billy señala a la ventana, donde se pueden ver claramente cinco cabezas asomadas, en cuanto ellos hicieron contacto visual con el rubio, se apartaron rápidamente de la ventana, pero era muy tarde, Billy las había visto, los había visto a todos

—Escucha...— Steve no pudo terminar su oración, ya que Billy lo empujo fuertemente, haciendo que caiga al piso

—Te dije que plantaras los pies— le dice Billy, para comenzar a caminar hacia la casa- Vaya, vaya, vaya— Billy cierra la puerta detrás de él de un portazo