23. Moving house

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Izuku no podía creer lo que escuchaba, estaba sorprendido y a su vez emocionado

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Izuku no podía creer lo que escuchaba, estaba sorprendido y a su vez emocionado.

No creyó que en su aniversario su novio le haría tal propuesta.

—Quiero que demos el siguiente paso.

—¿Cómo dices...? —el pecoso casi se atraganta con el vaso de refresco que tenía en sus manos.

El rubio extendió una caja pequeña pero más plana y larga que las convencionales para joyería.

Aún un poco extrañado, la abrió para encontrarse con una llave plateada acompañada de un dije en forma de explosión y dentro una foto de ambos. Su primera foto.

—Kacchan...

—Dek- Izuku —se corrigió al instante. Sintiendo sus mejillas arder y por consiguiente fruncir el ceño.— ¿Me...? Carajo, olvidé el puto discurso que me esforcé en hacer. No importa. ¿Te gustaría que viviéramos juntos? ¿Aunque tengas que soportar mi increíble cara todos los días al despertar y al irte dormir?

Izuku rió sintiendo las lágrimas de la emoción hacer nuevamente aparición.

—Me encantaría, Kacchan.


°
°
°

—¿Estás seguro de esto, Kacchan?

—Joder, Deku. Es la quinta vez que me preguntas lo mismo.

Ambos estaban en una tienda para el hogar, comprando algunos muebles y decoraciones para el departamento que compraron entre ambos.

Izuku vio una puerta decorada con temática de All Might. Era de completo color azul de madera con detalles amarillos y líneas rojas, con la célebre frase del héroe.

Decir que quedó maravillado con aquello sería mentira, pues esa palabra quedaba corta a comparación de su expresión y sentir.

Ni siquiera dijo nada, solo fue corriendo tras su pareja que miraba las estufas y refrigeradores cuando fue jalado de la mano deprisa al pasillo.

Al principio lo mandó al carajo, alegando cuan ridículo se vería eso en contraste a la pintura y decoración del resto del lugar. Pero tras pulsar los botones correctos acabó por aceptar, el peliverde aún sorprendido de que misteriosamente el efecto Izuku hubiera tenido éxito a la primera.

Katsuki tenía razón, la puerta estaba dedicada a clientela joven como niños aficionados, no para el actual símbolo de la paz. Pero a fin de cuentas cumplió con su cometido, atraer a un friki que la quisiera en su recámara.

Y ahí estaban ambos, dando las medidas de la puerta de la habitación principal para que quedara perfecta, el resto de habitaciones tendría diseños convencionales de madera.

El encargado divertido por las reacciones del héroe Dynamight y la alegría del héroe Deku se encargaba de brindarles asesorías sobre las verdaderas cosas importantes. La sala, luces, bañeras, cocinas integrales, comedor, etc. ¿Izuku? Izuku estaba concentrado en comprar un par de tazas con diseños inspirados en ellos mismos y una de All Might.

Pareciera exagerado el que estaban literalmente comprando todo nuevo para su hogar, pero iniciar una nueva etapa de su relación juntos involucraba que todo lo que llevaran fuera elegido por ambos.

Si, incluído el tapete en la entrada que tenía un gato con señas obscenas diciendo "Go away" en lugar de "Welcome".

Pero era lindo, pasar tiempo de calidad con su novio en actividades tan simples como ir de compras o patear traseros criminales juntos.

Siempre soñó con cada uno de los momentos que estaban viviendo, verlo ponerse sus lentes para leer a detalle las ofertas y ventajas de cada electrodoméstico y su libreta con el bosquejo que le hizo del departamento.

Tenía dos habitaciones, la principal tenía un balcón con vista a la ciudad; un baño con suficiente espacio, una sala que conectaba a la cocina y comedor. Era espaciosa y perfecta en el sexto piso de un complejo de diez pisos.

—Deku, ¿terminaste? Aún tenemos que ir a tu casa por tus cosas.

—¡Es cierto! Lo olvidé por completo... —aún sin ver a su novio podía adivinar que la vena de su frente ya estaba palpitando.— ¡Pe-pero dejé todo listo, Kacchan!

El rubio peinó sus cabellos y suspiró. Ya estaban pagando por todos los artículos que enviarían en un par de horas a su nuevo domicilio. Ellos mientras tenían tiempo de sobra para ir por sus cosas.

Bakugo prefirió llevar las suyas de una vez para evitar lo que a Midoriya le acababa de suceder: olvidarse por completo.

—Solo vamos, antes de que pierda la paciencia y te mande por toda tu mierda caminando y con esta lluvia.

Porque si, mientras hacían sus compras una torrencial lluvia comenzó, negándose a ir aún con las horas transcurridas.

Una vez pagaron, caminaron deprisa a la camioneta que Bakugo consiguió mientras compraban un auto propio.
Subieron y tras encender el auto, Katsuki avanzó en el asfalto de camino al que ahora sería el antiguo hogar del dulce chico de pecas.

El camino era agradable, la canción que sonaba en la radio era Down de Jay Sean, Izuku tarareando la canción con emoción mientras el conductor sonreía de medio lado, disfrutando la voz del dueño de su corazón ir en sintonía con el ritmo.

Estaba ansioso, emocionado de saber que una vez llegando a su nuevo higar muchas cosas cambiarían. Lo hicieron desde aquella noche en su tercer aniversario anual, porque aunque el ojirubí no lo aparentara, celebrara cualquier fecha significativa, cualquier pretexto para hacer sonreír al joven a su lado.

Esa noche, esa mañana, esa misma tarde lo ponía nervioso, porque muchas cosas les esperaban en ese nuevo camino en sus vidas, pero uno que tomarían juntos.

Ya lo había planeado cuidadosamente, cada detalle del cómo se veía cada mañana despertando y peleando con la cobija en las noches de frío. Ya celebraban fechas especiales juntos, pero ahora las organizarían juntos.

Ya no más visitas a la casa del otro, ahora las citas serían en su sala, en su habitación en su balcón.

Finalmente pasarían de tener piyamadas juntos a compartir hasta la ducha. Pequeños pero significativos cambios en la vida de ambos.

Se repartirían las actividades del hogar y discutirían cuando Izuku no pusiera sus zapatos en la entrada, o Katsuki pusiera demasiado picante en la comida de ambos.

Sabían que decidir vivir juntos no sería totalmente fácil y sencillo. Aunque nada lo era en sus vidas. Pero de lo que estaban seguros era que mudarse juntos sería la decisión mas importante y significativa en sus vidas.

Al menos por los próximos años previo a la gran pregunta.



BNHA KATSUDEKU - FLUFFTOBER 2021Donde viven las historias. Descúbrelo ahora