7:30 pm
Gojo empezó con su discurso, sobre como amaba a Yuuji, como lo conoció y todas esas cursilerías.
Lo envidiaba, desearía poder ser así de expresivo, pero no podía y eso lo frustraba.
-Pensé que los próximos en casarse serían tú y él tarado de Sukuna- dijo Nobara mientras disimuladamente veía al pelirosa con esa mujer. Parecía que ella era muy cercana a el.
Megumi no dijo nada, no tenía ánimos de nada, solo se quería ir de ahí.
-Nobara no molestes a Megumi, no sabemos que tipo de relación tienen- dijo Yuta
Esos dos hablaban del tema como si no estuviera presente. Pero no les prestaba mucha atención. El seguía perdido en su mente.
"Un día Sukuna se va a cansar de rogarte, yo se lo que te digo Meg"
Esas palabras fueron de Gojo, había veces en las que si se podía hablar seriamente con el.
Sukuna perdió el interés y no podía culparlo.
Lo había orillado a eso.
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8:30 pm.
El jardín del salón era hermoso, tenía una fuente, luces de colores cálidos, rosas blancas y una que otra banca alrededor.
Ahí estaba el sentado con una copa en la mano, mirándola como si fuera lo mas interesante del mundo, aunque ya estaba vacía.
Se sentía tan desanimado que no quería que Yuuji lo viera de esa manera, era su fiesta, y lo último que quería era que se preocupara por él, por eso salió a respirar un poco.
-Entonces, ¿tu eres Megumi Fushiguro?- pregunto aquella mujer mientras le extendía una copa.
La miró sin decir nada y como no quiso ser descortés, la tomó y ella sentó a su lado y continúo hablándole.
-Eh escuchado mucho sobre ti.
¿Porque esta mujer le hablaba como si fueran amigos?. Debería estar con Sukuna ¿No?.
- ¿Necesitas algo?- No quería ser grosero pero con la última persona que quisiera tener una conversación era con ella.
Así que directo al punto.
- Sí. Necesito que te alejes de Ryomen- dijo seriamente.
-¿Necesitas?.-
¿Había escuchado bien?
- Si. No le haces bien Fushiguro, odio verlo arrastrándose por ti, odio verlo triste por alguien como tú, no sé que te vio pero no lo valoras, se que no lo quieres, ¿Porque solo no lo rechazas?, ¿Es muy difícil para ti?, Yo podría hacerlo muy feliz, yo puedo corresponderle. No lo lastimaría como tú lo haces. Porqué simplemente...-
-¡Mahito!, ¿Que haces aquí?- preguntó Sukuna interrumpiendo su conversación -Te dije que me esperarás adentro, Geto no tarda en llegar.
Ryomen no pudo continuar la presencia de Megumi lo había dejado mudo.
¿De que estarían hablando aquellos dos?
