Duty And Desire ♱ House Of The Dragon

xii. Proving Visenya's Worth

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CHAPTER TWELVE
PROVING VISENYA'S WORTH
(VIS TARGARYEN)

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Me quedé en silencio.

Podía sentir la falda de mi vestido moverse por la brisa que entraba en los aposentos a través de la ventana. Jace estaba apoyando su cabeza en mi hombro, con su respiración calma sobre mi cuello y su brazo derecho rodeando mi cuerpo. Sujete sus hombros, dándole un poco de la calidez que Elinda me dió.

Aún no podía pensar con claridad. Un hombre fingió su muerte y se fue a Essos con su amante, abandonó a su esposa e hijos, y ese hombre es mi padre.

«No» me dije internamente. «Laenor no es nuestro padre».

Con una mirada más oscura, me aleje de Jace para levantarme y mirar el horizonte oscuro. Visualice el horizonte con la espera de ver a mi dragón, pero no podía verlo por la reciente oscuridad en los cielos.

—¿Vis?

Negué, enfadada.

—Que se vaya a la mierda.

—¿Qué? —Jace dudo, sin oírme.

—Que se vaya a la mierda —repetí más alto. Jace estaba muy enojado y triste como para estar sorprendido, lo sabía aún sin girarme a verlo—. Es un imbécil, que se joda y se vaya a fornicar con todos los putos hombres de Essos.

Jace se removió, incómodo.

—¿Desde cuándo lo sabías tú?

Se refería a los gustos de Laenor, lo sabía. Me encogí de hombros.

—Como dices, soy inteligente y Laenor es un asco mintiendo. Tal vez por eso es tan obvio —señale su cabello castaño y luego señale mis ojos. Jace susurro algo, más para si mismo que para mí—. No tendré compasión por ese hijo de puta, que se vaya al diablo.

—Debemos mostrar tristeza.

—Creeme, Jace —me gire para verlo, girando mis anillos entre mis dedos para no golpear una pared—, lloraré a más no poder cuando me lo digan. Cuando estemos solos, Laenor no será más que el hijo de puta al que le faltaron huevos para seguir de pie.

—Fue cruel —dijo Jace, sin justificarlo—. Es decir, nos crío. ¿Eso no significa nada?

—No para los hijos de puta como él.

—Deja de hablar así —dijo Jace, incómodo—. Es vulgar.

—¡Es un...! —al darme cuenta de que gritaba, suspire y hablé en un tono más bajo—. Lo entiendo, le gustaba la pija y tenía cuatro hijos que no eran suyos y daban muchos problemas. Pues bien, que se vaya a la mierda. Nuestro padre jamás haría eso.

—¿Nuestro padre? —dudó Jace.

—Lord Harwin, Jace.

Jace se tenso, asintiendo con incomodidad.

—Hmm. Él se fue, Vis, al igual que Laenor.

—Lo obligue —revele. Jace me miró con sorpresa y señalo con su mirada la cama, a lo que me senté a su lado y suspire—. Sabes que era obvio, todos lo veían. Tenía miedo de que llegara a mayores y pensé que lo mejor iba a ser que se fuera, además nuestra madre necesitaba aliados en todos lados, incluyendo a Harrenhal.

Jace suavizó su mirada y asintió, suspirando.

—¿Por qué no me dijiste antes?

—Tenía miedo de que me odiaras —dije, sinceramente.