Duty And Desire ♱ House Of The Dragon

vii. Illegitimate Children

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CHAPTER SEVEN
ILLEGITIMATE CHILDREN
(VIS VELARYON)

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Apenas llegamos observe en busca de mi madre. No estaba. Con desesperó, busque a mi padre. No estaba. No había nadie que fuera a defendernos además de mi abuelo, pero él debía ser rey antes que abuelo. Sentí las manos de Aegon apretar mis hombros.

—Vamos —sugirió en un susurro.

Asentí. Fuimos directo hacia mis hermanos, con Ser Arryk detrás de nosotros. Evite tanto como pude la mirada desagradable que la reina nos enviaba, apuesto a que ardía porque su hijo mayor no iba a lamerle los pies. Una vez cerca, logré ver con más profundidad las heridas de ambos.

De inmediato, me acerque a Luke. Quise sujetar sus mejillas, pero las dejé en el aire cuando note que podía hacerle daño. Luke estaba sollozando contra el pecho de Jace, quien me miraba con miedo.

—¿Quién lo hizo? —pregunte, sorprendida por mi tono frío. Jace me miró y coloque una mano en su hombro—. ¿Quien fue, Jace?

—Aemond —contestó Jace, mirando de reojo a Aegon con una mueca para luego verme. Parecía aterrado como jamás los había visto—. Nos llamo bastardos, quiso matar a Luke. Nos golpeó, Vis.

Apreté mis labios, pensando tan rápido como pude.

Le di una mirada más calmada a Jace, acariciando su cabeza un breve momento. Sentí que Aegon se movía y lo mire, espere que fuese corriendo a las faldas de su madre, y en lugar de eso parecía quitarse su abrigo. Me alivie, en ese breve momento me había jurado que si iba tras su madre iba hacer todo para anular el dichoso compromiso.

Iba a dármelo.

—Buena idea —tome el abrigo entre mis magos y comencé a colocarlo encima de Luke, él me miró con los labios hinchados y los ojos llorosos—. Estaremos bien, cariño. Nuestra madre ya va a llegar, ¿si?

—Bueno —susurró Luke, aceptando el abrigo—. Gracias, Eggo.

Mire a Aegon. Él me miró, confundido. Señale a Luke, irritada.

—Ah. De nada, no era para ti, pero... um, de nada.

Le di una mirada extrañada y volví hacia Luke, acariciando tan delicadamente como pude sus rizos para que me viera.

—Debes quedarte detrás de ambos, ¿si, Luke? —pedí—. Luego de esto te juro que iremos a ver a Arrax tanto como quieras.

Luke asintió, moviéndose para mantenerse detrás de Jace. Pero de repente negó entre sollozos y se lanzó sobre mi para abrazarme, lo sostuve con fuerza.

—Bien, bien, está bien —acepte, girando mientras sostenía a Luke con fuerzas—. No te muevas ni hables, Jace.

Jace no protesto, se veía aterrado.

Al darse vuelta, sin embargo, se encontró con una escena que la dejo pálida. Cubrí mi boca tan rápido como pude, asqueada y con un nudo en la garganta. En el sillón estaba Aemond con una enorme cicatriz en su ojo izquierdo, mientras su madre sostenía una de sus manos el menester cocía la herida.

Al verlo, de inmediato empuje a Luke para que se colocará detrás de mi. Oblique a Jace que lo abrazara, manteniendo a ambos detrás de mi mientras veía con completo horror la herida. Compartí una mirada con Hel, quien se veía perturbada y con ganas de largar a llorar. Sentí la mano de Aegon en la mia, apretando mis dedos.