Capítulo 2.

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Las conexiónes bonitas no se buscan, surgen....

Atenea.

Central de Londres, lunes.

Observo como mi padre observar detalladamente el arma que cree en mí computadora, sólo necesito su autorización para poder fabricarlo y luego probarlo.

-Esto necesita un ajuste-dice-, pero lo demás está todo bien, tienes que ajustar eso y luego podrás fabricarlo--habla todavía mirando el arma, me mira de reojo ya qué estoy a punto de quedarme dormida.

-Ve a comer y luego a descansar-me dice más bien me ordena a que vaya.

-Esta bien, sólo porqué pones esa cara de qué no vas a dejar de insistir hasta que vaya a hacer lo que me dices-sigo diciendo recogiendo mí chaqueta y tacones del piso.

-Espera iré contigo, así sabré qué comiste y fuiste a descansar-habla y bufo sabiendo que no podre hacer nada para qué me deje ir sola.

Apaga la computadora para luego pararse y abrir la puerta. Soy la primera en salir luego me sigue el que cierra la puerta para luego caminar hacia el ascensor he irnos al comedor. Camino detrás de él sin ningun apuro alguno.

-Linda, quedate a lado de Charlotte todo el tiempo y si no es así te quedaras con Hades-hace referencia a mí Doberman que está entrenado especialmente para protegerme, tiene permiso para matar por si alguna persona se me acerca. Asi de protector es Josep.

-Sabes qué tu tienes qué dar la autorización para qué no ataque a nadie, ya qué tiene permitido atacar a cualquier persona que se te acerque-dice lo que les estaba contando.

-Asi que te quedas cerca de Charlotte o hades ¿entendido?-habla con una pizca de miedo que detecto y se muy bien porque.

-Lo se padre-contesto.

-Ademas no hablo más qué con Charlotte así qué no te preocupes aunque ahora tendré qué hablar más por el equipo Zeus-le sigo diciendo-, pero si esta Charlotte no tendré ningún problema.

-Eso espero y sabes qué también Charlotte está entrenada para protegerte-y es verdad, cuando Josep supo que hice una amiga la investigo a fondo, luego la entreno a parte para poder defenderse y también defenderme a mí, aunque yo le supliqué qué no era necesario ya qué me se cuidarme sola, pero el insistió y no puede hacer nada aunque a Charlotte le encantó cuando se lo comento mi padre.

-Solo te cuido Atenea-habla entrando al ascensor y hago lo mismo para luego tocar el número que nos llevará al comedor.

-Ya lo sé papá no te preocupes que estaré bien-respondo calmandolo o eso intento.

-Eso lo sé ya que los generales son de mi total confianza-me confiesa ya que no tenía ni idea.

-Los conozco gracias a sus padres que forman parte del congreso así que creo que ya los conoces-habla mientras las puertas del ascensor se abren dejando un pasillo donde al fondo hay una puerta negra que da al comedor que es enorme y tiene un ventanal al lado izquierdo que muestra una parte de la central.

Caminamos hasta llegar a la puerta que mi padre habré para mí y le agradezco con una sonrisa, la primera en entrar soy yo luego me sigue mi padre que ya empezó a caminar hacia la cocina. Lo sigo y observo que todos están comiendo con muchas personas y hablando entre sí, visualizo al equipo Zeus en una de las mesas donde también encuentro a Charlotte hablando con ellos, me alegra que ella pueda hacer amigos bastante rápido.

Llego junto a mi padre que tiene en sus manos lo que seria mí almuerzo y también un bowl con mi fruta favorita que es la fresa o frutilla, las agarro para que el pueda agarrar el suyo y podamos ir a unas de las mesas vacías, encontramos uno cerca del ventanal donde veo que habrá una tormenta por los rayos y el cielo que se torno de un color gris intenso.

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