capitulo veintidós

93.2K 5.7K 1.1K
                                    

¡Aviso! Los comentarios con spoilers serán eliminados lo antes posibles para que todos puedan disfrutar de la lectura  sin problemas.  ♡




Resulta que la combinación calor+frío  mi cuerpo no podía soportarla con tal facilidad. De pronto me encontraba enferma envuelta en sábanas, la fiebre apenas había bajado y no había dejado de estornudar en todo día.

Estaba desmotivada para todo y mi madre se había encargado de avisar la situación en el trabajo, por suerte estaba obligada a quedarme en mi cama todo el día. En realidad, no era algo que me molestara demasiado.

Era la segunda vez en el día que me daba un baño, seguro mi madre estaría orgullosa. Necesitaba baños calientes porque de verdad hacía frio aunque calculaba que  algo  estaba haciendo mal.    Baje a comer algo a las once de la mañana,  me encontré con Drake sentado en el sillón y sonrió al verme.

—¿Por qué siempre te suceden cosas extrañas?  —Quiso saber dejando a un lado la computadora, lo mire confundida. No me sucedían cosas extrañas.

—Solo me he enfermado, sabes que siempre me pasa. Supongo que anoche salí muy desabrigada.

—Bueno, ser una celebridad tiene su lado malo. —Subió sus cejas y le di una mirada en blanco,  yo no era ninguna celebridad y eso era obvio. 

—¿Estabas haciendo algo importante? —pregunté mientras caminaba a la cocina para hacerme un jugo de naranja, podía escuchar a Drake desde la sala.

—Empezando a buscar cosas para comprar para nuestro cumpleaños.  —Grito, levante la cejas con diversión. todavía faltaba para eso.

—¿Por qué?  Tenemos un plan  todos los años, no puedes romper una costumbre familiar.

—¡No voy a romper la costumbre familiar!

—Más te vale —Amenace señalando con mi  vaso.—no quiero fiestas grandes, no me gustan.

—Tampoco soy fanático de esas fiestas —Arrugo su frente. —Prefiero dejar que  la costumbre siga intacta. 

—amén, hermano.

Cuando sonó el timbre Drake ni siquiera se movió como para abrir la puerta, siguió mirando su computadora fingiendo no haber escuchado nada.  Solté un bufido y fui yo a abrir.

Cuando lo hice agradecí haberme dado esas dosis de duchas, si no ahora me vería del asco y le daría material a Liam para que se burle de eso.

—¿Qué haces aquí?  —Pregunté  con curiosidad,  tenía una canasta en sus manos y parecía nervioso. Si, estaba nervioso.

—Me ha enviado mi madre para que te traiga esto y bueno ya sabes, cualquier excusa que me saque de ahí me viene bien.

Me dio la canasta y asentí entendiendo.

—Ah, qué amable de su parte. gracias por traerlo.

—¿Por qué actúan como si te fueras a morir?  —Preguntó Drake desde atrás, le dediqué una mirada de advertencia y levantó sus manos  como seña de rendimiento. —Solo decía.

Aprendiendo a ser femenina © #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora