(Pausada temporalmente :( </3)
Donde Manjiro recibe postres y dulces hechos en casa de parte de un admirador secreto. ♡
- Oi Mikey, ¿qué es eso?, ¿otro regalo de tu linda admiradora secreta? - dijo el joven mas alto, con un tono algo burlón - ni cr...
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Narra ___.
Los pequeños rayos del sol que se asomaban por la ventana hicieron que poco a poco fuera despertando.
Mis ojos arden y me duele la garganta, siento el cuerpo pesado y no tengo muchas ganas de hacer nada en especial hoy.
Recordé rápidamente lo que había ocurrido ayer, me quedé viendo fijamente la pantalla apagada de mi celular.
¿Él me habrá llamado? ¿Siquiera habrá dejado algún mensaje?
La duda me estaba devorando viva, pero realmente me aterraba encender aquel aparato y quedar desilusionada.
- Manjiro 2, ayudaaaaa ¿qué debería hacer? - pedí auxilio al único acompañante que tenía en ese momento, obviamente al tratarse de un peluchito, no recibí respuesta alguna.
Después de un rato más de debate conmigo sobre si prender mi teléfono o no, decidí hacerlo.
Sí que habían mensajes y llamadas perdidas, la mayoría eran de Aki, pero no había señales de Mikey...
- Ah jaja... entonces, ¿es así como se siente un corazón roto? - presionaba mi puño contra mi pecho, mis latidos eran intensos, sentía aquel terrible dolor de garganta, mis ojos nuevamente se llenaban de lagrimas, tenía la sensación de no poder hablar aunque quisiera, horrible.
Realmente me ponía triste ni siquiera haber recibido respuesta alguna o explicaciones sobre lo de ayer - quizá me hice ideas erróneas, tal vez él no veía la cita de ayer tan importante ¿debí decirle que quería declararme? - las lágrimas corrían por mis mejillas mientras hablaba con aquel gatito de peluche que tenía.
- Ah~ tengo que parar de llorar, le avisaré a Aki que estoy bien, si... estoy bien, estoy bien, estoy bien... - repetí varias veces para creérmelo, joder, así no funciona, me siento como... como... hmmm ¡ya! Me siento como un moco, un moco feo, triste y solitario...
Agité un poco mi cabeza para dejar de pensar tonterías - me estoy volviendo loca, ayudaaaaa.
Tomé mi teléfono y le mandé algunos mensajes a Aki, ella se había quedado preocupada, pero le dije que estaba bien, aunque fuera una mentira... De todos modos sé que ella sabrá que le mentiré para no preocuparla, aaaaah perdóname Aki.
Dejé el celular sobre la mesita de la sala y fui directo a mi habitación, he decidido salir a caminar un poco y dejar de pensar las cosas, tal vez podría sentirme mejor.
Tomé un poco de ropa y me dirigí al baño, hoy haría todo tranquila y lentamente, nada de presiones.
Sentir el agua calientita me relajó muchísimo, incluso casi me hizo olvidar todos los problemas, luego de eso me vestí y salí del baño cepillando mi cabello.
- Oh, pensé que la había cerrado, si mamá se entera de que dejé la ventana abierta, me matará - dije bajito, mientras caminaba en dirección a la ventana de mi habitación, no sabía en qué momento la había abierto.
