BαႦყSιʂƚƚҽɾ ✧⋆ԋყυɳʅιx

𝐄𝐏𝐈𝐒𝐎𝐃𝐄 10

Hyunjin podía saborear la lasaña que había traído de su ex casa para que la cocinara la señora Irene, Felix no dejaba de estar nervioso su madre lo observaba y él ya estaba comenzando a creer que ella podría sospechar algo, y solo esperaba que no.

—Está noche iré a un baile —le dijo y ella sonrió.

—¿Con Hyunjin?

— ¡No! —Respondió rápido, para luego atorarse con la comida, Hyunjin le paso un vaso con refresco—. No, con Chel, iré con ella —dijo rojo de vergüenza.

—Ah, tu amiga inseparable, es un milagro que no la vea por aquí desde hace semanas.

—Desde que empecé a trabajar —corrigió él y era así, Chaeryeong antes que Felix trabajara pasaba en su casa y a Irene le simpatizaba mucho.

Los tres terminaron de comer y Felix subió a su habitación muy rápido para cepillarse los dientes cambiarse de ropa y salir al trabajo, sabía que Hyunjin lo llevaría.

Hyunjin, abajo, se dispuso a limpiar la mesa, sabía que debía hacer algo, aunque en sí no estaba acostumbrado.

Irene ya se había dado cuenta que él no era un chico como su hijo, podía predecir que era de familia rica por sus modales y esa falta en colaborar propio de la gente adinerada en los quehaceres.

—Disculpe por solo poder hacer esto —dijo Hyunjin un poco avergonzado, limpiando la mesa, aunque había traído la lasaña para que Irene la preparara y eso compensaba el resto.

—Descuida. —le sonrió ella con ternura—. Gracias por todo lo que haces por mi hijo, chicos como tú hay muy pocos y sé que no eres el chofer de esa famila. —Hyunjin se puso un poco nervioso—. De seguro te conoció en la casa de los señores esos, pero estoy segura que no eres un empleado más.

—Yo... no sé qué decirle.

—No tienes que justificarte, solo te agradezco. —Volvió a sonreírle Hyunjin se sintió un maldito, Irene le agradecía por algo que él hacía por interés.

Sabía que era un egoísta y esa mujer confiaba en él, lo creía un buen tipo a pesar de saber que no era un pobretón como Felix si no alguien de muy buena familia.

Vio bajar a Felix quien se ponía su chaqueta para ir al trabajo.

—¡Mamá, ya me voy nos vemos! —se despidió.

—Creo que vendré luego de dejarlo en el trabajo —dijo Hyunjin a Irene y ella asintió.

—Está bien, te espero, tengan buena tarde.

Hyunjin salió tras Felix y encendió su moto, para llevar al pelinegro a su antiguo hogar.

Llegaron en minutos y Felix entró primero llegando a la sala donde la Rose lo esperaba.

—Aquí tienes la lista —le dijo pasándole el papelito y este asintió— ¿Hyunjin viene contigo? —preguntó dudosa.

Él sabía que tarde o temprano Rose preguntaría eso pero ya Hyunjin le había dicho que no le nada acerca de que dormía en su casa.

—No, pero me lo encontré afuera.

—¿Otra vez? Ayer también entraron casi juntos. —Felix tragó saliva y solo se mantuvo serio.

—Coincidencias.

Rose no dijo mas y salió de la sala, se encontró con su hijo y no dudo en encararlo antes de éste pudiera adentrarse en la casa. Hyunjin esquivó su mirada pero ella quería aclarar muchos puntos.

— ¿Dónde andas?

—Lejos, muy lejos y me va bien, solo vine por algo de ropa.

—Supe que estás sacando comida del refrigerador, esa no era la idea inicial. No sé qué pretendes hacer con tu vida pero no lograrás sacar más cosas de aquí, deberás trabajar para superarte. —Hyunjin frunció el ceño y apretó sus puños mirándola a los ojos.