𝑷𝒂𝒔𝒂𝒐' 𝑨 𝑷𝒐𝒕𝒐 / 𝑱𝒐𝒉𝒏𝒊𝒍.

johnny poeta.

─ ¡johnny por la conchetumare abre la puerta!─ gritaron desde afuera de pieza.

Con ese gritó ambos tortolos se despertaron, el johnny ma' asustao' que la chucha preguntó un;;

─ ¡¿qué pasó?!─ le tirito la pera.

─ ¡abre la puerta culiao'!─ mandó.

El johnny pudo reconocer esa voz cómo la de su hermana, así que con el culo a do' mano' le hizo señas al taeil pa' que se colocara algo mientras el hacía preguntas weonas pa' darle tiempo.

─ ¡¿por qué queri' que te abra?!─

─ ¡pa' sacarte la conchetumare!─ contestó entera bra la irene. ─  ¡ya se que fuiste vo' el que se comió mi manjarate, gusano reculiao'!─

¡Oh conchetumare! que la va a ver brijida el johnny, es que ¿cómo te vai' comer el manjarate de tu hermana la temperamental? es que teni' que ser muy weón, weón.

El johnny después de taparse la boca en un claro signo de "me pillaron conchetumare", miró a su pololo pa' ver si estaba listo, y puta, si lo estaba, cuando lo analizó no pueo' no chillar en su mente por lo chiquitito que se veía, osea el taeil andaba con su polera favorita, que encima le quedaba super grande, es que no podía verse tan nanai, weón, el johnny lo ama con su vida, lo ama más que su skate, lo ama más que su play, lo ama más que todo.

Cuando el johnny se iba acercar al taeil a darle un abracito y un besito, su hermana volvió a gritar.

─ ¡johnny si no abri' la puerta ahora te lo juro por lo ma' sagrao' que voy a romperla!─ se escuchó cómo pateó la puerta.

─ ¡ahora lo hago, hermanita!─ le volvió a tiritar la pera.

El johnny se dio la vuelta pa' buscar rápido su short de pijama y su polera músculosa, pero antes de que lo hiciera su pololo ya se la estaba pasando, le agradeció y se colocó to' terrible rápido.

Y antes de que su hermana volviera a patear la puerta, la abrió.

─ ¡ahora pídele a dios pa' que podai' seguir vivo!─ gritó apenas se le tiró a su hermano pa' pegarle.

─ ¡te compró otro, pero no me pegues!─ lloriqueo.

La irene le empezó a madar puros combitos en la espalda.

─ ¡si queri' que te dejé tranquilo vai' a tener que comprarme diez!─ explicó.

─ ¡si te lo juro, hermanita!─ aceptó.

La irene al escuchar eso le mandó un último combo y se alejó de el.

Cuando el johnny ya estaba a salvo, se ganó bien y suspiró pa' después hablar.

─ oye mal educada, no hay saludao' a mi pololo.─ le informó el yoni a su hermana.

─ ¿a quién?─ miró pa' la cama de su hermano chico y ahí vio a su cuñadito.─ ¡ay!, ¡hola wawita!─ se acercó a el pa' darle un abrazo.

─ hola irene.─ le sonrió.

─ ¿te quedaste aquí a- ─ se interrumpió a si misma.─ calmao', acá huele raro.─ se puso a oler.

La Irene abrió las meas pepas pa' después gritar un;;

─ ¡ta' pasao' a sexo!─ antes de que el johnny le alegara, salió corriendo de la pieza.

Los pololos se miraron sorprendidos.

─ wawa, ¿cuál es el olor a sexo?─ preguntó el yoni.