𝑴𝒊 𝑨𝒓𝒐𝒎𝒂 𝒆𝒔 𝑻𝒖 𝑫𝒆𝒔𝒕𝒊𝒏𝒐 ||𝐓𝐚𝐞𝐊𝐨𝐨𝐤||

Capítulo 1.

Allí estaba de nuevo en el salón de clases, esperando a que llegara el profesor para iniciar la clase, ya faltaba poco para la graduación. No tenía muchos amigos.

Desde su graduación de la preparatoria, solo ha sido amigo de Jimin; él ha sido de gran ayuda para sobrellevar su etapa universitaria. Al chico no le gusta tener contacto con casi nadie, no le daba su confianza a cualquiera y mucho menos convivía con sus compañeros, por alguna razón no se sentía seguro al convivir con otras personas.

— ¡JK, mira! Ya llegó ese chico. — Exclamó Jimin.

— No molestes, yo no quiero saber nada de ese alfa que se cree mucho. No me gusta que cada vez que aparece en algún lugar tú me estés avisando, no me interesa si llegó o no.

— P-pero si tú te la pasas mirándolo. — Le susurró guiñándole el ojo.

— Que no molestes, te dije Jimin. No me hagas enojar.

— ¡Bueno ya! — Exclamó Jimin levantando sus manos en señal de paz. — Pero no me puedes negar que ese chico te llama la atención.

—Estuvo bueno Park Jimin. — Le dijo entre dientes. — Hoy comerás solo.

JungKook se levantó de su asiento con gran enojo, y con sus mejillas en un  leve tono carmesí. Se dirigía a los últimos asientos del salón.

— ¡¿Cómo se atreve a andar diciendo esas cosas?!  Y más cuando llega ese alfa al salón...

JungKook estaba muy molesto, cada vez que su amigo le mencionaba a cierto alfa; no lo soportaba. Es cierto era guapo y por alguna razón siempre lo miraba, pero era inconscientemente, últimamente no soportaba tener cerca a ese alfa.

— ¡Ahh! Hoy JungKook se sentara a mi lado. — Expresó una voz en tono muy juguetón y con una sonrisa de lado. — Pensé que no me tolerabas querido. Pero veo que no es así, ya que te dirigiste directo al asiento junto a mí.

— ¿Qué? — Dijo JungKook ladeando su cabeza... — ¡Rayos! No me fijé y me vine a sentar justo al lado de TaeHyung, por tu culpa Jimin ahora estoy aquí.

TaeHyung cruzó sus brazos y se acercó a JungKook. — Mírame y contéstame... ¿A qué debo este honor? Hum... Será que esta hermosura al fin aceptara que le gusto, porque es un milagro que como si nada te decidieras sentar a mi lado. Debe ser que sí te gusto y hoy por fin decidirás confesarme tu amor.

— Ni creas. — Exclamó JungKook mirando hacia otro lado y ocultando su rostro. Eso que acaba que decir TaeHyung lo hizo sonrojarse más de lo que estaba y ahora su rostro ardía de pena y enojo. — Te creíste tan de buenas para que yo me fije en ti. Ni loco que estuviera TaeHyung...

— Como tú digas querido. Pero estoy seguro que te gusto y algún día vendrás con esos lindos ojitos tuyos, llenos de brillo a confesarme tu amor. — TaeHyung se giró en sus talones y tomó asiento.

—  Buenos días jóvenes. — Se escuchó en todo el salón. — Perdonaran la tardanza, pero tenía pendientes en la oficina del director. Ahora iniciaremos con las clases, pero antes les recuerdo que deben ir pensando a dónde van a realizar la salida de integración que realizamos cada año. Este año decidimos hacerla para finales de Octubre; así que creo que será un poco más divertido para ustedes, y una cosa más... Es obligatorio que todos asistan.

— Lo que me faltaba. — Murmuró JungKook. — Ahora tengo que asistir a un lugar en no sé dónde, en el cual estará ese alfa. — Renegó.  — ¡¿Qué te hice universo para que me castigues así?!

La clase transcurrió como siempre... Kook tomaba apuntes, mientras Jimin le hacía ojitos desde los puestos del frente pidiendo que lo perdonara.
Es cierto, Jimin era un alfa, pero un alfa de corazón puro y muy noble, su personalidad era totalmente diferente al de los otros alfas, protegía a Kook como si fuera su hermano, y le dolía mucho que su gran amigo, mejor dicho su hermano de otra madre se enojara con él.