Prólogo.

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Primer día de universidad, mi madre insistiendo en que va a ser el comienzo de una gran etapa para mi vida y yo maldiciendo el hecho de que mi auto se hubiera descompuesto esa mañana.

Mi primera clase del día, literatura y había demasiada gente perdida, llegando tarde y demasiado apresurada para el horario que era. Me siento en un lugar cerca del frente con un vaso de café en mi mano y espero allí hasta que veo a un chico entrar corriendo a la sala, despeinado y con la ropa algo desarreglada que se sienta en el escritorio del profesor.

— Deberías quitar tu trasero de allí si no quieres meterte en problemas con el profesor, idiota

Le digo con condescendencia y ruedo mis ojos, no podía creer que aquel anciano que vendría a darnos una clase demasiado aburrida fuera a llegar tan tarde al primer día y quizás, de todos modos no era aquello lo que me molestaba, sino el hecho de que nada había salido bien desde que desperté esa mañana.

— Muy amable de su parte el defender mi escritorio, me presento con la clase. Mi nombre es Harry Styles y yo seré su profesor de literatura

Aquello lo dice mirándome desde su lugar con una sonrisa divertida en sus labios y pasa sus manos por sus desordenados rizos mientras yo maldigo en mi interior, deseando que un agujero en el medio del suelo del salón se abriera y me tragase en ese mismísimo momento.

El susodicho comienza a dar la clase luego de que una risa se escucha por todo el salón y yo no escucho ninguna palabra.

Era tan joven ¿Como podía estar dando una cátedra en una universidad tan prestigiosa? Y aún más importante ¿Como podía ser tan guapo?

La manera en la que caminaba de un lado a otro, como mojaba sus rosados labios mientras esperaba respuesta a alguna de sus preguntas y la manera tan despreocupada en la que acomodaba su cabello estaban comenzando a hipnotizarme, como también lo hacían aquellos ojos esmeralda que a pesar de la distancia que había entre ambos brillaban cada vez que miraba en mi dirección, como en ese momento que me miraba fijamente, expectante.

— ¿Usted tiene idea sobre el tema señor..?

Me observa esperando que responda su pregunta y también que agregue mi nombre, porque claramente era el primer día y él no me conocía de nada.

— Tomlinson.

Aquello salió como un susurro de mis labios, estaba realmente avergonzado el día de hoy y claramente el sabía que mi atención no estaba puesta en sus palabras, estaba buscando fastidiarme.

— Lo siento, no estaba escuchando

Digo mientras siento el color subir a mis mejillas y bajo la mirada, dejando que otra persona conteste para que luego siguiera corriendo la clase con normalidad, intentando prestar atención a lo que decía mi guapo profesor de literatura.

"Perfect two" || Larry StylinsonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora