Entrenador

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POV. Theo🔥🧪

Ser el entrenador para una Universidad es bastante cansado, todos esperan ganar los trofeos en fútbol americano, o lanzarse al estrellato.

Mi lema en diciplina era enseñar con el ejemplo, aunque nadie me preparo para enfrentarme al corredor estrella, MÍ corredor estrella.

Liam Dumbar, gran chico y exelente jugador... Pero demasiado lindo para mi cordura. “Mi demonio" como dulcemente lo llamaba era bastante descarado en sus propuestas.

Solía ir quitándose la ropa desde la puerta del campo, dando todo un espectáculo a los jugadores, incluso se llegaba a desvestir frente a mi oficina para ir a las duchas moviendo las caderas.

O en los entrenamientos solía pedir ayuda y todos se morían por ponerle una mano encima, algo que nunca permití.

Por pena un día decidí llamarlo a mi oficina, quizás el chico no sabía que se veía todo su desfile desde mi silla.

- Hola Liam. Dije rascando mi nuca, cuando cerró la puerta.

- Me llamaba entrenador. Contestó batiendo las pestañas y sentándose frente a mi.

- Si, verás.... No quiero que lo mal entiendas pero... Eres mi jugador favorito, y quizás deberías de tener más cuidado de en donde te cambias, se que todos son chicos... Pero se han corrido algunos rumores sobre ti. Dije intentando sonar amable.

- Ohh, ¿Rumores?. Dijo con sorpresa fingida.

- Si, aunque creo que ya lo sabías. Dije pensando en que quizás el lo hacía con toda la intención de darme un infarto.

- Que lastima, y yo que pensaba en el espectáculo que le hacía al coreback McCall. Dijo fingiendo un puchero y parándose lentamente hasta llegar a mi lado y sentarse en el escritorio.

- ¿Qué tienes con McCall?. Dije queriendo ir a ahorcar al tipo, no podía tener nada con MÍ corredor.

- Mmmm, él da prácticas “privadas"... Susurró en mi oído.

- ¿Y no lo podrías conseguir de otra persona?. Pregunte pensando que entendía mal.

- Ohh no, dicen que McCall suele comer demasiado bien el culo, y folla como un dios... ¿Usted sabe cómo hacerlo?. Me dijo sentándose en mi regazo y fingiendo que no había dicho todo aquello.

- Yo amm... No sabía que contestar, pero si lo tome de la cintura, no podía permitir que se hiciera daño el corredor estrella.

- Quizás podría ayudarme, últimamente necesito algo muy bueno para acabar. Dijo besando mi mandíbula y empezando a frotarse contra mi.

Cerrando los ojos tome la poca coherencia que quedaba en mi cuerpo y lo detuve.

-Li... No está bien, yo soy... Dije soltandolo un poco pero sin apartarlo, algo había crecido dentro de mis pantalones y si él se seguía moviendo lo notaría.

-Mi entrenador, y quién quiero que me rompa el culo, además a quien le he dado todo un espectáculo desde las ventanas. Dijo empezando a subir y bajar sobre mi entrepierna.

Era la sensación más perfecta, y pude notar como el también estaba exitado, comenzando a acariciar su piel debajo de la playera note lo bien que su cuerpo se amoldaba a mis manos, no demasiado musculoso, pero tampoco delgado, sólo perfecto.

Comenzamos con algunos besos cortos y luego su lengua se hizo camino en mi boca, algo salvaje y delicioso...

Sus manos subían por mi cuello hasta mi cabello, separándonos por segundos cuando el oxígeno dejaba nuestros pulmones, y nuestras frentes se unían logrando que nuestros alientos se mezclaran.

Sus dedos traviesos llegaron a mi playera logrando alzarla y quitarla de mi cuerpo mientras el calor de su boca opacaba el frío del lugar... Todo esta de maravilla hasta que sonó el timbre que indicaba el fin de esta hora.

-Aghh, lo siento entrenador, pero tengo clase y odian que llegue tarde, ¿Lo veo después de clases para ir a su departamento, para terminar con lo que estudiábamos?. Dijo con los labios inchados y las pupilas dilatadas queriendo bajar de mi regazo y acomodarse la ropa de lo más normal.

-¿Qué tienes con McCall?. Dije serio poniendo mis manos en su cadera y presionando hacía abajo. Intentando regresar mi respiración a la normalidad.

-Solo las prácticas entrenador... ¿Es usted de relaciones serías?. Dijo sonando inocente y queriendo darme un beso.

-Solo no me gusta que jueguen con mis cosas. Dije evitando su beso, haciendo que me lo diera en la mejilla.

-Mmm no me gusta la palabra cosa, pero, ¿Le parecería bien si me salto la clase? Y vamos a su casa. Dijo y la idea sonó demasiado tentadora.

- No, sólo acaba tus clases y te veo luego. Le pedí levantándome a abrirle la puerta. Tenía mucho que pensar ahora.

- Por favor no se arrepienta, me gusta mucho. Lo veo a la salida. Dijo con un puchero y un besito al irse.

No sabía que actitud me gustaba más, la descarada o la tierna que me mostró al último... Solo sabía que tenía un problema en los pantalones y que explotaría si no lo resuelvo.

Solo cerré con seguro la oficina y volví a mi silla, comencé a acariciar mi entrepierna, imaginé a Liam haciendo un gran trabajo con su boquita y manos cálidas mientras me bajaba los pantalones y boxer.

Y empecé a recordar que tan delicioso se estira en los entrenamientos, dejando su culo en alto, incluso como se paseaba en toalla por los vestidores, mientras el agua recorre su pecho, hasta llegar a los lugares más prohibidos de su cuerpo.

Gracias a la acalorada plática que habíamos tenido soloun par de caricias bastaron para acabar manchando mi mano y un gruñido salió de mi garganta.

Si eso podía hacer una alucinación, que lograría Liam...


Fiel a su palabra al final del día cuando llegué a mi carro, Liam estaba recargado en la puerta sonriendo a su teléfono.

- ¿Le puedo ayudar en algo?. Dije intentando ser formal, lo que sucedió no estaba bien.

- ¿Ahora ya no soy Li?. Dijo batiendo las pestañas para morder su labio.

- ¿Que necesitas Liam?. Pregunté abriendo la puerta del conductor cuando se hizo a un lado.

- Por ahora me complacería tenerlo jodiendo mi trasero, aunque en una habitación... No me van los lugares públicos. Dijo sonriendo cuándo volví a mirarlo con la garganta seca.

- Liam, lo que sucedió no volverá a pasar y punto. Dije con la poca seguridad que me quedaba.

- Bueno lastima... Tendré que buscar a McCall. Dijo para dejar un beso en mi mejilla y empezar a caminar de regreso a la universidad.

- ¡Liam!. Grité su nombre sabiendo que no habría un paso para atrás.

- ¿Si entrenador?. Dijo regresando lo poco que había avanzado.

- Sube al auto ahora mismo. Me vi ordenándole mientras quitaba el seguro de la otra puerta.

- Mmmm, creo que los carros son muy pequeños para hacerlo. Dijo jugando con la puerta.

- Te demostraré que no, ahora sube. Dije comenzando a arrancar el auto.

🔥 Con todo... 🔥

TEEN WOLF HOT 🐺🔥Donde viven las historias. Descúbrelo ahora