31 días de KatsuDeku en honor al reto de #EsDeFanfics con temática Flufftober
Será 1 capítulo diario por el mes de octubre, cada capítulo estará siguiendo las temáticas que indique el flufftober, pero a fin de cuentas la trama de cada capítulo es de...
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—¡Feliz año nuevo!
—Kaminari-kun, aún faltan ocho horas para año nuevo..
—Midoriya, no seas aguafiestas.
El par de amigos quedó en encontrarse en el centro comercial para realizar las compras de la cena de año nuevo.
A último momento, cortesía del rubio canario.
Todo el exgrupo de escuela y compañeros de trabajo organizó una cena por el año que termina, excusas para reunirse con trajes graciosos y visitar la casa de Yaoyorozu, la anfitriona.
Luego de un año lleno de mucho trabajo y pocos encuentros sociales entre ellos, era la perfecta ocasión de volver a disfrutar de esas fechas tal como hacían en preparatoria.
—¿Kacchan hará la cena? —Midoriya asintió, revisando la lista de compras que justamente su novio le había hecho.— ¡Wow, debes comer como los dioses, Midoriya!
El mencionado solo sonrió un poco avergonzado rascando su sien, entrando a la par de su amigo a la primer tienda.
La verdad era esa, tenía la fortuna de que su novio tuviera un sazón de dioses.
Amaba verlo cocinar, perdía la noción del tiempo cuando veía sus músculos tensarse cuando volteaba un salteado o estaba cortando vegetales.
O verlo beber, era un acontecimiento que solo sucedía una vez alineados los planetas y constelaciones.
Bueno, no tanto.
Ambos tenían una variedad de distintos licores intactos, todos cortesía de sus agencias y eventos sociales. Ansiosos de finalmente ser ingeridos esa noche.
—Debemos darnos prisa, Kaminari-kun.
—De acuerdo, ¡Equipo KamiDeku entra en acción!
—Si Kacchan te escucha decirlo te explotará algo más que la cara —aseguró caminando con el carrito al área de especias, más enfocado en la lista que en el pobre chico pálido en medio del pasillo.
Kaminari sufrió de un muy terrible escalofrío de solo imaginarlo, haciendo una nota mental de nunca decirlo en prescencia del explosivo de su amigo si quería tener hijos a futuro.
° ° °
La cena había sido todo un éxito, la carne estaba en su punto perfecto, los complementos deliciosamente condimentados, las bebidas endulzadas perfectamente. Fue todo un manjar para degustar.
Estaban a un par de minutos de finalmente darle fin a un año lleno de aventuras y todos tenían listos sus divertidos adornos. El wonder dúo no siendo la excepción.
Katsuki tenía unos lentes azules que titilaban luces de colores, en contraste total con su apariencia ruda y expresión de odio a todos, bueno, a casi todos.
