Desde Que Eras Una Niña. [Jeff The killer y Tu.]

Capitulo 1. El sujeto de la escuela.

— ¡Señorita! Su teléfono lleva sonando hace 5 minutos. Debe de levantarse ya, llegará tarde a la escuela.— cómo siempre mi mayor domo personal me molesta cuando estoy durmiendo, si sigue asi lo tendré que despedir. Cómo cada mañana, alas 5:00, (___) batalla por poder levantar de su cómoda cama, suave como una nube, tan ligera como el viento. —No volveré a repetir tres veces, señorita (__). Debe ir a la escuela.—

Con lo ojos adormilados se levantó llendo al cuarto de baño donde la fría agua de la mañana toca su piel suave, ella mira a través del espejo, aquellas ojeras que lleva días sin irse y su mayor domo que la cuide cada minuto y segundo le entrega su uniforme. Lo que consiste en un sacó color negro con botones dorados y el escudo de la escuela "estrella dorada", una camisa de manga larga recién plancha sin ninguna arruga, una falda de cortes lisa negra que llega por arriba de las rodillas.

— Hoy no quiero ir a la escuela, dile al mayor domo Shon que no iré.— dijo (__) en la ducha, las gotas cayendo en su piel, hace que Miles de pensamientos se quede mirando fijamente. —Temo decirle que sus exámenes son en esta semana, sabemos que sacará 10 en todas sus pruebas. Su padre me dijo que no debe de faltar.— dijo, haciendo una mueca de disgusto se terminó de duchar y salió para que pueda vestirse. Ella coloca algunas lociones corporales haciendo masajes suaves hace que la flojera se vaya.

—Señorita, debemos de ayudarla. Deja que le arregle su hermoso cabello.— no hay cosa que no le agrade que las personas, reuniones por parte de su familia, la vida que tiene, que ir ala escuela, que le toquen su cabello es lo que le ha costado el empleo de 15 personas en 2 años. —Salgan de mi habitación, en 10 minutos bajo para desayunar.— con molestia en el entorno, todos salieron a excepción de su mayor domo personal estando ellos dos solos mira a la chica, dando los últimos toques en su maquillaje que es sombre negro y morado en los párpados, un poco de corrector para ocultar sus ojeras y bálsamo labial.

—Señorita ya tiene que bajar, su padre la está esperando. Será mejor que se comporté.— abriendo la puerta para que salieran pero ella no volteo, se quedó mirando fijamente al gran espejo que tiene en su tocador. Con pasos lentos, se apoya en sus hombros y con su mano acaricia su mejilla.
—Es extraño, tener que ser la niña perfecta en todo. Y dentro de tres días tengo que conocer a mi futuro novio. Cuando cumpla 18... —una sonrisa del mayor domo se dibuja en su rostro. (__) lo mira con repugnancia, solamente la quieren para hacer negocios.

— Deje de llorar, ese es su misión cuando llegó a este mundo. Debe de bajar ¡Ahora!— con tan solo tomar por sus brazos la llevo hasta el comedor donde estaba el jefe de la casa. El mayor domo se alejo para mostrarle el respeto. — Son las 6:00 AM del día lunes, llegas tarde por 30 segundos. Se más puntual.—

Asintió con la cabeza, ella miraba el piso con el miedo de que su padre la reprendiera. Con toda la calma camino hasta el comedor donde uno de las mucamas le trajo un plato de cerámica estilo japonés. El chef salió detrás para dar los saludos como regla. —Buenos días señor Roberto y señorita (__), el primer platillo se llama Buddha Jumps Over the Wall. Que consiste en aleta de tiburón, abulón, flor de hongo japonés, pepino de mar, pollo, jamón huan, cerdo y ginseng. Para el señor le tengo su vino favorito y para la señorita le tengo un excelente té traído de corea.—

—Debes de comer todo del plato, tienes examen de geografía, ciencias de la comunicación y psicóloga.— dijo tomando los cubiertos para que diera el primer bocado. — No quiero, sabes que no me gusta la comida proveniente del mar. ¡Tráeme otra comida, ahora!—

Todo quedó en silencio absoluto, las mucamas se quedaron sorprendidas, conociendo a la señorita, el calor de la sopa volar cayendo al contacto de la piel caliente.

— ¡Aaaaaaah!.—

— ¡Dije que me trajeras algo más! — el respetado hombre no hizo nada por el comportamiento de su única hija. Con los modales adecuados en la mesa de consumir los alimentos, solo con su codo le hizo una señal con media ceja arriba, tomando postura aclaro su garganta. — (__), modales.— Solo bajo la mirada intimidada.