i survived. - analyne

she's not okay

— Ella no está bien. Sabes a lo que me refiero.

Eran las 3 de la tarde. Anasui y Jotaro estaban sentados nuevamente juntos, esta vez en una cafetería donde no había mucha gente.

Jotaro tomando un café, Anasui tomaba una malteada de frutilla.

— He notado que llora mucho. Extraña su madre y aún sigue curando sus heridas. Está muy deprimida. Aún así, me ha pedido que la ayude a encontrar un trabajo.

— ¿Dónde está su madre?— preguntó Anasui un poco inseguro.

— Nueva York. Con sus padres. Supuestamente cuidando de ellos.

Ambos no sabían como seguir con la conversación. Estaban muy incómodos hablando sobre estos temas.

— Pasó ya un año. Ya estamos casi en 2014. Ni siquiera puedo recordar la fecha exacta en la que salimos heridos y se nos fue todo a la mierda— decía Jotaro mientras tomaba un sorbo del café caliente y con un cigarrillo entre sus dedos.

— ¿Cómo se ha dado cuenta que Jolyne está... mal?

— Se enoja fácil, no conmigo.

—¡Es mi culpa, es mi puta culpa!

— A veces la escucho desde su cuarto llorando o con música metal alta. Quizá rompe cosas. No he notado autolesiones...—decía mientras fumaba—. Pero como padre me preocupa. No sé qué mierda hacer.

Anasui estaba muy enfadado con él, tanto que no podía disimularlo en ese momento.

— ¡Escucharla! Preguntar lo que ella quiere—Había dado un golpe a la mesa—. Lo lamento. Lo siento. Todos estamos preocupados por ella. Hermes, Weather y FF, estamos viviendo juntos ahora en un departamento... Jolyne siempre está en nuestra cabeza. Estamos preocupados, Doctor Kujo.

— Todos nosotros estamos preocupados por ella. Lo sé y lo entiendo, pero...

— Quizá lo único que necesita ella ahora es... vernos un rato, entre todos, no solo yo.

— Ella necesita tiempo para ella misma.

Anasui tomó su billetera. Sacó una lapicera de su bolsillo y un papel. Escribió su número telefónico y se lo entregó a Jotaro.

— Por favor. Entregaselo a Jolyne— Anasui estaba cansado de escuchar siempre lo mismo—. Que ella me llame cuando esté lista. Por favor, dígale que la esperaré... la esperaremos todo el tiempo que haga falta.

Dejó dinero para que Jotaro pague su bebida y se fue sin decir otra palabra.

—

— ¿Qué se supone que es bueno para mí? Solamente lo que tú crees. ¿Dónde está mamá? ¿Al menos tienes su número? Papá. Necesito verla o hablar con ella. Por favor.

— Hija...

— Me estás quitando la libertad de todo lentamente. Necesito...

— Estás... Jolyne, necesitas calmarte.

Jolyne lo miró a su padre con la cara llena de lágrimas, los ojos rojos y ojeras. Había comenzado a llorar otra vez.

— ¡Claro que necesito calmarme! ¡Por fin en algo estamos de acuerdo, mierda! Papá, sé que hice las cosas mal. Hice todo mal. Todo. Mamá no está. Mi mejor amiga no está. La persona que amo no está.

¿La persona que amas?
¿Amas? ¿Tu acaso amaste?
¿La chica a la que no le importaba nada?

— Anasui. Es él, ¿verdad?

Jolyne le dio la espalda. Estaba gimiendo y sollozando.

— No me quieres ver con él, no lo quieres, ¿verdad?

— Solo quiero que estés bien contigo misma.

Jolyne comenzó a romper y tirar todas las cosas de su cuarto. Parecía una cría enojada, tirando todos los juguetes en toda la habitación. Se mantuvo así por lo menos un minuto entero.

— Yo estoy bien conmigo. Pero estoy mejor cuando estoy y pienso en él. Por favor...

Jotaro no dijo nada, solo sacó un papel doblado de su bolsillo y se lo entregó a Jolyne. Dejó su habitación.

Era el número de Anasui. Con una nota adicional.

"Llamame solo cuando estés lista. Te estaré esperando. Te estaremos esperando.

Te amo,

-Anasui".