"Perfect two" || Larry Stylinson

Capítulo decimo:

Jueves en la mañana, quedaban solo un día para que las semanas de exámenes acabaran y Louis además de estar demasiado estresado por pasar mucho tiempo estudiando, alejado de su alfa, se encontraba emocionado porque ya solo quedaba un día para que él y Harry pudieran estar juntos oficialmente y hacer las cosas que siempre había querido compartir con su alfa. 

Harry por su parte tenía grandes pilas de exámenes que corregir y estaba demasiado malhumorado por solo poder pasar tiempo con su omega cuando iban a la universidad o regresaban de la misma, realmente lo extrañaba demasiado pero sabía que era necesario que él tuviera su tiempo para estudiar así le iba bien en sus exámenes y luego podrían estar juntos todo el tiempo durante las vacaciones festivas para recuperar la semana perdida.

Cerca de la hora de salir hacia su mañana de universidad Louis ya tenía preparado un desayuno sorpresa para compartir en el camino con su alfa, había madrugado temprano para preparar las cosas preferidas de Harry y antes de que él tocara bocina para que saliera se encontraba corriendo bajo la nieve para subir rápidamente al auto, entregándole su taza térmica rosa de café al mayor con una sonrisa para que pudiera comenzar a beberlo.

— Buenos días, precioso. Muchas gracias por el café pero no deberías correr en la nieve, puedes resbalar y caerte, omega.

— Lo sé, alfa pero hace demasiado frío fuera y moría de ganas por verte.

Se acerca a su alfa para poder dejarle un pequeño beso en sus labios antes de que el rizado encienda el auto para poder emprender camino a su penúltimo día antes de la libertad de su pareja que tanto habían estado esperando 

— Yo también quería verte pero no quiero que mueras en el intento o que te lastimes mucho.

Ambos reímos luego de mis palabras y decido comenzar a conducir mientras bebo del café que Louis había preparado para mi, sorprendiéndome al descubrir que también había preparado unos muffins y un sándwich de huevo y tocino que era mi preferido por lo que mi humor mejora bastante tras la primera mordida y puedo relajarme realmente cuando el aroma dulce del omega comienza a rodearme en el interior del auto.

— Se que estas muy cansado con todo esto de los exámenes que tienes por corregir pero esta tarde me gustaría pasarla contigo y prepararte una rica cena ¿Qué dices, alfa?

La sonrisa del omega y el sonrojo de sus mejillas y nariz lo tenían embobado desde el primer momento en que el frío había comenzado y ambos sabían que a Harry le costaba demasiado decirle que no a Louis por lo que se despidieron en su lugar de siempre y Louis le recuerda que va a prepararle una comida maravillosa para que pueda relajarse un poco después de sus días tan cansados. 

La mañana se pasa demasiado rápido para ambos y unas horas después de la hora de almuerzo ambos se encuentran para poder ir al apartamento del mayor, pero Louis pide que vayan antes a la tienda por lo que aquella es la primera vez que verdaderamente caminan juntos en público mientras hacen las compras para la cena que iba a preparar el menor y ambos se sienten bien, se veían como una pareja que estaba junta hace años y cualquiera que estuviera cerca podía decir que la manera en que se miraban era de película, con ojos brillosos y cargados de amor. 

Una vez que tienen todo Harry paga las cosas después de una pequeña discusión con Louis que quería pagar la mitad y salen de allí con bolsas en las manos apresurándose para llegar al auto antes de que la nieve comience a mojarlos, tomándose muy pocos minutos para estar resguardados en la calidad del hogar del mayor.

— Bien, tu puedes ir a corregir exámenes y yo comenzaré a cocinar ¿Si?
— Está bien pero si necesitas ayuda me dices, puedo cortar vegetales o hervir agua

Ambos comienzan a reír por las boberías que decía el mayor y Harry después de besar a Louis se dirige hacia el sofá en donde se acomoda para continuar corrigiendo exámenes para poder entregar todos al día siguiente y no tener cosas pendientes para el regreso de las vacaciones.

Louis comenzó a cocinar luego de que su alfa fuera a terminar con su trabajo y no podía explicar lo bien que se sentía al tener aquellos momentos con el mayor, podían comportarse realmente como una pareja dentro del hogar del rizado y no había cosa que lo hiciera mas feliz al omega que poder ser mimado por su alfa sin necesidad de estarse escondiendo para que nadie los vea.

La noche transcurrió con calma, Harry terminó de corregir los exámenes justo antes de que la cena estuviera lista y ayudó al ojiazul a poner la mesa para después sentarse juntos a comer la deliciosa cena que el omega había preparado para él.

— Lo estuve pensando y quiero que mañana luego de la universidad conozcas a mis padres ¿Qué te parece? Ellos preguntan demasiado con quien paso tanto tiempo y realmente ya no quiero mentirles. 

El mayor dejo sus cubiertos pensativo ante la propuesta del menor, quizás era muy pronto pero sabía que no podía aplazarlo mas tiempo sin causar una discusión por lo que iba a tener que presentarse con los padres del omega y pedir permiso para por fin comenzar con el cortejo que tanto ansiaban ambos para poder ser formalmente una pareja. 

— Lo haremos, iré a presentarme con tus padres y realmente espero agradarles.

Ambos estaban nerviosos por tener que pasar por aquellas presentaciones pero sabían que era parte del cortejo y que tarde o temprano iban a tener que conocer a la familia del contrario porque era algo inevitable cuando el plan que ambos tenían era pasar el resto de sus vidas uno junto al otro.