--¿Quién eres tú? ¿Qué haces en la cocina y en mi casa? --. El tipo no parecía amable y sus facciones lo decían todo y eso asustó a Felix.
--Disculpa. Soy Felix, el nuevo cuidador de Seungmin.
--¿Cuidador?
--Niñero. --dijo con una mueca de disgus...
Chaeryeong no podía creer lo que estaba pasando en esos momentos. Felix la besaba como nunca antes lo había echo, solo cerró sus ojos u se dejó llevar por el momento.
Un pensamiento pasó por la mente de Felix en ese momento se sentia como Hyunjin, solo satisfaciendo esa necesidad física de sentir. Se separó de su amiga un poco sorprendido de sus actos, mirándola a los ojos brillantes y dilatados, casi no podía articular palabra, solo jadeaba mirándolo, esperando por las tan ansiadas palabras de amor que le diría que empezaría algo seria con ella.
—Lo siento Chae —eso fue lo que pudo decirle—. Yo...yo creo que me precipité.
—¿Lixie? Lixie... —Acarició sus mejillas y quiso volver a besarlo, pero este no se dejó.
—Lo siento, lo siento mucho estoy muy confundido, y no quiero hacerte daño.
—No me haces daño, todo lo contrario y entiendo, sé que no me quieres como yo a ti pero a mi me basta saber que me deseas.
—Yo... —podia ver a Chaeryeong muy esperanzada como quizá el estuvo el día de ayer—. Dame tiempo.
—¿Estarás conmigo?
—Quiero, pero necesito tiempo.
—Todo el que quieras. —Chaeryeong lo abrazó tan fuerte y Felix se quedó pensativo si en lo que estaba siendo era lo correcto.
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Mientas los días iban pasando y era de esperarse que Felix evitara a Hyunjin en todo momento. Cada vez que Hyunjin bajaba él se distraía o buscaba alguna cosa con tal de estar atosigado para el otro. A veces Hyunjin lo llamaba para conversar, pero era ignorado. Hasta que un día la indiferencia del rubio llegó a expresarlo.
—¿Qué pasa contigo? ¿Por qué mierdas me ignoras? —dijo Hyunjin enfrentando a Felix que estaba en la cocina terminando de hacer la cena.
—No puedo hablar contigo,¿de acuerdo? Es más no quiero.
—¿Porque? ¿Que pasó? Llevo preguntándote lo mismo y tú no me respondes algo razonable.
—Ya te dije, no insistas. Y ahora disculpa pero debo alimentar a tu hermano.
Felix quiso salir con su bandeja en sus manos pero Hyunjin lo detuvo tomando su muñeca. La forma en como Felix lo miro llegó a incomodarlo un poco, pero eso no hizo que lo soltara.
—Quiero hablar contigo.
—Dejame ir, no voy a hablar, no tengo tiempo.
—Si lo tienes, después de darle de cenar a Seungmin puedes venir a mi habitación. —La manera en cómo Hyunjin lo miraba le dio a entender que aún había esa atracción y fue eso lo que le incomodó más.
—¿Que pretendes? En serio no te entiendo ¿no bastó esa chica que llevaste contigo?
—¿Que tiene que ver ella en este asunto? —Hyunjin levantó una ceja sin entender, pero solo unos segundos bastaron para que una pequeña sonrisa se formara en su rostro, acortó la distancia para quedar a centímetros del rostro de Felix. —Estas celoso. Vaya niñero...
