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Sus ojos se vieron afectados de la luz cuando comenzó a abrirlos, llevó de forma inconsciente una de sus manos a sus ojos y se soba estos. Se sentía demasiado extraña y con un fuerte dolor de cabeza

—Finalmente estás despierta— Escuchó la suave voz de Taeyeon a su lado, entonces aclaró su vista para poder verla, su rostro estaba algo serio a decir verdad

—¿Qué pasó...?— Preguntó algo atontada, después de un momento su cabeza se aclaró un poco y recordó algo de lo que pasó —Creo que...— Devolvió sus manos hacia la cama, para mirar mejor a su madre

—Te sucedió otra vez— Dijo aunque sea algo obvio, con el tal de remarcarlo —Jungeun, mírame—

—¿Si?— Su débil mirada se dirigió hacia ella

—Debiste haber avisado antes que te estabas sintiendo mal— Acarició con cariño en la parte superior de su cabeza

—No me estaba sintiendo como mal— Confesó con una mueca de arrepentimiento —Era algo raro, pero no mal—

—Sea raro o mal, lo que sea que sientas, debías decirlo— Volvió a dar una caricia y dio un fuerte suspiro sonoro —Por favor, no lo hagas otra vez. Por suerte te encontraron muy rápido, ¿Había alguien contigo?— Preguntó mirando hacia sus ojos que estaban entrecerrados 

—Estaba Jinsoul y Jiwoo. Ahora recuerdo que ellas fueron quienes llamaron, pero no recuerdo más después que lo hicieron— Confesó desviando la mirada

—Lo mejor es que te hayan ayudado a tiempo— Le ayudó a que se levante suave, en eso cuando tuvo la oportunidad, abrazó a Jungeun aferrándose lo más que podía sin apretarlo mucho

—Mamá— Susurró durante aquel abrazo que le brindó

—Jungeun, de verdad no quiero que te suceda algo— Mencionó con lástima, mientras volvió a acariciar de su cabello al sujetarla —Eres lo más preciado que tengo, así que me hace daño también—

—Lo siento— Susurró sintiéndose culpable, apretando más aquel abrazo —Debí habértelo dicho en la mañana. No quería decirlo, porque pensé que no era importante, ¿Tuviste que salir del trabajo por mí?—

—No, no. Hoy estaba más desocupada, no te preocupes— Negó rápidamente para tranquilizarla —Y no te disculpes por algo así, no es algo que tú puedas controlar, aunque sea tu salud— Se separó para mirarla, esta quedó sentada

—Pero podría haberlo evitado— Los ojos de Jungeun se achinaron en lástima, Taeyeon sólo negó con su cabeza a medida que hablaba —Yo la verdad lo siento, solo le traje un problema a todos—

—Nunca serás un problema, nunca— Le remarcó y limpió la única lagrima que salió de sus ojos

—Además que de seguro...— Su madre la calló colocando un dedo en su boca

—No, Jungeun. Debes pensar cuando te pasan estas cosas, avisar la mínima cosa que sientes, sea buena o mala, interesa todo. Pero no eres un problema, ¿Está bien?— Miró de forma seria y a la vez cariñosa —Cada persona que está a tu alrededor quiere tu bien. Por eso alguien como yo le interesa mucho cómo te sientes y te daré todo de mí, porque eres todo para mí. Nunca serás un problema, pase lo que pase. Lo de hoy no es tu culpa, y ya pasó, solo hay que cuidar que no vuelva a pasar—

—Te quiero, mamá— Y volvió a darle un abrazo como si su vida dependiera de ello, la otra la aceptó gustosa

Se quedó por un momento soportando aquel dolor emocional que aún tenía en los brazos de su madre y luego busca separarse para verla, esta tenía un semblante triste también, cosa que también le ponía triste, más de lo que ya estaba, las emociones de su madre eran algo que a ella siempre le afectó de la misma forma

─✧ miracles maker /lipsoul/Donde viven las historias. Descúbrelo ahora