Capítulo 12

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Sintió un beso en su frente, al igual que dulces caricias en donde estaba su vientre casi plano.

Sonrió un poco, dejando su cabeza reposar en el hombro del albino.

— Perú, por favor... Quédate conmigo... Si México te hace algo nunca me lo perdonaría... Él es cruel, lo sabes bien... — No respondió ante sus palabras, simplemente miraba las manos ajenas con cierta inquietud, sin siquiera titubear rápidamente se separó de él, mirándolo fijamente con seriedad.

— Vuelves a decir eso, Rusia... Soy capaz de ser yo quien asesine a esta cosa que crece dentro mío... — El de orbes violeta miró con preocupacion al Omega, sus palabras eran tan ácidas al ser escuchadas... Amargas al conocerlas... Y asquerosas al caer en ellas...

— Perú... No vas a sobrevivir sin mí a tu lado... Me necesitas, necesitas mis feromonas... — Susurró levantándose de la cama, acercándose al muchacho lentamente. — El bebé puede tener problemas si no está cerca de mis feromonas... — Agarró las manos del peruano, acariciando estás con cariño mientras sonreía, sin duda se le notaba aquella ilusión de ser un padre... — Nos necesita a ambos.

Nuevamente aquel maldito hecho de saber que es así...

Necesita las feromonas para tener un embarazo “feliz y agradable”.

Jodidamente lamentable.

— Ya debería bajar — Rápidamente esquivó el tema y jaló sus manos para apartarse de él. — México debe estar esperándome... Y debemos anunciar lo que posiblemente sea... Esto...

Se dió la vuelta, caminando hasta la puerta para abrirla y salir de su habitación, dejando detrás a un ruso en una duda...

Sonrió un poco, dando pasos hasta atrás dejándose caer en la cama del Omega.

— ... Vaya mierda que haces cariño... — Murmuraba mientras tapaba su rostro con sus manos, relamiendo sus labios lentamente. — Me fascina entrar en tu vida...

Agarró las sábanas, olfateando éstas sintiendo sus mejillas arder por sentir el aroma ajeno impregnado en ellas.

Joder, toda la habitación estaba con las feromonas a flor de piel, destacando aquel dulce sabor a melancolía y familia...

Su familia...

Mordió sus labios al sentir como una corriente eléctrica pasaba por su espalda hasta donde estaba su miembro.

— Perú... Cuánto... Te amo... — Arqueó un poco la espalda al momento de correrse, sintiendo sus manos húmedas y pegadizas, al igual que el ambiente combinado, de alguna forma, de las feromonas de su precioso Omega y el suyo.

— Si que tienes un muy raro fetiche... — Habló aquel teñido burlón, y su loro, que siempre lo acompañaba, soltó un “pervertido” , lo cual hizo soltar una carcajada al chileno. — ¡Eso Pepe!

Rusia frunció el ceño, levantándose de la cama para arreglarse el pantalón y ver con desagrado al contrario.

— Jodete... Al menos yo no obligo a nadie a follar... — Chile sonrió, ladeando la cabeza divertido.

— ¿Quién no puede evitar cogerse a alguien tan lindo como él? — Respondió acercándose a la lámpara de noche para agarrarla y revisar en ella. — Si vieras como suda... Cómo susurras tremendas palabras por sentirme tan profundo... Como grita que me detenga... La marcas en sus hombros a un rojo vivo...

— Que asco das... — Habló otro desde la puerta con los papeles en mano, Chile giró su cabeza para ver a Argentina entrar a la habitación con los documentos y demás, sonrió y mandó un beso volado. Lo único que recibió fue un golpe en la cara con un libro. — No estén hablando sobre mí cuando no estoy por favor, o juro que les voy a cortar aquel trozo de carne que les sobra...

Ninguno dijo nada ante su amenaza, simplemente se quedaron en un silencio, un ambiente tenso en aquella habitación.

Mientras que Argentina dejaba algunos papeles en la mesa de trabajo del peruano, Chile sacaba aquella cámara escondida, revisando si estaba bien o si recibió algún daño por mera casualidad.

Rusia, en su cambio, estaba en el armario del Omega, agarrando algunas prendas que estaban con aquel aroma, abrazando y besando estás.

— Bien, todo está correcto, como queríamos... — Dijo Chile guardando la micro cámara para acercarse a la ventana, abriendo esta y trepando. — Hagamos lo demás... Estamos a punto de terminar todo esto y finalmente obtendremos lo que tanto queremos...

Los otros dos asintieron, y ante ello Chile saltó de la ventana, Argentina se acercó a la ventana para cerrarla.

Rusia se dió la vuelta y salió de la habitación, guardando las prendas en aquel maletín.

Sonrió, mirando al frente mientras imaginaba la feliz vida que tendría con aquel chico cuando todo terminara...

Era tan lindo el caer en esa fachada a pesar de saber la verdad.

Pronto nos uniremos...

... Y seremos felices...

PARA SIEMPRE.

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Bueno, bueno, Rusia anda de babosito con Perú.

Esto lo explicaré con un extra más adelante:D

Si logran notar, tal parece que Rusia sabe sobre toda la fachada que está haciendo Perú.

Tengan algo en cuenta, aquí nadie es una víctima, porque todos saben dónde están pisando, puede que salgan lastimados, pero ya estaban advertidos antes de si quiera pensar en tal locura.

Bueno, ya van viendo quien es la primera potencia de muerte para el feto, la cosa es... ¿Cómo sacamos a la cosa sin que se muera?

JAJAJAJ pobre:(

En fin, ¿Cómo están? ¿Comieron? ¿Tomaron desayuno? ¿Durmieron? ¿Hicieron su tarea?
Yo tengo cosas pero que flojera.

Well... No tengo más que decir, cuidense, ¡Coman muy bien y saludable! Lxs quiero mucho<33

BAYS

𝐔𝐧𝐥𝐨𝐯𝐞𝐝 - 𝘔𝘦𝘹𝘪𝘳𝘶Donde viven las historias. Descúbrelo ahora