Capítulo 17

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A la mañana siguiente, me despierto mirando a mi amado marido, y como siempre Christian esta abrazandome todo lo fuerte que puede, me quedo mirándole un buen rato, y paso mi mano sobre su hermoso pelo cobrizo. Los dos estamos completamente desnudos. Después de una noche un poco salvaje...

Noto moverse algo en mi espalda, y me giro y veo a mi hija durmiendo a mi lado. La cama es tan grande que no me eh dado cuenta que la tenia al lado. Me entra el pánico por que, estoy desnuda y Chris también. Solo nos tapa una sábana de color blanco. Intento quitarme los pies y los brazos de Christian, sin despartar ni a Phoebe, ni a él. Cuando lo logro, busco con la mirada, mi albornoz o alguna camiseta para ponerme. Veo la camisa de Christian tirada, pero esta en la otra punta de la habitación. Y si hago mucho ruido se despertará Phoebe, y no quiero que vea a su madre correr por la habitación desnuda. No es algo que me entusiasme.
Tampoco quiero despertar a Christian, ayer fue un día agotador, y la noche... Aún más. Y quiero que descanse bien.
Decido arriesgarme, salgo poco a poco de la cama, veo que Phoebe se mueve, y mi corazón acelera. La miro y veo que solo ha movido su brazo. Sigo saliendo de la cama. Y me maldigo a mi misma, por elegir una cama tan inmensa. Cuando logro salir, no me lo pienso dos veces y salgo corriendo hacia la camisa. Tropiezo con un zapato mio, y caso me caigo, pero no. Agarro la camisa y me la pongo todo lo deprisa que puedo. Veo que esos dos deben estar en el séptimo el sueño, porque ni uno se ha movido.

Salgo de la habitación, y me dirijo al vestidor. Me pongo unas bragas y me cambio de camisa, luego le cojo a Christian un pantalon de pijama, ese que tanto me gusta. Salgo y me dirijo a la habitación. Cuando llegó veo a mi cincuenta, despierto y con cara de horror. Se ha tapado hasta él cuello con la sábana. Phoebe sigue durmiendo, para nuestra suerte.

- Pontelos - Le digo susurrando, para no despertar a mi princesa.

Le paso el pantalón pijama, y se lo pone por debajo de las sábana. Es algo muy gracioso de ver, porque creo que nunca lo ha echo.

- Gracias - Me dice, me agarra la mano y me atrae hacia él. Y me sienta encima de su regazo. - Buenos días Sra Grey...

Me da un beso en la mejilla, y me quita un mechón de pelo de la cara.

- Bueno días Sr Grey. ¿Ha dormido bien?

- Siempre duermo muy bien, junto a mi hemosa mujer.

Phoebe se mueve pero no se despierta. Yo la miro por sobre el hombro de Christian, se ve tan linda cuando duerme.

- No me di cuenta que entró. - Le digo, y caigo en cuenta que anoche Chris, le puso seguro a la puerta. - ¿Tu le quitaste el seguro a la puerta?

- Si, cuando acabamos nuestra noche medio loca. Le quite seguro por si pasaba algo. Y bueno, adora tenemos una pequeña intrusa en nuestra habitación.

- No le llames así a tu hija.

- Si no estuviera ella aquí, lo estuviéramos haciendo ahora mismo. - Me dice en tono burlon.

- Habla más bajo, que se despertará. Seguro tuvo una pesadilla para que viniese a dormir con nosotros.

- Si, quizás... - Y agacha la cabeza, seguro pensando en las que eran sus pesadillas.

- Christian no pienses en eso, ya es pasado.

- Lo se Ana...

Y en ese momento se despierta Phoeby. Que guapa se ve cuando se despierta.

- Buenos días, papis - Se acerca a nosotros y nos da un beso.

- Buenos días princesa - Decimos Chris y yo a la vez.

- Que, pasa mi amor, ¿porque viniste a dormido a qui? ¿Y a que hora, bebe? - Le pregunto, me interesaría más saber, a que hora vino, porque quizás nos escucho o algo...

- Creo que cuando vine eran las circo, mamii, es que tuve una pesadilla, mamii.

Se acerca a mi y me abraza, yo me separo de Christian, dejando a Phoeby entre medio de los dos. Bueno me alegra saber que cuando se despertó Chris y yo ya habíamos acabado.

- De que iba tu pesadilla, bebé - Pregunto Christian un poco preocupado.

- Bueno, en la actuación de ayer, en los ensayos, la profe nos dio unos minutos para descansar. Yo me fui al baño y al salir me encontré con una señora con arrugas en la cara, era, rubia y llevaba un vestido negro. - Trage saliva, al escuchar la descripción de esa mujer - Se acerco a mi, a mi me dio miedo esa señora, era muy terrorífica. La señora me sonrió y me dijo cosas feas. De mi, de mi hermanito, y de mama. Me comenzó a gritar, yo estaba muy asustada. Luego vino un profesor, y la señora se fue. Y mi pesadilla era que esa señora, tenia como un látigo y me pegaba a mi, a Teddy y a mama. Luego ella se convertía en un dragón, y nos escupía fuego. Me asusté y vine aquí.

Mi niña entierra su cabezita en el pecho de su padre. Y yo la abrazo.
No me puedo creer que esa bruja se haya acercado a mi hija. Y le haya gritado, a mi niña.

- Bebe, ¿porque no nos lo dijiste ayer? - Le pregunta Christian.

- Porque esa mujer, me dijo que no dijera nada, pero esa pesadilla me asusto mucho.

- Mi princesa, tienes que confiar en nosotros, ¿vale, bebe?

- Vale, mamii.

Después de calmar a Phoeby, se va hacia su habitación y yo me que con Christian.

- Ana, antes de que puedas decir algo voy hacer que Elena no se vuelva acercar nunca más a nuestra hija.

- Christian, es que no lo entiendes, esa bruja se ha acercado y le ha gritado a nuestra hija. Por poco no la amenaza con la muerte.

- Lo se Ana, pero yo me encargaré que no vuelva a pisar más este país.

- Ya, pero no quiero que te acerques a esa mujer, ni que hables con ella, y mucho menos que la veas.

- Ana, no la eh vuelto a ver, eso seguramente se encargará Taylor, tranquila confía en mi porfavor.

Me mira, haciendo pucheros. Es verdad, desde que nos casamos, nunca me ha dado motivos para desconfiar en él.

- Esta bien... ¿Bueno vamos a desayunar? Me muero de hambre, ah y estoy hablando de comida. - Y le guiño un ojo.


Más allá de la familia GreyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora