i survived. - analyne

it happened quiet I.

Todo estaba ya organizado. Jolyne los había invitado ese mismo sábado por la noche, comerían y tomarían algo todos juntos, en la casa de Jolyne. Pero seguía siendo temprano; 2 de la tarde.

Jolyne estaba más nerviosa y ansiosa que nunca. Pasó toda la mañana limpiando la casa de arriba a abajo. Cada imperfección que encontraba trataba de arreglarla. Pasó horas pensando en qué ropa ponerse, cómo vestirse, qué les diría cuando los vea, qué le diría a Anasui... La pobre casi temblaba de los nervios.

Jotaro no se encontraba en la casa, pues él estaba trabajando. Jolyne creía que no quería estar allí cuando los chicos lleguen a su casa.

Jolyne intentó preparar algo que siempre solía cuando era más jóven: brownies con extra chocolate. Le salió mejor que nunca. Pero se dió cuenta que estaba muy nerviosa y decidió calmarse un poco. Intentó respirando hondo y exhalando. Eso la ayudó un poco.

Es demasiado temprano para que estés tan nerviosa. ¡Por favor, Jolyne! Ya no tienes 15 años para estar tan ansiosa por un chico... Ya cálmate.

La pobre trataba de consolarse a sí misma.

Pasaron las horas. Ellos vendrían a las 9. Jolyne comenzó a arreglarse a las 6:30PM. Tomó una ducha, secó su pelo, lo planchó, buscó unos jean azules y una remera de mangas largas al cuerpo de color verde oscuro. Era su 'outfit' favorito que no usaba hace tiempo, pero seguía quedandole bien.
Luego, procedió a maquillarse. Sombra de ojos verdes y labial verde. Ella amaba ese color. Aunque le recordaba cómo ella solía arreglarse todos los días en aquella celda y como terminaba con el maquillaje corrido cada vez que peleaba.
Sus manos temblaban mientras intentaba maquillarse. Pero se concentró pensando en otra cosa y pudo hacerlo bien.

Colocó un poco de música bajita mientras seguía ordenando lo que ya estaba ordenado. Cada vez que pasaba por el espejo del living se veía y procuraba que no tenga ninguna "imperfección", pero ella se veía más bonita que nunca.

—

— ¿Así está bien? ¿O de otro color?

Anasui. Había sacado casi toda su ropa de su placar y la colocó en su cama. Estaba tan indeciso que pedía la opinión de todos en aquella casa. Weather Report, el que más lo ayudaba y soportaba, daba su honesta opinión.

— Jeans negros. Remera... ¿negra también?

— ¿Tú lo crees...? Estaba pensando en jeans azules con una sudadera blanca o gris... Ya que no hace tanto calor fuera... Oh Dios... ¿Qué dices tú, Ermes?

Ermes suspiró. Se guardó todos sus comentarios negativos y agregó:

— Sabes que puedes ponerte cualquier cosa, ella lo aceptaría igual. De todas maneras cualquier 'outfit' te queda bien— sonrió y soltó una risa—. Jeans negros con una sudadera gris oscura, esa. Vamos. Te quedará bien— dijo señalando la ropa de la cama.

Anasui sonrió. Pero borró rápido aquella sonrisa porque creyó que se veía muy nervioso. Sentía ganas de llorar, pero no quería hacerlo frente de ellos.

***

Las horas pasaron, lentamente. Jolyne no paraba de pensar en cosas buenas y malas a la vez.

Los chicos ya estaban a punto de llegar. Weather conducía un auto rentado. Anasui iba del lado como acompañante, con un ramo de flores rosas y hojas verdes. Foo Fighters y Ermes detrás.

— ¿No quieres ir tú primero?— preguntó Weather mientras estacionaba en frente de la casa de Jolyne.

— ¿Yo...? ¿Antes que nosotros juntos? ¿Crees que es buena idea?— preguntó, ahora más nervioso que nunca.

— Ella te necesita más que a nosotros, Anasui. Baja del auto. Dirígete hacia su puerta y tocala. Espera a que ella te abra. Abrazala y saludala tomándote el tiempo que quieras.

Por favor. No ahora.
No quiero recordar todo aquello
ahora.

— Ella ya debe estar esperando. Ve.

Anasui los miró, los los ojos llorosos. Bajó del auto antes que ellos los vieran llorar.
Cerró la puerta. Sostuvo el ramo con fuerza y miedo. Mientras más cerca estaba de la puerta, mas lágrimas silenciosas caían de sus mejillas.

Ya estaba justo delante su cara. Le tomó casi un minuto entero tocarla.

Oh, Jolyne. Perdón por hacerte esperar
tanto.
Lo siento. Lo siento tanto.
Lo siento...

Finalmente tocó la puerta.

***

Dentro de la casa Jolyne, escuchó la puerta. Definitivamente había alguien llamando.
Dio pasos lentos. No quería que escucharan del otro lado el sonido de sus zapatillas. Sentía su cuerpo pesado.

Pasó todo tan silencioso.
Tan tranquilo, pero a la vez tan, pero tan ruidoso como aquellos gritos de ayuda y dolor.

Su cara estaba caliente. Quizás estaba colorada. Le dio pena.
Abrió la puerta con su boca y nariz tapada por su mano izquierda. Y vio a aquel jóven. Pelo rosado y alto, mucho más alto que ella y quizás más delgado. No esperaba solo verlo a él. Quitó la mano de su cara y se quedó sin palabras.