Saint se encontraba empacando una caja de panque-sitos cuando el llanto de Gavin lo hace detenerse y dirigir su mirada a la puerta que tiene a su derecha, su bebé Gavin está pataleando con sus piecitos y manitos en la pequeña camita, Saint se disculpó con el hermoso chico frente de él y antes de que llamara, Dana ya estaba a su lado para encargarse de terminar la caja de panque-sitos.
Apartó la cortina de bolitas que separaba el mostrador de la habitación y se dirigió a su bebé llorando, lo cargó y lo arrulló, pero Gavin no dejaba de llorar, sacó de la nevera una papilla de melocotón para dársela, Pero después de tres cucharitas el bebé ya no quiso, Saint suspiró; tendría cita con el pediatra hoy, pero cada cita era lo mismo Gavin no quería tomar otra cosa que no fue la leche de su pecho y no estaba seguro si podría seguir así sus pezones dolían a pesar de que ya se les habían pelado en los primeros meses de lactancia.
Dana entró en el espacio con una bandejita pequeña en sus manos con un pudin-cito en ella, Saint se lo agradeció con la mirada.
— Se que has estado un poco cansado en estos últimos días, y puede que a Gavin le guste uno de los mejores postre que hace su mamá — sonrió Dana mientras le daba la pequeña bandeja — Las chicas están tomando un descanso, el pedido de ayer ya está listo.
— Muchas gracias, Dani, no sé qué sería de mi sin ustedes.
— Bueno estuvieras soltero, y sin hijos — río
— Eso es cierto - agarró el pudin y tomó un pedacito con una cuchara y se la dio a Gavin que abrió su boquita comenzando a saborear el pudin de vainilla que Saint preparaba, sus ojos se iluminaron al ver que Gavin no lo votaba.
— ¡Gracias a Dios! — dijeron al unísono, Dana era amiga cercana de Saint y ella junto con las demás chicas sabían cuan mal se ponía Saint por no poder alimentar a su bebé con otra comida que no sea la leche materna. Dana les dejó espacio y se retiró a seguir en la tienda.
— Te gustó mucho ¿Sí?
— Pa pa pa pa.
— ¿Eso es un sí?
— Pa pa pa pa pa.
— Lo tomaré como un sí.
Saint le dio un beso a su bebé y siguió dándole el pequeño pudin.
🍒🍒
Eran las tres en punto y aún Saint seguía en la tienda, hoy les habían encargado un pedido para ese mismo día por lo que tenía que entregarlo a más tardar a las tres con treinta minutos.
Gavin después de algunos juegos y tomar ahora si un poco de leche de su madre se había quedado dormido, y Saint aprovechó para ayudar a sus amigas en la tienda. Saint estaba ocupado con un precioso pastel cuando la campana de la puerta sonó y las inconfundibles voces de sus gemelos llegaron a sus oídos, dejó la manga pastelería y salió de la cocina para ir a recibir a sus preciosos bebés.
Natasha sabía que si Saint no los esperaba en la entrada de su casa tenía que llevarlos a la pastelería.
— ¡Mami! — gritaron como de costumbre y Saint se agachó para recibir a sus preciosos bebés como todos los días.
— ¿Cómo les fue a mis bebés hermoso, se portaron bien?
— Si mami.
— Muchas gracias, Natasha. — Saint se dirigió a la maestra de sus gemelos.
— No te preocupes, supuse que hoy es un día de mucho trabajo.
— Lo es.
— Bien nos vemos Saint, adiós pequeños, no se olviden de hacer la tarea. — los pequeños movieron sus manitos despidiendo a su maestra.
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Una Familia De ¿Nueve? [Finalizada]
FanfictionSaint y Perth tienen 6 hijos. sus pequeños Gavin de 8 meses sus gemelos Sebastián y Bastián de 2 añitos su bebito Matt de apenas 4 años su pequeña April de 5 años Y Mackenzie la primogénita de 10 años, la cual le está sacando canas verde a su padre...