en treinta y un días suceden muchas cosas: a veces te vas, a veces vuelves, a veces reímos juntos, a veces no, a veces soy yo quien se va, a veces volvemos a encontrarnos y a veces ni siquiera me entero de que te has ido.
pero, cuando me miras, sien...
(muy) probable presencia de ooc | no se menciona; pero los personajes tienen entre 12-14 años | takemichi/hina y mitsuya/hakkai implícitos | una maraña de ideas a la que traté de darle forma
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Mikey no sabe cómo reaccionar cuando Draken comienza a dejarle cartas.
Se las envía a través de Baji, porque, a palabras de él, cometió el error de deberle un favor. No sabe si Draken volverá pronto a clases; pero la primera vez que su amigo llegó con un sobre estaba rascándose la nuca con incomodidad y le dijo: "Tu novio se quedó estancado en el siglo pasado".
Draken no es su novio (espera que eso cambie pronto), así que Mikey solo le quita las cartas y evita que las lea, porque sabe que el azabache es un chismoso de primera.
No son cartas extensas como la que Takemichi le escribió a Hina el día en que se confesó o llenas de cursilerías como las que Hakkai escribe para Mitsuya pero que al final no puede entregar por vergüenza. Son pequeñas, vienen en sobres de un color diferente cada día y contienen frases cortas al final: Un "Espero que tengas un buen día", "Me alegro de que salieras bien en ese examen", "¿Quieres ir a almorzar después de tus clases? Puedo ir a recogerte"
"Estoy feliz de estar contigo"
"Me gustas, Manjiro, en serio"
Mitsuya le dice que lo mejor es responderle, porque su amigo está finalmente confesando sus sentimientos y, aunque han sucedido algunos inconvenientes, merecen ser felices. Takemichi está de acuerdo con él; pero también agrega (más por parte de Hina), que puede llevarle un regalo o responderle cada nota que le deje. Que así puede ser un poco más fácil.
Mikey no tiene ningún problema con eso. Ha estado esperando mucho por una oportunidad así.
"Espero tengas un buen día"
"Igual tú, Kenchin"
"Me alegro de que salieras bien en ese examen"
"Emma me hizo estudiar hasta que me dolió el cerebro"
"¿Quieres ir a almorzar después de clase? Puedo ir a recogerte"
"Me encantaría...pero ¿Tú pagarías, verdad? No tengo dinero):"
"Estoy feliz de estar contigo"
"Yo también estoy feliz de tenerte conmigo. Me alegro de que estés bien, Kenchin"
"Me gustas"
"A mí también me gustas. Mucho"
Baji no necesitó leer esa última nota cuando vino a recogerla, solo le bastó con ver el sonrojo en el rostro de su amigo para soltar una carcajada y darle un golpe en la espalda.
—Joder, ¡ya era hora!— fue lo que dijo antes de irse. Mikey le sacó el dedo medio después de que lo perdió de vista.
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