☕Caligrafía☕

640 73 3
                                    


Los juegos de mesa aparentemente eran la afición tanto de Qín Shǐ Huáng como de Beelzebub, y es que Nittiyam los había visto jugar desde ese faro ajedrez hasta juegos con tableros de colores con el paso de los días, era su forma de divertirse según ella creía, y es que habían pasado alrededor de una o dos semanas en los que estaban en la rutina de jugar, beber algo, y volver a jugar. No se quejaba, le hacía más fácil su trabajo de vigilarlos, y en cierto modo...le agradaba que ellos no la excluyeran por completo de sus actividades, ya que a veces la hacían sostener las piezas que lograban quitarle al otro, y siempre le daban de comer y beber cuando estaban juntos, nadie la había tratado así desde hace unos cuantos millones de años...le agradaba...

Sin embargo, no todo es totalmente perfecto, ya que ese día estaban con un juego de mesa que se realizaba con más de dos personas porque era de cartas con varias preguntas y retos de intelecto que un compañero debía decirle a otro, y si este acertaba avanzaban, pero si el otro equipo descubría lo que debían decir o hacer primero, ellos eran los que avanzaban, pero como solo eran dos, le dieron a ella las cartas para que leyera los acertijos a los dos, ¿cuál es el problema con esto? Pues ninguno en primera vista, pero a penas la diosa tomó la primera carta, ambos luchadores del Ragnarök se dieron cuenta de que algo andaba mal con ella.

Empezó a temblar ligeramente y sus labios se movieron pero sin decir nada, cómo si no supiera lo que decía en esos cortos textos.

–¿Pasa algo?–preguntó Qín Shǐ Huáng sacando a la vieja diosa de su ensoñación.

–Yo...–Nittiyam no sabía ni qué decir.

–¿No sabes leer?–preguntó Beelzebub alzando una ceja sin creerse sus propias palabras.

–...soy más antigua que la escritura...la lectura...soy más vieja que cualquier cosa que exista y haya existido...–dijo Nittiyam dejando la carta sobre la mesa–solo dos de nosotros eran capaces de leer...

–Vaya...–Qín Shǐ Huáng miró a Beelzebub de reojo haciendo un pequeño ademán.

–Bueno, si ese es el caso no podremos jugar esto–dijo Beelzebub empezando a recoger el juego que habían sacado.

–Perdón...–dijo Nittiyam poniéndose triste por arruinar la actividad de esos dos.

–No importa, hay otra cosa que podemos hacer hoy–dijo Qín Shǐ Huáng levantándose para dirigirse hacia uno de los cajones de la sala.

–Tengo algunos lápices aquí–dijo Beelzebub sacando de quién sabe dónde varios lápices, tanto de madera como de tinta.

–¿Qué van a hacer?–preguntó aún más confundida Nittiyam cuando Qín Shǐ Huáng volvió con un cuaderno en blanco a la mesa.

–Te vamos a enseñar a leer y escribir–dijo Qín Shǐ Huáng tomando uno de los lápices de tinta para escribir algo en la primera hoja del cuaderno.

–¿E-Eh...? No tienen que hacer eso...–dijo Nittiyam agitando sus manos.

–Para que puedas ayudarnos con ese juego a la próxima, ven–dijo Beelzebub moviendo su silla junto a la de Qín Shǐ Huáng, pero dejando un espacio para la diosa primigenia.

–Además no cuesta nada enseñarte lo básico, pudiendo hablar solo tenemos que ayudarte a relacionar los sonidos con las letras–dijo Qín Shǐ Huáng luego de terminar de escribir en el cuaderno, enseñándole a la mayor a pesar de que obviamente no entendería.

–Eh...usted tiene una linda forma de escribir–dijo Nittiyam ni pudiendo decir nada más que eso.

–Se llama caligrafía, y de seguro la tuya será igual de linda–dijo Qín Shǐ Huáng bajando su cuaderno a la mesa.

–Siéntate–dijo Beelzebub señalando con la mirada entre él y el emperador.

Nittiyam pensó un minuto aquello, pero no le encontró nada de malo, ella siempre había querido aprender a leer y escribir a pesar de que los únicos de compañeros en tiempos antiguos que podían leer y escribir no podían enseñarla, básicamente porque no era prioridad mientras los dioses mitológicos iban naciendo, pero si ahora podía tomarse el tiempo de aprender, ¿no? Y si se lo estaban ofreciendo las dos personas que debía vigilar, mucho mejor porque estarían más tiempo juntos.

Sin más tiempo que perder, la diosa movió su silla en medio de el emperador y el demonio, quienes empezaron a enseñarle lo básico en cuanto la escritura y lectura.

Insectos Mortales ☕🍵Beelzebub X Qín Shǐ Huáng🍵☕Donde viven las historias. Descúbrelo ahora