"Perfect two" || Larry Stylinson

Capitulo doceavo:

Una vez que llegaron a la sala y se encontraron con los padres del omega estos se quedaron mirando al mayor con sorpresa, sin estar realmente seguros sobre lo que dirían ante la clara presencia del alfa que era mucho mayor que su pequeño niño, por lo que cuando Louis se aclaró la garganta para hablar ellos cambiaron su mirada hacia el pequeño esperando a que dijera algo.

— Mamá, papá... él es Harry Styles y es el alfa del que les hable.

Dice quitándole la duda a los mayores sobre de quién se trataba y la madre del castaño sonríe para después recibir las flores que el rizado le entregaba después de salir de aquel momento algo incómodo.

— Es un gusto para mi conocerlos, señor y señora Tomlinson. Louis me ha hablado maravillas de ustedes y gracias por invitarme a cenar.

Mantiene una sonrisa en sus labios mientras estrecha las manos de ambos, algo asustado por el silencio pero cuando lo invitan a tomar asiento se acomoda en el asiento junto al de Louis quien comienza a servir la comida para todos.

— Harry, es un gusto conocerte ¿Cuantos años tienes, cielo?

Pregunta la madre sirviendo puré en su plato, intentando sonar casual aunque podía sentir a través de su lazo con el alfa que él no estaba par nada contento con todo aquello.

— Se que soy mayor, no quiero que piensen que voy a aprovecharme de Louis. Vine principalmente con el fin de presentarme para poder pedir su permiso para cortejarlo formalmente, él no merece menos que eso.

La conversación se había vuelto un poco más incómoda luego de eso por lo que decidieron todos cenar en silencio, alfa y omega dedicándose miradas preocupadas entre sí mientras los padres de Louis analizaban cada uno de sus movimientos, era incómodo y estaban asustados pero pudieron llevar la cena lo mejor posible, con algunas preguntas corteses por parte de Johana que intentaba ayudar a que la cena fuera más liviana.

Cuando terminaron de cenar los dos omegas comenzaron a levantar los platos, llevando todo a la cocina y dejando finalmente solos a los dos alfas, por lo que Mark antes de que Harry pudiera decir algo comenzó a hablar.

— Sé quien eres y que trabajas en la universidad. Mi hijo parece realmente embobado contigo pero no voy a decir que estoy de acuerdo con esto.

El alfa se levanta tomando su copa de vino y comienza a caminar por la habitación, analizando al alfa con cierta desconfianza debido a que no iba a entregar a su pequeño niño a cualquiera que buscará hacerse llamar alfa.

— Señor Tomlinson, Louis es realmente especial y jamás buscaría hacerle daño. Vine a hablar con ustedes para que puedan conocerme y saber que realmente mis intenciones son las correctas.

Aquellas palabras salieron de la boca del rizado con completa sinceridad, levantándose de su asiento para poder sacar de su bolsillo la caja de satén en donde guardaba la corona que había comprado para el menor y enseñándosela a su padre.

— No le pido que confíe en mi del todo pero permítame su bendición para poder cortejar a Louis, yo realmente siento que le pertenezco y lo cuidaré sobre todas las cosas.

El alfa mayor termina cediendo ante la petición del alfa al ver la sinceridad en sus ojos y estrecha la mano del mayor justo en el momento en que loa omegas regresan y Harry toma la caja con la corona para por fin poder dársela a su omega.

— Después de tanto tiempo esperando por fin poder llegar a este momento. Esta corona de flores será el símbolo de nuestro cortejo y si me aceptas prometo que será la primera de muchas.

Era bastante tradicional y ceremonioso entregarles corona de flores a los omegas cuando comenzaban con el cortejo por lo que cuando el Omega asintió el rizado se encargó de colocarla con suavidad en su cabeza para después regresar todos a la mesa a disfrutar del postre que el castaño había preparado con tanto esmero, elogiándolo entre todos por lo buena que había sido la cena de principio a fin y comenzando por fin con una conversación que les permitía conocerse entre sí, volviendo todo más ameno luego de la incomodidad inicial de la cena.

— Ya es tarde y debo conducir hasta casa, ha sido un placer conocerlos y muchas gracias por aceptarme.

El alfa se levanta del sofá en el que habían acomodado de la sala para continuar la conversación y saluda a ambos padres, siendo después acompañado por el menor hacia la puerta en donde ambos se quedan fuera sonriendo con alivio al saber que las cosas habían salido bien después de tanto temor.

— Gracias por la corona, es preciosa y la usaré orgulloso, mi alfa.

El Omega rodea el cuello del ojiaverde con sus brazos mientras se pone de puntitas y cuando están lo suficientemente cerca se besan con suavidad, disfrutando de los labios del otro y del alivio que les daba por fin poder estar juntos sin tener que esconderse de nadie.

— Gracias a ti por aceptarme, aún no puedo creer que me permitas ser tu alfa. Mi hermoso y perfecto omega.

Deja suaves caricias en las mejillas bronceadas del más bajo para después besar su frente con suavidad, sabiendo que debía irse debido a que era tarde pero que seguramente se verían al día siguiente.

— Que tengas dulces sueños, buenas noches y descansa.

Susurra aquello recibiendo otro pequeño beso en sus labios por parte del menor para después oírlo despedirse del mismo modo, alejándose del mismo dejándolo solo en el pórtico de su casa en donde Louis observa como abandona la calle en su auto hasta no verse más y regresa al interior de su casa, sintiendo mariposas en el estómago y demasiada felicidad por la nueva etapa que habían comenzado juntos bajo la bendición de sus padres.

Al estar en la cama Louis agradeció en su interior por todo lo bueno que habían conseguido ese día y se acurrucó en una de las sudaderas del mayor que se había dejado, quedándose dormido rodeado por su aroma que tanta calma le daba y con una sonrisa dibujada en sus labios.

Amo mucho sus comentarios, gracias por seguirme a pesar de que me toma mi tiempo el actualizar.

All the love, Puki