Ese día su jefe le pidió presentar una factura con la fecha del día siguiente, es por eso que estaba despierto aun siendo las once y media de la noche. Miró la hora en el reloj, parecía que estaba pasando lento pero era ilógico, los minutos tienen sesenta segundos ¿Por que se hacen más largos?
No lo sabía, pero el sueño se apoderaba de él, tenía su brazo apoyado en su pierna en forma vertical con su mentón en su mano sintiendo sus ojos cerrarse al mismo tiempo que soltaba un bostezo.
Justo cuando iba a caer dormido sintió algo picar su nariz, frunció el ceño rascando su nariz dandose cuenta de un avión de papel caído en su cama.
¿Que?
¿Acaso mucho "De vuelta al barrio" le estaba afectando?
Tomo el avión y lo abrió con inseguridad, ¿Que tal y si era una broma? Aún así, lo desdobló viendo algo escrito en el centro del papel.
"No sé que pretendas, pero quiero dejar las cosas en claro, pero no a través de esto, será personalmente, así que espero verte en la bodega mañana a las siete."
Okey, decirle eso a Taehyung no fue buena idea definitivamente, pues aún si era por escrito se podría sentir el enojo e incomodidad que le causó.
Ash, su intento de ligar fue asqueroso, pero bueno, tendría que afrontar lo que le diría Taehyung.
De solo pensarlo le daba miedo.
Oh ya son las doce.
Con bajos ánimos se puso a hacer lo que le habia pedido su jefe, y al hacerlo cerró la laptop para echarse a su cama abrazando un poco de la colcha que le sobraba como si fuera un peluche y al pasar de las horas cayó dormido.
[ • • • ]
Cómo todo macho pecho peludo se levantó y se cambió la pijama por su ropa de diario y busco sus sandalias, al estar listo bajo a la cocina donde encontró a su tía preparando el desayuno, aunque ahora estaba discutiendo con su tío. Oh dios ya había comprado lo que necesitaban.
—¿Cómo se te va a olvidar? Te dije que haría tortilla de espinaca, ¿Que es lo primero que se necesita para la tortilla? ¡Huevos, Jongsuk! ¡Huevos!
—Ti-tia buenos días...tío buenos días..si no hay problema, puedo ir yo a comprar los huevos. —hablo, esperando que la respuesta sea afirmativa, sonrió para sus adentro cuando su mayor asintió con una sonrisa.
—Gracias Jungkookie, de verdad que tu tío es un cabeza de chorlito, ten cariño.
—Oh no, no tía, tengo dinero acá, no te preocupes —antes de que su tía siguiera insistiendo se dirigió a la sala y salió de la casa, camino a pasos lentos hasta la bodega y soltó un suspiro al no ver a Taehyung por ningún lado, formó fila.
Ni dos minutos pasaron cuando sintió una presencia tras suyo, aunque al principio no le tomo importancia pero cuando su hombro fue tocado y a la vez el que estaba atrás suyo hablo.
—Por un momento pensé que no vendrías, tardaste.
—Apenas me levanté...—respondió cohibido.
—Es de mala educación dar la espalda a quien hablas. —Trago saliva y creyendo que con valor volteo un poco para ver a Taehyung— ¿De veras recién te despiertas?
—Pues si...¿Tú te levantas a esta hora? Que flojera, a mí me queda una hora de sueño y fresco como lechuga —hablo queriendo quitar su incomodidad al recordar el motivo por el que estaban hablando— Supongo que querías hablar de lo que dije ¿Cierto?
—Si —sin saber que decir, espero a que el otro siguiera hablando— Mira, Jungkook, no quiero que malinterpretes las cosas, no sé si lo que dijiste era para pensarlo de la manera que yo lo pensé o fue un comentario casual.
—Dependiendo de como lo tomaste —queria murmurar, pero eso solo lo delataría— No lo hice con malas intenciones
—¿Quieres tener un romance conmigo? Es como lo tome yo—trago saliva disimuladamente y miro intentando poner una expresión sorprendida cosa que logró—
No quería admitirlo, pues sabía que las cosas se harían incómodas, pero tampoco quería mentir.
—N-no esperaba que lo tomarás de esa manera —por dios, odiaba mentir, pero ¿Volverían hablar si lo admitía?
—No me gustan las personas mentirosas. —bajo la mirada, ¿Por qué vino? Hubiera dejado las cosas como estaban e ir olvidando con el paso del tiempo, pues solo se quedaría una semana— Quiero la verdad, Jungkook.
—Okey, si lo dije de esa manera, ¿Contento? —respondio, vaya ahora el enojo se apoderó de él
el que debía estar enojado era Taehyung no el, pero la insistencia era lo que menos toleraba—
—Masomenos —le tomo desprevenido el que lo tomara del brazo y lo llevará a otro lugar, con una mueca no rechisto, pues estos temas eran privados y mucha gente podría escucharlos si seguían ahi— No te lo tomes a mal, pero no quiero tener nada contigo, ni contigo ni con nadie.
Evito a toda costa mirarlo, ¿Que si sentia lastimado? No..si, bueno si, un poco, aunque era lo que menos quería, pues recién estaba empezando a sentir algo por Taehyung, pero se sintio desmotivado, triste, y sus ojos querían delatarlo al llorar.
Sintió un leve peso en sus hombros, eso fue suficiente para hacerlo levantar la mirada y conectarlas con los ojos grisáceos de Taehyung.
—Dije que no te lo tomes a mal.
—No me lo tome a mal —murmuro apartando la mirada— ¿Solo era eso?
—Jungkook...—trago el doloroso nudo que tenía en la garganta, sus ojos ya no querían soportar retener las lágrimas, pero tenía que aguantar, de seguro y se veía patético— Hey, no lo hize con la intención de lastimarte —pronto sintió su rostro ser tomado del mentón por un suave toque volviendo a conectar miradas con el contrario— Lo siento.
—No es necesario eso —siguió murmurando, soltó un suspiro apartando suavemente la mano en su mentón— Tranquilo —le dió una sonrisa de labios pegados y se apartó un poco de el— Creo que...fue necesario esto, ehm yo tengo que comprar, supongo que...nos vemos.
Regreso a la tienda no encontrando fila por lo que pidió huevos y al tenerlos ya pagó y regreso a la casa dejando la bolsa en la cocina quedándose y ayudar con el desayuno.
Ir a su cuarto solo le darían ganas de llorar y no quería eso, aún sabiendo lo malo que era guardarse sus emociones.
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Regalo «TaeKook»
FanficEra un Omega. Un Omega no cortejado. Algo realmente "raro" para alguien de veintiocho años. Aunque el no quería a alguien en su vida en esos momentos. O eso pensó hasta que llegó esa noche. Era una noche de año nuevo, a la media noche cuando los...