Aprendiendo a ser femenina © #1

capítulo veintitrés

Solo habían costado un par de días hasta que realmente pude mejorar y volver a trabajar, Rodrigo  me miró con curiosidad de arriba abajo pero terminó esbozando una sonrisita.

—Veo que finalmente estás completa. —Soltó muy animado, le dedique una mirada llena de sarcasmo  causando que volviera a reírse. —Planeabamos reemplazar Con una marioneta, la verdad.

—No creo que sea posible eso, la marioneta no te haría renegar y entonces mi ausencia sería notable. —Opine mientras me ponía los zapatos, Scott quien se encontraba probándose un traje me señaló dándome la razón.

—Sé que solo fueron tres días pero te había echado de menos, aquí nadie me ayuda a ponerle a Rodrigo los pelos de punta. —Mencionó  Scott con una sonrisa inocente, Rodrigo  le dio una mirada en blanco.

—Es que son todos aburridos pero no te preocupes, el dúo desastre ha regresado.

—¿Sabes quien no te extraño para nada? Las calenturientas fanáticas de Scott,  han tenido más material de él solo que en mucho tiempo. Así que te ganarás su aprecio.

—Hasta que vuelva a posar a su lado, me odiaran de nuevo.

—Ósea en la noche. —Dijo riendo.— Clary ¿Es verdad que Liam fue a verte o solo fuertes rumores?

—Deja de ser tan cotilla,  Rodrigo.— Scott intentó frenarlo pero al mayor no parecía importarle. Seguía mirándome mientras limpiaba el lente de su cámara.

—¡Tú sigue trabajando! —Lo reto en un grito. Haciendo que Scott deje de prestar atención y siga probándose  trajes.

—Eh, paso un momento.

No sabía porque le estaba diciendo eso, se suponía que era mi privacidad ni siquiera sabía porque alguien haría rumores sobre la visita de Liam ni cómo se habían enterado qué  era yo a quien había ido a ver.  

—¿Ya son amigos?  Es raro, Liam no tiene amigos desde…

Antes de que pudiera seguir, Scott salió serio interrumpiendo el momento. 

—Ya estoy listo.

Aquella expresión había logrado que Rodrigo  se quedara en silencio y me di cuenta de que las cosas se habían puesto tensas por su comentario. Lo que sea que había pasado Rodrigo  sabía todo y tenía esa sospecha de que Scott también estaba involucrado. Solté un suspiro porque supe que no me lo dirían. 

Había algo que estaban escondiendo y tenía que ver con Liam, quizás también con el hecho  de que no quisiera ser famoso.  Muchos misterios  para tan poco tiempo. Solté un suspiro de frustración antes de ir a preparar los últimos detalles para empezar la sesión de fotos.

Hicimos bromas pero no como siempre, la tensión en el asunto se notaba y no me sentía muy cómoda estando en el medio completamente desinformada.  Duramos dos horas y media haciendo fotos hasta que tuvimos una pausa para poder ir a comer, yo fui la primera en salir porque en realidad era todo mucho drama para mi gusto.

No imaginaría que no sé terminaba ahí

—¿Entonces ella está aquí? —me detuve en seco al reconocer la voz de Noah.

—¿Por qué de pronto te interesa?  —el que respondió no era nada más ni nada menos que Liam.—Ya hiciste lo que tenías que hacer,  vete.

—Será la próxima modelo del momento, no puedo perderme esa oportunidad. —Noah soltó una risita.—Tu ya tuviste la tuya ¿No?

¿Por qué estaba escuchando  esto?  No era correcto,  estaba dispuesta a irme pero mis pies no fueron capaz de responder a ninguna acción cuando escuche mi nombre.