— Mamá... -susurra Simone con ternura, Sky asíntio sin prestarle mucha atención- Serías una madre exelente...
Ambos se habían ido a conversar al balcón, bajo la luz de la luna.
— ¿Está todo en orden? -pregunta al ver que Sky estaba llorando-
— Son más de las 00:00... -responde llorando- hoy... hoy estaría cumpliendo tres años también... -comenta mirando a la luna mientras imparables lágrimas caían por sus mejillas-
— ¿Quien? -pregunta Simone confundido mientras abrazaba a Sky por los hombros apoyándola en su pecho-
— Mi bebé... -musito Sky, no era capaz de hablar más alto por el nudo de su garganta-
— ¿Tuviste un bebé? -inquirio confundido-
— No -nego Sky- tuve un aborto espontáneo a las 14 semanas... era una niña, Jasmine. -comenta y una ligera sonrisa se instalo en los labios al pensar en que podría haber tenido una pequeña niña con Mark- y... soy como dice Denis, una casi mamá...
— Si te molesta no es necesario que te diga así ¿lo sabes? -cuestiona Simone preocupado, Sky asintio-
— Luego de lo que sucedió una parte de mi siempre soñó oír un "Mamá" dirigido a mi, pero la otra tiene miedo... el puede decirme Mamá si quiere... El padre de mi bebé murió hace menos de dos semanas y yo perdí a mi bebé hace más de tres años y hoy sería su cumpleaños...
— ¿Era tu novio? -pregunta Simone-
— Estábamos divorciados, hace tres años... pero era mi mejor amigo... perdí a mi mejor amigo... mi novia me abandono y yo huí... no sé si soy la clase de mujer a la querrías que tú hijo llame mamá... soy una cobarde
— Yo veo otra cosa -contradice Simone- yo veo a una mujer fuerte y valiente... a pesar de todo lo que te ha ocurrido en tu vida sigues aquí, de pie, resistiendo como una reina... tu te has caído mil veces por lo que cuentas pero te has levantado de todas, cada vez que levantabas la siguiente vez era más difícil de caer... no importa cuántas veces te hayas caído lo importante es que en todas te has levantado, te has limpiado el polvo y has dicho "está bien, Aquí vamos de nuevo. Vida, deberás esforzarte más para hacerme caer" y eso... eso te hace fuerte y valiente, no te hace débil. Ningún mar en calma hizo experto a un marinero, bonita... -menciono Simone, eran palabras simples que le habían llegado al corazón- Tu huiste, pero huiste de lo que te hacía mal. Nadie puede sanar en el mismo lugar donde lo rompieron. Quiero que me prestes atención y te grabes esto que te voy a decir a fuego en ese cerebro tan interesante que tiene -suplico tomando las cara de Sky entre sus manos- Repite después de mí: “Me he caído y me he levantado, eso me hace fuerte"
— Me he caído y me he levantado, eso me hace fuerte -repitio Sky-
— Eres una mujer de oro, vales mucho y da igual quien diga lo contrario. Si te dejaron ellos se lo pierden, tu no pierdes nada bueno. Todo vuelve en la vida, el Karma existe, Bonita. -murmuro sin soltarla-
Un incontrolable deseo se atravesó por la mente de Sky quien intercambiaba miradas entre los labios y los ojos azul cielo de Simone, al sentir que no podía resistirse contra su instinto se lanzó a los labios de él, quien la recibió gustoso. Al principio fue un beso tranquilo, que tenía como propósito conocer sus bocas, pero solo bastaron unos pocos segundos para que el beso suba de nivel; Sky sin separarse de él se sentó a horcajadas en su regazo, segundos después el se paró dejando a Sky sobre el para caminar con cuidado al baño. Los dos se separaron de beso por falta de aire, conectaron miradas y rápidamente volvieron a besarse.
Al llegar al baño Simone sentó a Sky sobre el lava manos para sacarle la remera, dejando a la vista su sostén, el cual no tardó en sacar dejando sus senos al aire libre, Sky le quitó la camiseta a Simone haciendo que quede a la vista todo aquello que el exponía en sus fotos, su torso que reflejaba los exigentes entrenamientos a los que se sometía a diario. El le saco los shorts dejándola semidesnuda, ella mientras lo besaba comenzó a desabrochar el jean de Simone en el cual se marcaba su miembro.
— ¿Estás segura? -pregunta Simone separandose de Sky-
— Si -afirmo antes de Simone volviera a besarla-
una de sus manos se dirigió a uno de los senos de Sky y el otro bajo lentamente desde su pecho hasta su intimidad, comenzó a masajearla despacio, sin necesidad de apuros, quería que disfrutará el momento. Cuando se canso de jugar con sus manos se arrodilló frente a Sky, separó lentamente sus rodillas, como si fueran de cristal y pudieran romperse de ser tratadas con mucha fuerza, cuando abrió completamente las piernas de Sky, dejando a la vista su vulva demasiado húmeda, sin despegar su vista de la de ella comenzó a lamerla con tranquilidad, no dejo ni un solo espacio sin cubrir. Sky llevo una de sus manos a su boca para evitar hacer ruido.
— Sigue, sigue... -jadeo Sky, Simone obedeció la orden y continuo con su trabajo-
Cuando Sky estaba en el punto máximo del clímax Simone paró haciendo que Sky se queje.
— No hay condones ¿Estás segura? -pregunta, Sky asiente- si quieres, podemos dejarlo así, sin penetración...
— Hazlo -susurro-
Sky se mordió los labios para no gemir cuando sintió el miembro de Simone entrar a su cavidad vaginal, comenzó con movimientos lentos, hasta que se acostumbro al ritmo y comenzó a hacer movimientos rápidos y profundos, Sky estaba conteniendo los gemidos en el cuello de Simone, quien jadeaba intentando nada hacer ruido para no Despertar a Denis, al cabo de algunos minutos después ambos estaban por acabar. Primero acabo Sky y cuando ella lo hizo el saco su pene para hacerlo fuera.
— Eso fue increíble -murmuro Sky antes de darle un beso rápido a Simone- ¿Puedes traerme ropa? quiero ducharme...
— Solo si me dejas ducharme contigo -pide Simone, Sky asíntio abriendo la ducha-
"Ducharse"... Ja, ilusos.
Magui, hermanita. Te amo<3